¡Ay, Dios mío! Parece que San José no para de darnos dolores de cabeza. Las estadísticas recién salidas confirman lo que muchos ya sabíamos: nuestra capital concentra el 40% del delito nacional, ¡y ocupa apenas el 1% del territorio!
Marcelo Solano, el jefe de la policía municipal, soltó la bomba durante una exposición, explicando que este panorama caótico es producto de una combinación explosiva de factores: hacinamiento extremo, cuarterías, precarios, y hasta tráfico de drogas. No es sorpresa para nadie que vivamos en una ciudad con tanta desigualdad.
Lo más impactante es la comparación que hace Solano. Resulta que la cantidad de personas que vive en los precarios josefinos supera la población combinada de cantones como Quepos, Garabito y Orotina. ¡Eso es pa' volverse loco! Imagínate, una ciudad dentro de la ciudad, con sus propios problemas y carencias.
Y ni hablar de las cifras globales. Si contáramos solamente a las familias que luchan día tras día en precarios y cuarterías, San José sería más grande que Monteverde, Turrubares, San Mateo e incluso Dota, cantones que se jactan de su belleza natural. ¡Nos estamos tragando a nosotros mismos, bretes!
Algunos de los puntos más críticos son La Carpio, León XIII, Los Guido, Cristo Rey, El Pochote, El Jardín y la Uruca. Zonas donde la gente se aprieta como sardinas en lata, con poco acceso a agua potable, salud y, lamentablemente, seguridad. ¡Qué vara tan pesada tienen que cargar estas comunidades!
Pero no todo es negativo, ¿eh? Aunque algunos funcionarios hayan hecho declaraciones cuestionables –como aquella del Ministro de Seguridad diciendo que solo “crece la zona roja”–, Solano enfatizó que hay esfuerzos conjuntos entre la policía, el OIJ y el Ministerio Público para intentar controlar la situación y buscar soluciones. Se nota que alguien todavía le pone ganas.
Esta realidad nos obliga a replantearnos muchas cosas. Necesitamos políticas habitacionales urgentes, programas de reordenamiento territorial, y recuperar espacios públicos para que sean seguros y accesibles para todos. Ya no podemos seguir ignorando la brecha que existe entre el lujo del centro y la pobreza de los barrios periféricos. ¡Se necesita un cambio radical, diay!
Ante este panorama, me pregunto: ¿Qué medidas concretas cree usted que deberían implementarse desde el gobierno y la sociedad civil para abordar los desafíos sociales y mejorar la calidad de vida en San José?
Marcelo Solano, el jefe de la policía municipal, soltó la bomba durante una exposición, explicando que este panorama caótico es producto de una combinación explosiva de factores: hacinamiento extremo, cuarterías, precarios, y hasta tráfico de drogas. No es sorpresa para nadie que vivamos en una ciudad con tanta desigualdad.
Lo más impactante es la comparación que hace Solano. Resulta que la cantidad de personas que vive en los precarios josefinos supera la población combinada de cantones como Quepos, Garabito y Orotina. ¡Eso es pa' volverse loco! Imagínate, una ciudad dentro de la ciudad, con sus propios problemas y carencias.
Y ni hablar de las cifras globales. Si contáramos solamente a las familias que luchan día tras día en precarios y cuarterías, San José sería más grande que Monteverde, Turrubares, San Mateo e incluso Dota, cantones que se jactan de su belleza natural. ¡Nos estamos tragando a nosotros mismos, bretes!
Algunos de los puntos más críticos son La Carpio, León XIII, Los Guido, Cristo Rey, El Pochote, El Jardín y la Uruca. Zonas donde la gente se aprieta como sardinas en lata, con poco acceso a agua potable, salud y, lamentablemente, seguridad. ¡Qué vara tan pesada tienen que cargar estas comunidades!
Pero no todo es negativo, ¿eh? Aunque algunos funcionarios hayan hecho declaraciones cuestionables –como aquella del Ministro de Seguridad diciendo que solo “crece la zona roja”–, Solano enfatizó que hay esfuerzos conjuntos entre la policía, el OIJ y el Ministerio Público para intentar controlar la situación y buscar soluciones. Se nota que alguien todavía le pone ganas.
Esta realidad nos obliga a replantearnos muchas cosas. Necesitamos políticas habitacionales urgentes, programas de reordenamiento territorial, y recuperar espacios públicos para que sean seguros y accesibles para todos. Ya no podemos seguir ignorando la brecha que existe entre el lujo del centro y la pobreza de los barrios periféricos. ¡Se necesita un cambio radical, diay!
Ante este panorama, me pregunto: ¿Qué medidas concretas cree usted que deberían implementarse desde el gobierno y la sociedad civil para abordar los desafíos sociales y mejorar la calidad de vida en San José?