¡Ay, Dios mío! La cosa está que arde con este caso del doctor Yerri Gustavo Estrada Ruiz. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) mandó un llamado de atención a Nicaragua, advirtiendo que la vida, integridad personal y salud del doctor están corriendo peligro. ¡Una torta más en esta novela!
Como muchos saben, el doctor Yerri, además de ser galeno, lleva tiempo metido en temas sociales y políticos. Antes era líder estudiantil, participaba en grupos como el Movimiento 19 de Abril y la CUDJ, ahí luchando por sus derechos allá por las manifestaciones del 2018. Eso parece haberle costado caro, porque desde entonces, según dicen, ha estado recibiendo amenazas y vigilancias constantes. ¡Imagínate andar así, con la mosca detrás de la oreja!
El cuento es largo: ya lo habían agarrado por 29 horas en el 2023, lo golpearon y quisieron sacarle información sobre su mamá, que se fue al refugio acá en Costa Rica. Luego siguió trabajando en el Hospital Amistad Japón en Granada, hasta que el otro día, pum, lo citan al despacho de la directora y ¡zas!, lo esperan policías para llevarlo preso. Sin orden judicial, sin nada, ¡qué despache!
Y ahora, ¿dónde anda el pobre hombre? Nadie sabe. Su familia dice que está incomunicado, sin acceso a médicos ni a abogados. Lo único que sabemos es gracias a unas fotos que anduvieron circulando en los medios oficiales nicaragüenses, donde aparece bien decaído, con la cabeza rapada y medio nervioso. Dicen que lo mostraron después de que Estados Unidos pidiera su liberación. ¡A ver si eso le sirve de algo, diay!
El abogado Salvador Marenco, que representa a la familia, ha soltado la bomba: asegura que lo están torturando y dando un trato horrible. Que lo tienen aislado, sin atención médica, bajo presión psicológica… ¡Qué barbaridad! Uno se queda pensando qué estará pasando ahí adentro. Se escucha terrible, ¿verdad?
Este caso ha generado mucha controversia y preocupación internacional. El gobierno de Costa Rica ha manifestado su inquietud y ha ofrecido asistencia consular al doctor y a su familia. Pero la verdad, los resultados aún no se ven. Hay que esperar y ver cómo se desarrolla esta pesadilla.
Muchos se preguntan qué papel jugará el presidente Biden, dada la presión que ha puesto sobre el régimen de Daniel Ortega. Algunos analistas creen que esto podría ser una oportunidad para mejorar las relaciones entre ambos países, mientras que otros piensan que la situación seguirá empeorando. En fin, el futuro es incierto. Esta vara está complicada, chunche.
Esta situación nos deja muchas preguntas en el aire. ¿Cómo podemos proteger a nuestros ciudadanos que enfrentan persecución política en otros países? ¿Será que el silencio internacional condena a personas inocentes? ¿Creen que la CIDH podrá realmente influir en el gobierno de Nicaragua para que respete los derechos humanos del Dr. Estrada y garantice su seguridad? ¡Den su opinión en el foro, compas! Necesitamos escuchar sus ideas sobre este brete.
Como muchos saben, el doctor Yerri, además de ser galeno, lleva tiempo metido en temas sociales y políticos. Antes era líder estudiantil, participaba en grupos como el Movimiento 19 de Abril y la CUDJ, ahí luchando por sus derechos allá por las manifestaciones del 2018. Eso parece haberle costado caro, porque desde entonces, según dicen, ha estado recibiendo amenazas y vigilancias constantes. ¡Imagínate andar así, con la mosca detrás de la oreja!
El cuento es largo: ya lo habían agarrado por 29 horas en el 2023, lo golpearon y quisieron sacarle información sobre su mamá, que se fue al refugio acá en Costa Rica. Luego siguió trabajando en el Hospital Amistad Japón en Granada, hasta que el otro día, pum, lo citan al despacho de la directora y ¡zas!, lo esperan policías para llevarlo preso. Sin orden judicial, sin nada, ¡qué despache!
Y ahora, ¿dónde anda el pobre hombre? Nadie sabe. Su familia dice que está incomunicado, sin acceso a médicos ni a abogados. Lo único que sabemos es gracias a unas fotos que anduvieron circulando en los medios oficiales nicaragüenses, donde aparece bien decaído, con la cabeza rapada y medio nervioso. Dicen que lo mostraron después de que Estados Unidos pidiera su liberación. ¡A ver si eso le sirve de algo, diay!
El abogado Salvador Marenco, que representa a la familia, ha soltado la bomba: asegura que lo están torturando y dando un trato horrible. Que lo tienen aislado, sin atención médica, bajo presión psicológica… ¡Qué barbaridad! Uno se queda pensando qué estará pasando ahí adentro. Se escucha terrible, ¿verdad?
Este caso ha generado mucha controversia y preocupación internacional. El gobierno de Costa Rica ha manifestado su inquietud y ha ofrecido asistencia consular al doctor y a su familia. Pero la verdad, los resultados aún no se ven. Hay que esperar y ver cómo se desarrolla esta pesadilla.
Muchos se preguntan qué papel jugará el presidente Biden, dada la presión que ha puesto sobre el régimen de Daniel Ortega. Algunos analistas creen que esto podría ser una oportunidad para mejorar las relaciones entre ambos países, mientras que otros piensan que la situación seguirá empeorando. En fin, el futuro es incierto. Esta vara está complicada, chunche.
Esta situación nos deja muchas preguntas en el aire. ¿Cómo podemos proteger a nuestros ciudadanos que enfrentan persecución política en otros países? ¿Será que el silencio internacional condena a personas inocentes? ¿Creen que la CIDH podrá realmente influir en el gobierno de Nicaragua para que respete los derechos humanos del Dr. Estrada y garantice su seguridad? ¡Den su opinión en el foro, compas! Necesitamos escuchar sus ideas sobre este brete.
