¡Aguante! Parece que la inteligencia artificial ya llegó pa’ nuestros baretos, aunque la mayoría de nosotros andamos medio clueless del tema. Un estudio reciente del MICITT revela que casi siete de cada diez costarricenses dicen saber poquito o nada de qué es la IA, pero eso no significa que no estén pensando en cómo nos va a afectar. Al contrario, la gente cree que esta vaineta sí va a cambiarle al país en los próximos diez años, y la mayoría piensa que será pa' bien.
La encuesta nacional sobre la Percepción Social de la Ciencia y la Tecnología, hecha por el MICITT, dejó claro que estamos más familiarizados con la idea de la IA que con su funcionamiento técnico. Según los resultados, la mayoría de la población –¡una torta!, casi el 35%– asocia la IA con la tecnología en general, mientras que otro buen pedazo (cerca del 34%) ni siquiera sabe cómo describirla con una sola palabra. Esto no me extraña mucho, porque el tema es nuevo y, bueno, a muchos nos cuesta seguirle el rollo a estas cosas nuevas.
Pero ojo, que aunque no sepamos exactamente qué es, sí sabemos dónde le vemos utilidad. La salud lidera la lista con un contundente 72,8%, seguida por la educación con un 52,6%. Imagínate, la gente quiere que la IA les ayude con los checkeos médicos y a los niños con las tareas. ¡A ver cuándo alguien le pide ayuda pa’ lavar los platos!
Lo curioso es que, a pesar de verle potencial, la mayoría de la gente no se anima a probar los productos y servicios que usan IA. Solo un tercio dice estar dispuesto a usar asistentes virtuales, carros que se manejan solos o recomendaciones personalizadas. Les preocupa que estos sistemas tengan sesgos, que discriminen a algunas personas, y temen que reemplacen trabajos. ¡Qué sal! A nadie le gusta pensar que le van a quitar el brete.
Además, hay mucha desconfianza hacia las empresas privadas. La gente piensa que estas compañías no van a usar la IA de forma ética y responsable, y que van a aprovecharse de los datos personales de los usuarios. Y con razón, pues hemos visto muchas vainas raras últimamente... Uno no sabe en quién confiar, diay.
Si metemos lupa en los números, vemos que las mujeres y las personas con menor nivel educativo son las que más desconocimiento muestran sobre la IA. Mientras que los jóvenes, entre 15 y 34 años, y las personas con estudios universitarios son los que tienen más conocimientos. Esto nos da una pista de que necesitamos hacer más esfuerzos para educar a toda la población sobre este tema, especialmente a las mujeres y a aquellos que no tuvieron acceso a una buena educación.
Y hablando de educación, parece que todos están de acuerdo en que es importante enseñar sobre IA desde temprana edad. Casi el 73% de los encuestados está de acuerdo con que se incluya este tema en los programas escolares. ¡Qué chiva! Si empezamos a enseñarle a los niños desde pequeños, tal vez ellos sean los que nos expliquen cómo funciona esta vaina en el futuro.
En fin, la IA está generando incertidumbre y temor, principalmente por el tema del empleo. Muchos piensan que los robots nos van a quitar el trabajo, y eso les pone nerviosos. Por eso, creo que es urgente que el gobierno fortalezca las regulaciones sobre cómo se implementa la IA y que haga campañas informativas para explicarle a la gente cómo funciona y cuáles son sus beneficios. ¿Ustedes creen que deberían dar clases gratuitas de IA en los centros comunitarios para ayudar a la gente a entender mejor esta tecnología y prepararse para el futuro?
La encuesta nacional sobre la Percepción Social de la Ciencia y la Tecnología, hecha por el MICITT, dejó claro que estamos más familiarizados con la idea de la IA que con su funcionamiento técnico. Según los resultados, la mayoría de la población –¡una torta!, casi el 35%– asocia la IA con la tecnología en general, mientras que otro buen pedazo (cerca del 34%) ni siquiera sabe cómo describirla con una sola palabra. Esto no me extraña mucho, porque el tema es nuevo y, bueno, a muchos nos cuesta seguirle el rollo a estas cosas nuevas.
Pero ojo, que aunque no sepamos exactamente qué es, sí sabemos dónde le vemos utilidad. La salud lidera la lista con un contundente 72,8%, seguida por la educación con un 52,6%. Imagínate, la gente quiere que la IA les ayude con los checkeos médicos y a los niños con las tareas. ¡A ver cuándo alguien le pide ayuda pa’ lavar los platos!
Lo curioso es que, a pesar de verle potencial, la mayoría de la gente no se anima a probar los productos y servicios que usan IA. Solo un tercio dice estar dispuesto a usar asistentes virtuales, carros que se manejan solos o recomendaciones personalizadas. Les preocupa que estos sistemas tengan sesgos, que discriminen a algunas personas, y temen que reemplacen trabajos. ¡Qué sal! A nadie le gusta pensar que le van a quitar el brete.
Además, hay mucha desconfianza hacia las empresas privadas. La gente piensa que estas compañías no van a usar la IA de forma ética y responsable, y que van a aprovecharse de los datos personales de los usuarios. Y con razón, pues hemos visto muchas vainas raras últimamente... Uno no sabe en quién confiar, diay.
Si metemos lupa en los números, vemos que las mujeres y las personas con menor nivel educativo son las que más desconocimiento muestran sobre la IA. Mientras que los jóvenes, entre 15 y 34 años, y las personas con estudios universitarios son los que tienen más conocimientos. Esto nos da una pista de que necesitamos hacer más esfuerzos para educar a toda la población sobre este tema, especialmente a las mujeres y a aquellos que no tuvieron acceso a una buena educación.
Y hablando de educación, parece que todos están de acuerdo en que es importante enseñar sobre IA desde temprana edad. Casi el 73% de los encuestados está de acuerdo con que se incluya este tema en los programas escolares. ¡Qué chiva! Si empezamos a enseñarle a los niños desde pequeños, tal vez ellos sean los que nos expliquen cómo funciona esta vaina en el futuro.
En fin, la IA está generando incertidumbre y temor, principalmente por el tema del empleo. Muchos piensan que los robots nos van a quitar el trabajo, y eso les pone nerviosos. Por eso, creo que es urgente que el gobierno fortalezca las regulaciones sobre cómo se implementa la IA y que haga campañas informativas para explicarle a la gente cómo funciona y cuáles son sus beneficios. ¿Ustedes creen que deberían dar clases gratuitas de IA en los centros comunitarios para ayudar a la gente a entender mejor esta tecnología y prepararse para el futuro?
