Ay, mae, qué pena... La tranquilidad matutina de Santa Bárbara de Heredia se vio interrumpida por un terrible accidente que dejó a todos consternados. Un camión recolector de basura, aparentemente con una falla mecánica, se salió de control y chocó contra un muro, causando la muerte instantánea de su conductor. Como decimos acá, pura sal.
Se trata de Álvaro Calero, un trabajador de Rabsa que llevaba varios años sirviendo a la comunidad recogiendo la basura. Según fuentes cercanas a la municipalidad, don Álvaro era un mae dedicado y siempre dispuesto a echarle ganas al brete. Ahora, la familia y los compañeros de trabajo lamentan profundamente su partida. ¡Qué pena tremenda!
El accidente ocurrió pasadas las doce cuarenta y ocho de la mañana en la calle El Cerro, en el sector de Rosales. Testigos aseguran que el camión descendía por una cuesta bastante pronunciada cuando empezó a acelerar sin control. El conductor, en un acto desesperado, tocó insistentemente el claxon para advertir a los demás conductores, pero fue inútil.
Un video que circuló rapidísimo en las redes sociales muestra cómo el camión iba perdiendo el control, tomando una velocidad alarmante. Se puede escuchar claramente el sonido del claxon resonando en la noche, mientras el vehículo se dirige directamente hacia el fatal desenlace. Da escalofríos ver cómo el destino te juega una mala vara.
Afortunadamente, gracias a la rápida reacción del conductor, dos de sus compañeros lograron bajar del camión justo antes del impacto. Ellos resultaron ilesos y pudieron brindar información valiosa a las autoridades. Imagínate la bronca que debieron pasar viendo todo eso, ¡qué susto!
Ahora, la Fiscalía y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) están investigando a fondo lo sucedido para determinar las causas exactas del accidente. Lo que parece claro es que una falla mecánica, posiblemente en el sistema de frenos, fue el detonante de esta tragedia. Esto nos hace pensar, ¿cuántos otros camiones pesan con averías peligrosas?
Este tipo de incidentes reavivan el debate sobre las condiciones de seguridad de los vehículos pesados que operan en zonas de alta pendiente en nuestro país. Los trabajadores de recolección de basura, esos maes que hacen un trabajo esencial pero muchas veces invisible, se arriesgan día a día en carreteras peligrosas. Necesitamos medidas urgentes para protegerlos y evitar que tragedias como esta se repitan.
Es una pena que una falla mecánica haya truncado la vida de don Álvaro y dejado un vacío enorme en su familia y amigos. Este caso nos obliga a reflexionar sobre la importancia de mantener los vehículos en óptimas condiciones y garantizar la seguridad de los trabajadores. ¿Ustedes creen que deberíamos exigir revisiones técnicas más estrictas para los camiones recolectores de basura en zonas de riesgo, o piensan que las empresas ya están haciendo lo suficiente para prevenir accidentes como éste?
Se trata de Álvaro Calero, un trabajador de Rabsa que llevaba varios años sirviendo a la comunidad recogiendo la basura. Según fuentes cercanas a la municipalidad, don Álvaro era un mae dedicado y siempre dispuesto a echarle ganas al brete. Ahora, la familia y los compañeros de trabajo lamentan profundamente su partida. ¡Qué pena tremenda!
El accidente ocurrió pasadas las doce cuarenta y ocho de la mañana en la calle El Cerro, en el sector de Rosales. Testigos aseguran que el camión descendía por una cuesta bastante pronunciada cuando empezó a acelerar sin control. El conductor, en un acto desesperado, tocó insistentemente el claxon para advertir a los demás conductores, pero fue inútil.
Un video que circuló rapidísimo en las redes sociales muestra cómo el camión iba perdiendo el control, tomando una velocidad alarmante. Se puede escuchar claramente el sonido del claxon resonando en la noche, mientras el vehículo se dirige directamente hacia el fatal desenlace. Da escalofríos ver cómo el destino te juega una mala vara.
Afortunadamente, gracias a la rápida reacción del conductor, dos de sus compañeros lograron bajar del camión justo antes del impacto. Ellos resultaron ilesos y pudieron brindar información valiosa a las autoridades. Imagínate la bronca que debieron pasar viendo todo eso, ¡qué susto!
Ahora, la Fiscalía y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) están investigando a fondo lo sucedido para determinar las causas exactas del accidente. Lo que parece claro es que una falla mecánica, posiblemente en el sistema de frenos, fue el detonante de esta tragedia. Esto nos hace pensar, ¿cuántos otros camiones pesan con averías peligrosas?
Este tipo de incidentes reavivan el debate sobre las condiciones de seguridad de los vehículos pesados que operan en zonas de alta pendiente en nuestro país. Los trabajadores de recolección de basura, esos maes que hacen un trabajo esencial pero muchas veces invisible, se arriesgan día a día en carreteras peligrosas. Necesitamos medidas urgentes para protegerlos y evitar que tragedias como esta se repitan.
Es una pena que una falla mecánica haya truncado la vida de don Álvaro y dejado un vacío enorme en su familia y amigos. Este caso nos obliga a reflexionar sobre la importancia de mantener los vehículos en óptimas condiciones y garantizar la seguridad de los trabajadores. ¿Ustedes creen que deberíamos exigir revisiones técnicas más estrictas para los camiones recolectores de basura en zonas de riesgo, o piensan que las empresas ya están haciendo lo suficiente para prevenir accidentes como éste?