¡Buenas, mi gente del Foro! Agárrense que esto va con fuerza. Las exportaciones de Costa Rica llegaron a unos jugosos $15 mil millones, ¡y eso significa un crecimiento del 16%! Sí, leyeron bien, dieciséis por ciento. Un dato que nos pone a todos a celebrar, porque demuestra que estamos haciendo algo bien, aunque siempre hay cositas por pulir, claro.
Para ponerle un poco de contexto, este tipo de crecimiento sostenido era algo que muchos dudaban que pudiéramos lograr, especialmente con tanta incertidumbre económica mundial. Pero parece que los productos ticos tienen mucha demanda afuera, y eso habla bien del esfuerzo de nuestros productores y exportadores. Desde el café hasta los dispositivos médicos, pasando por frutas congeladas, la gente quiere lo hecho en Costa Rica.
Pero ojo, que no todo es miel sobre hojuelas. El verdadero héroe de esta historia, según los números oficiales, es el sector de equipos de precisión y médicos. Ese brete aportó casi la mitad de toda la movida exportadora, con un crecimiento impresionante del 33%. ¡Un varetazo! Eso sí que es dinamismo, muchachos. Nos confirma que apostarle a la innovación y a los servicios de valor agregado es el camino a seguir.
Después viene el sector agrícola, contribuyendo con un 17% y creciendo un 3%. Nada despreciable, claro, pero queda demostrado que todavía tenemos mucho que mejorar ahí. Tenemos tierras fértiles, clima privilegiado, pero necesitamos ser más eficientes y agregar valor a nuestras materias primas. Buscar mercados más rentables y dejar de depender tanto de los precios internacionales es fundamental.
Y hablando de mercados, América del Norte sigue siendo nuestro patio trasero número uno, absorbiendo el 51% de lo que vendemos. Europa tampoco se queda atrás, con un alza del 17%, gracias, entre otras cosas, a nuestro delicioso café y esos dispositivos médicos que andan pegando candela. América Central, aunque con un crecimiento más modesto del 6%, también está mostrando señales alentadoras.
La ministra a.i. de Comercio Exterior, Indiana Trejos, soltó unas palabras alentadoras, reiterando el compromiso del gobierno de seguir trabajando para fortalecer nuestra competitividad. Que bueno que lo digan, diay, pero ahora toca ver si se traducen en acciones concretas. Porque promesas hay muchas, pero resultados son los que cuentan al final.
Analizando la situación, creo que esta ola positiva en las exportaciones debería motivarnos a diversificar aún más nuestra economía. No podemos depender únicamente de unos pocos sectores ni de unos pocos mercados. Necesitamos explorar nuevas oportunidades, invertir en investigación y desarrollo, y preparar a nuestra gente para los empleos del futuro. Además, es crucial seguir mejorando la infraestructura logística para facilitar el comercio internacional.
En fin, tremenda noticia para el país. Pero, ¿será sostenible este ritmo de crecimiento? ¿Cómo podemos asegurarnos de que los beneficios lleguen a todos los rincones de Costa Rica, y no solo a unos cuantos privilegiados? Mi pregunta para ustedes, mis panas del Foro: ¿qué medidas creen que deberíamos tomar para capitalizar este impulso y construir una economía más próspera e inclusiva para todos?
Para ponerle un poco de contexto, este tipo de crecimiento sostenido era algo que muchos dudaban que pudiéramos lograr, especialmente con tanta incertidumbre económica mundial. Pero parece que los productos ticos tienen mucha demanda afuera, y eso habla bien del esfuerzo de nuestros productores y exportadores. Desde el café hasta los dispositivos médicos, pasando por frutas congeladas, la gente quiere lo hecho en Costa Rica.
Pero ojo, que no todo es miel sobre hojuelas. El verdadero héroe de esta historia, según los números oficiales, es el sector de equipos de precisión y médicos. Ese brete aportó casi la mitad de toda la movida exportadora, con un crecimiento impresionante del 33%. ¡Un varetazo! Eso sí que es dinamismo, muchachos. Nos confirma que apostarle a la innovación y a los servicios de valor agregado es el camino a seguir.
Después viene el sector agrícola, contribuyendo con un 17% y creciendo un 3%. Nada despreciable, claro, pero queda demostrado que todavía tenemos mucho que mejorar ahí. Tenemos tierras fértiles, clima privilegiado, pero necesitamos ser más eficientes y agregar valor a nuestras materias primas. Buscar mercados más rentables y dejar de depender tanto de los precios internacionales es fundamental.
Y hablando de mercados, América del Norte sigue siendo nuestro patio trasero número uno, absorbiendo el 51% de lo que vendemos. Europa tampoco se queda atrás, con un alza del 17%, gracias, entre otras cosas, a nuestro delicioso café y esos dispositivos médicos que andan pegando candela. América Central, aunque con un crecimiento más modesto del 6%, también está mostrando señales alentadoras.
La ministra a.i. de Comercio Exterior, Indiana Trejos, soltó unas palabras alentadoras, reiterando el compromiso del gobierno de seguir trabajando para fortalecer nuestra competitividad. Que bueno que lo digan, diay, pero ahora toca ver si se traducen en acciones concretas. Porque promesas hay muchas, pero resultados son los que cuentan al final.
Analizando la situación, creo que esta ola positiva en las exportaciones debería motivarnos a diversificar aún más nuestra economía. No podemos depender únicamente de unos pocos sectores ni de unos pocos mercados. Necesitamos explorar nuevas oportunidades, invertir en investigación y desarrollo, y preparar a nuestra gente para los empleos del futuro. Además, es crucial seguir mejorando la infraestructura logística para facilitar el comercio internacional.
En fin, tremenda noticia para el país. Pero, ¿será sostenible este ritmo de crecimiento? ¿Cómo podemos asegurarnos de que los beneficios lleguen a todos los rincones de Costa Rica, y no solo a unos cuantos privilegiados? Mi pregunta para ustedes, mis panas del Foro: ¿qué medidas creen que deberíamos tomar para capitalizar este impulso y construir una economía más próspera e inclusiva para todos?
