Si ven a alguien que no tiene qué comer y tienen comida, compartan. A esa persona no le va a importar si creen o no en Dios.
Si pueden ayudar, ayuden. El que necesita ayuda no se va a poner a cuestionar la existencia o ausencia de Dios.
Si pueden persuadir a otros para que se unan en defensa de los indefensos, háganlo. El altruismo nunca será tildado de religioso o ateo.
En fin, en esta sociedad se necesitan más agentes de cambio; más conciencia social; más denuncia a la injusticia.
Los creyentes tenemos la obligación moral de ser los primeros en alimentar, ayudar y trabajar en grupo pero hasta la fecha lo que ha demostrado la religión es prácticamente lo contrario. En un país de mayoría creyente, no debería, al menos en teoría, existir la pobreza ya que es un principio bíblico fundamental ayudar al pobre y al necesitado.
Los no creyentes tienen consciencia del bienestar común y por ende pueden procurarlo con sus acciones.
Criticar sin accionar de nada sirve.
A los creyentes recuerden que por las acciones es que somos conocidos (lamentablemente la historia demuestra que las acciones han sido más negativas y en detrimento de la sociedad que positivas y en beneficio de ésta).
A los ateos recuerden que tienen la oportunidad de demostrar que aún sin creer en Dios se puede ayudar a los demás.
Todos podemos hacer algo desde nuestra posibilidad...ojalá que ese algo comience a ser colectivo. Yo soy el primero en apuntarme!
Si pueden ayudar, ayuden. El que necesita ayuda no se va a poner a cuestionar la existencia o ausencia de Dios.
Si pueden persuadir a otros para que se unan en defensa de los indefensos, háganlo. El altruismo nunca será tildado de religioso o ateo.
En fin, en esta sociedad se necesitan más agentes de cambio; más conciencia social; más denuncia a la injusticia.
Los creyentes tenemos la obligación moral de ser los primeros en alimentar, ayudar y trabajar en grupo pero hasta la fecha lo que ha demostrado la religión es prácticamente lo contrario. En un país de mayoría creyente, no debería, al menos en teoría, existir la pobreza ya que es un principio bíblico fundamental ayudar al pobre y al necesitado.
Los no creyentes tienen consciencia del bienestar común y por ende pueden procurarlo con sus acciones.
Criticar sin accionar de nada sirve.
A los creyentes recuerden que por las acciones es que somos conocidos (lamentablemente la historia demuestra que las acciones han sido más negativas y en detrimento de la sociedad que positivas y en beneficio de ésta).
A los ateos recuerden que tienen la oportunidad de demostrar que aún sin creer en Dios se puede ayudar a los demás.
Todos podemos hacer algo desde nuestra posibilidad...ojalá que ese algo comience a ser colectivo. Yo soy el primero en apuntarme!