¡Ay, Dios mío! La cosa está dura, mi gente. Según el Observatorio Económico y Social de la U, perdimos más de 22 mil trabajos en el sector turístico el año pasado. Sí, ya escuchaste bien. Más de dos docenas de miles de familias andan preocupadas por cómo llegar a fin de mes, y esto a raíz de que menos gringos decidieron venir a disfrutar de nuestras playas y volcanes.
El reporte de la U salió este jueves, y pinta un panorama bien gris. Dicen que la llegada de turistas bajó un 1.8%, lo cual suena poquito, pero si le sumamos los números, estamos hablando de casi 43 mil turistas menos que el año anterior. ¡Una diferencia abismal, chunche!
Y ojo, porque no es solo que no lleguen tantos turistas este año. ¡No! Resulta que todavía no nos hemos recuperado ni tantito del golpe que nos dio la pandemia. Piensa en eso: antes de que apareciera el COVID, en 2019, teníamos cerca de 2.6 millones de visitantes. Ahora, estamos lejos de esos números, tratando de espantar mosquitos con escopetas, diay.
Si te preguntas qué sectores fueron los más afectados, prepárate: la provisión de alimentos y bebidas recibió el mayor golpe, con más de 14 mil empleos perdidos. Le siguen las agencias de viajes, los negocios culturales, el alquiler de carros y hasta los hoteles pequeños. Imagínate la cadena de efectos negativos que esto trae para todos, desde el palo de árbol que vende piña hasta el restaurante elegante de Escazú.
Lo más triste de todo, y esto sí duele, es que son las mujeres las que más han sufrido. Al parecer, más de 12 mil mujeres perdieron sus trabajos, comparado con apenas 9 mil hombres. Y encima, la mayoría de estas empleadas, la gran mayoría, están en la informalidad. Un brete el que les toca llevar, teniendo que resolver entre pagar las cuentas y mandar a los hijos a la escuela.
Ahora, los expertos dicen que hay varias razones detrás de esta crisis. Por ejemplo, la política comercial de Estados Unidos, nuestro socio comercial número uno, anda medio retorcida, y el hecho de que el colón esté más fuerte que nunca contra el dólar tampoco ayuda. Como turista, ¿quién va a querer cambiar más plata por un viaje aquí si el colón está tan valioso?
Pero no todo está perdido, mis queridos. La próxima administración que asuma tendrá que ponerlele a esto con ganas. El informe de la U también resalta algunos puntos clave que podemos mejorar: fortalecer nuestra marca turística, diversificar nuestros mercados, invertir en infraestructura y, sobre todo, cuidar nuestro medio ambiente. Porque si queremos seguir atrayendo turistas, tenemos que ofrecerles un país limpio, seguro y lleno de experiencias auténticas, ¿verdad?
En fin, la situación es complicada, pero no irreversible. Tenemos que ponernos las pilas, buscar soluciones creativas y trabajar juntos para reactivar el turismo. Pero dime tú, ¿qué medidas crees que debería tomar el gobierno para darle un impulso al sector turístico y recuperar esos empleos perdidos? ¿Sería más efectivo enfocarse en atraer nuevos mercados o en fidelizar a los turistas que ya nos visitan?
El reporte de la U salió este jueves, y pinta un panorama bien gris. Dicen que la llegada de turistas bajó un 1.8%, lo cual suena poquito, pero si le sumamos los números, estamos hablando de casi 43 mil turistas menos que el año anterior. ¡Una diferencia abismal, chunche!
Y ojo, porque no es solo que no lleguen tantos turistas este año. ¡No! Resulta que todavía no nos hemos recuperado ni tantito del golpe que nos dio la pandemia. Piensa en eso: antes de que apareciera el COVID, en 2019, teníamos cerca de 2.6 millones de visitantes. Ahora, estamos lejos de esos números, tratando de espantar mosquitos con escopetas, diay.
Si te preguntas qué sectores fueron los más afectados, prepárate: la provisión de alimentos y bebidas recibió el mayor golpe, con más de 14 mil empleos perdidos. Le siguen las agencias de viajes, los negocios culturales, el alquiler de carros y hasta los hoteles pequeños. Imagínate la cadena de efectos negativos que esto trae para todos, desde el palo de árbol que vende piña hasta el restaurante elegante de Escazú.
Lo más triste de todo, y esto sí duele, es que son las mujeres las que más han sufrido. Al parecer, más de 12 mil mujeres perdieron sus trabajos, comparado con apenas 9 mil hombres. Y encima, la mayoría de estas empleadas, la gran mayoría, están en la informalidad. Un brete el que les toca llevar, teniendo que resolver entre pagar las cuentas y mandar a los hijos a la escuela.
Ahora, los expertos dicen que hay varias razones detrás de esta crisis. Por ejemplo, la política comercial de Estados Unidos, nuestro socio comercial número uno, anda medio retorcida, y el hecho de que el colón esté más fuerte que nunca contra el dólar tampoco ayuda. Como turista, ¿quién va a querer cambiar más plata por un viaje aquí si el colón está tan valioso?
Pero no todo está perdido, mis queridos. La próxima administración que asuma tendrá que ponerlele a esto con ganas. El informe de la U también resalta algunos puntos clave que podemos mejorar: fortalecer nuestra marca turística, diversificar nuestros mercados, invertir en infraestructura y, sobre todo, cuidar nuestro medio ambiente. Porque si queremos seguir atrayendo turistas, tenemos que ofrecerles un país limpio, seguro y lleno de experiencias auténticas, ¿verdad?
En fin, la situación es complicada, pero no irreversible. Tenemos que ponernos las pilas, buscar soluciones creativas y trabajar juntos para reactivar el turismo. Pero dime tú, ¿qué medidas crees que debería tomar el gobierno para darle un impulso al sector turístico y recuperar esos empleos perdidos? ¿Sería más efectivo enfocarse en atraer nuevos mercados o en fidelizar a los turistas que ya nos visitan?