¡Ay, Dios mío! La tierra se movió otra vez, mae. Un temblor de 4.7 sacudió la Zona Sur de Costa Rica ayer a eso de las cinco y cuarenta de la tarde, dejando a varios vecinos sudando frío. Según la Red Sismológica Nacional, el jalone sentí’ hasta en San José, aunque ahí nomás no hubo reportes de mayores complicaciones.
La onda se sintió con fuerza en zonas como Golfito, Puerto Jiménez, y alrededores. Imagínate, la gente salió corriendo de sus casas, agarrándose a lo primero que encontraban. Algunos dicen que duró como quince segundos, otros juran que fueron treinta... pura percepción, brete. Lo cierto es que todos se asustaron un buen bocado.
Las autoridades de la Cruz Roja y el Sistema Nacional de Emergencias (SINAPEC) ya estaban activadas, listas para atender cualquier eventualidad. Revisaron hospitales, centros de salud y empezaron a levantar inventario para ver si hubo daños estructurales en viviendas o edificios públicos. Afortunadamente, hasta ahora, solamente algunos rayones en paredes y objetos que cayeron, nada grave, diay.
El epicentro, según nos informaron desde la RSN, quedó ubicado unos 69 kilómetros al oeste de Drake, en Osa. Ahí do'nde la selva es densa y hay poca población, así que eso ayudó a minimizar los riesgos. A pesar de eso, muchos turistas que se encuentran disfrutando de las playas de la costa pacífica se llevaron un susto considerable. Uno nunca sabe cuándo te va a dar un brinquito la naturaleza, ¿verdad?
Y claro, en redes sociales se encendió la mecedora. Fotos de platos temblando, vasos cayéndose y mensajes de preocupación inundaron Facebook e Instagram. Muchos usuarios preguntaban si era un signo del Apocalipsis, otros simplemente se burlaban diciendo “qué montón, lo justo para despertar el café”. Como siempre, la creatividad popular no falla, jeje.
Lo que preocupa un poco es que hemos tenido varios temblores de mediana intensidad en los últimos meses. Esto hace pensar si estamos entrando en una fase sísmica más activa. Los geólogos aseguran que Costa Rica está ubicada en una zona de alta actividad tectónica, así que estos movimientos son relativamente comunes, pero eso no significa que debamos bajarle al cuidado, chunches.
Ahora bien, hablando de esto, recordemos que es importante tener kits de emergencia listos en casa. Agua, alimentos no perecederos, linterna, radio, baterías… Ya saben, lo básico para sobrevivir unos días en caso de que la cosa se complique. No vaya a ser que nos agarre desprevenidos la próxima, porque no hay excusas. ¡Más vale prevenir que lamentar!
En fin, por ahora parece que todo quedó bajo control, pero la incertidumbre sigue flotando en el aire. La vida en la Zona Sur vuelve lentamente a la normalidad, aunque con una pizca extra de precaución. ¿Ustedes creen que deberíamos empezar a prepararnos mentalmente para más temblores, o es solo paranoia post-susto? Déjenme saber qué piensan en los comentarios, ¡soy curioso!
La onda se sintió con fuerza en zonas como Golfito, Puerto Jiménez, y alrededores. Imagínate, la gente salió corriendo de sus casas, agarrándose a lo primero que encontraban. Algunos dicen que duró como quince segundos, otros juran que fueron treinta... pura percepción, brete. Lo cierto es que todos se asustaron un buen bocado.
Las autoridades de la Cruz Roja y el Sistema Nacional de Emergencias (SINAPEC) ya estaban activadas, listas para atender cualquier eventualidad. Revisaron hospitales, centros de salud y empezaron a levantar inventario para ver si hubo daños estructurales en viviendas o edificios públicos. Afortunadamente, hasta ahora, solamente algunos rayones en paredes y objetos que cayeron, nada grave, diay.
El epicentro, según nos informaron desde la RSN, quedó ubicado unos 69 kilómetros al oeste de Drake, en Osa. Ahí do'nde la selva es densa y hay poca población, así que eso ayudó a minimizar los riesgos. A pesar de eso, muchos turistas que se encuentran disfrutando de las playas de la costa pacífica se llevaron un susto considerable. Uno nunca sabe cuándo te va a dar un brinquito la naturaleza, ¿verdad?
Y claro, en redes sociales se encendió la mecedora. Fotos de platos temblando, vasos cayéndose y mensajes de preocupación inundaron Facebook e Instagram. Muchos usuarios preguntaban si era un signo del Apocalipsis, otros simplemente se burlaban diciendo “qué montón, lo justo para despertar el café”. Como siempre, la creatividad popular no falla, jeje.
Lo que preocupa un poco es que hemos tenido varios temblores de mediana intensidad en los últimos meses. Esto hace pensar si estamos entrando en una fase sísmica más activa. Los geólogos aseguran que Costa Rica está ubicada en una zona de alta actividad tectónica, así que estos movimientos son relativamente comunes, pero eso no significa que debamos bajarle al cuidado, chunches.
Ahora bien, hablando de esto, recordemos que es importante tener kits de emergencia listos en casa. Agua, alimentos no perecederos, linterna, radio, baterías… Ya saben, lo básico para sobrevivir unos días en caso de que la cosa se complique. No vaya a ser que nos agarre desprevenidos la próxima, porque no hay excusas. ¡Más vale prevenir que lamentar!
En fin, por ahora parece que todo quedó bajo control, pero la incertidumbre sigue flotando en el aire. La vida en la Zona Sur vuelve lentamente a la normalidad, aunque con una pizca extra de precaución. ¿Ustedes creen que deberíamos empezar a prepararnos mentalmente para más temblores, o es solo paranoia post-susto? Déjenme saber qué piensan en los comentarios, ¡soy curioso!
