¡Quiiiiiiibo, pura vida, foro! Aquí les va la nota fresca: nuestros médicos se van a Brazil a meterle duro a unas especializaciones que acá todavía andamos buscando. Sí, así como lo escucharon, la CCSS le puso pecho a mandar galenos a la Universidad de Sao Paulo, una de las mejores de toda Sudamérica, para que aprendan cositas nuevas y nos traigan eso para mejorar la salud del país. ¡Un alivio porque la cosa estaba dura!
La bronca es que llevábamos tiempo cortos de especialistas en varios hospitales, una pena grande para los pacientes que tenían que esperar meses, incluso años, para verse atendidos por alguien con experiencia en temas complicados. Parece que la CCSS se dio cuenta de que teníamos una brecha gigante – unos 3.000 especialistas faltantes, para ser exactos – y decidieron buscar soluciones a lo “made in Costa Rica”, pero echándole ojo a lo que funciona en otros lados. Como dice la presidenta de la CCSS, Mónica Taylor, esto es una ‘oportunidad de enorme valor’ para nosotros, los ticos.
Y no cualquier lugar, ¡ojo! Van a estudiar en el Hospital das Clínicas de la USP, que es un monstruo, el hospital más grande de toda América Latina. Tiene 80 años de historia y está lleno de institutos especializados. Imaginen aprender de esos maestros... ¡Eso sí es subir el nivel! Y lo mejor de todo es que no tienen que pasar por todo el papeleo de homologar sus títulos, porque van a entrar a un programa que es como hacer la residencia allá mismo. Así que directamente empiezan a chambear en cosas avanzadas.
El Colegio de Médicos y Cirujanos ya revisó los planes de estudio, asegurándose de que encajen con lo que necesitamos acá. Además, la idea es que esto no quede solo en médicos, sino que también abramos puertas para enfermeras y demás personal técnico. Porque la verdad, la salud pública necesita ayuda en todas partes, y si podemos capacitar a más gente, pues mejor. Ya hasta escogieron a los primeros tres, que van a empezar con medicina nuclear y anestesia del dolor. ¡A darle con todo!
Alexander Sánchez, el gerente médico de la Caja, nos contó que este convenio es super importante porque nos permite tener especialistas con los mismos estándares que hay en otros países. Eso significa menos listas de espera, más acceso a tratamientos modernos y mejores servicios para todos. Y ni hablar de cómo esto puede ayudar a resolver algunos problemas críticos que tenemos ahora mismo en ciertos hospitales… ¡una bendición!
Esto no es la primera vez que hacemos algo así, aunque hace mucho que no. En los años noventa tuvimos una colaboración con la Universidad Baylor en Estados Unidos, pero esto de ir a Brasil es diferente, porque vamos a estar metiendo hondo en programas de formación muy especializados. Es como si le diéramos un empuje extra a la calidad de nuestra salud pública. Se trata de invertir en nuestro talento, que ellos se vayan a perfeccionar y luego vuelvan a poner todo ese conocimiento a trabajar por nosotros.
Ahora, algunos dirán que podríamos estar invirtiendo el dinero en otras cosas, y claro, siempre habrá debates sobre prioridades. Pero, díganme la verdad, ¿qué vale más que la salud de los ticos? Tener médicos bien capacitados es fundamental para construir un país sano y próspero. Y si para eso tenemos que enviar a unos cuantos a estudiar afuera, pues que así sea. ¡Lo importante es que vuelvan con las pilas cargadas y listos para servirnos!
En fin, parece que estamos ante un cambio positivo para la salud en Costa Rica. Pero me pregunto, foro: ¿creen que este convenio es suficiente para solucionar realmente la falta de especialistas en el país, o deberíamos estar buscando otras alternativas? ¿Ustedes qué opinan?
La bronca es que llevábamos tiempo cortos de especialistas en varios hospitales, una pena grande para los pacientes que tenían que esperar meses, incluso años, para verse atendidos por alguien con experiencia en temas complicados. Parece que la CCSS se dio cuenta de que teníamos una brecha gigante – unos 3.000 especialistas faltantes, para ser exactos – y decidieron buscar soluciones a lo “made in Costa Rica”, pero echándole ojo a lo que funciona en otros lados. Como dice la presidenta de la CCSS, Mónica Taylor, esto es una ‘oportunidad de enorme valor’ para nosotros, los ticos.
Y no cualquier lugar, ¡ojo! Van a estudiar en el Hospital das Clínicas de la USP, que es un monstruo, el hospital más grande de toda América Latina. Tiene 80 años de historia y está lleno de institutos especializados. Imaginen aprender de esos maestros... ¡Eso sí es subir el nivel! Y lo mejor de todo es que no tienen que pasar por todo el papeleo de homologar sus títulos, porque van a entrar a un programa que es como hacer la residencia allá mismo. Así que directamente empiezan a chambear en cosas avanzadas.
El Colegio de Médicos y Cirujanos ya revisó los planes de estudio, asegurándose de que encajen con lo que necesitamos acá. Además, la idea es que esto no quede solo en médicos, sino que también abramos puertas para enfermeras y demás personal técnico. Porque la verdad, la salud pública necesita ayuda en todas partes, y si podemos capacitar a más gente, pues mejor. Ya hasta escogieron a los primeros tres, que van a empezar con medicina nuclear y anestesia del dolor. ¡A darle con todo!
Alexander Sánchez, el gerente médico de la Caja, nos contó que este convenio es super importante porque nos permite tener especialistas con los mismos estándares que hay en otros países. Eso significa menos listas de espera, más acceso a tratamientos modernos y mejores servicios para todos. Y ni hablar de cómo esto puede ayudar a resolver algunos problemas críticos que tenemos ahora mismo en ciertos hospitales… ¡una bendición!
Esto no es la primera vez que hacemos algo así, aunque hace mucho que no. En los años noventa tuvimos una colaboración con la Universidad Baylor en Estados Unidos, pero esto de ir a Brasil es diferente, porque vamos a estar metiendo hondo en programas de formación muy especializados. Es como si le diéramos un empuje extra a la calidad de nuestra salud pública. Se trata de invertir en nuestro talento, que ellos se vayan a perfeccionar y luego vuelvan a poner todo ese conocimiento a trabajar por nosotros.
Ahora, algunos dirán que podríamos estar invirtiendo el dinero en otras cosas, y claro, siempre habrá debates sobre prioridades. Pero, díganme la verdad, ¿qué vale más que la salud de los ticos? Tener médicos bien capacitados es fundamental para construir un país sano y próspero. Y si para eso tenemos que enviar a unos cuantos a estudiar afuera, pues que así sea. ¡Lo importante es que vuelvan con las pilas cargadas y listos para servirnos!
En fin, parece que estamos ante un cambio positivo para la salud en Costa Rica. Pero me pregunto, foro: ¿creen que este convenio es suficiente para solucionar realmente la falta de especialistas en el país, o deberíamos estar buscando otras alternativas? ¿Ustedes qué opinan?