¡Aguante la gallina ciega! Pues resulta que Costa Rica le metió turbo a la agricultura y ahora tenemos más de 386 mil hectáreas dedicadas a sembrar cositas ricas. Según el INES, ¡la pura verdad!, durante el 2024 fuimos a toda barra sembrando desde aguacates hasta mangos, pasando por frijoles y maizales que dan sabor a nuestra mesa.
La noticia, presentada por Xinia Andrade, vocera del INES, nos dice que esto salió de la famosa “Encuesta Nacional Agropecuaria”. Aparentemente, los cultivos industriales son los que más terreno ocuparon, representando el 67.5% de los cultivos permanentes. Y pa’ que no digan que no les avisamos, ahí va la lista: caña de azúcar encabezando con fuerza, seguida de la palma aceitera y luego, humildemente, el café que siempre nos salva el pellejo.
Si hablamos de la tríada agroexportadora, pues ahí brillaron el café y el banano. El café, con sus 71 mil hectáreas, nos dio unas 360 mil toneladas, suficiente pa’ llenar tazas en todo el mundo. El banano, más trabajador aún, nos produjo más de 2.27 millones de toneladas que casi todas terminan afuera del país. ¡Pa'l extranjero, brete!
Pero no todo es exportación. La caña de azúcar, con su jugosito rendimiento cercano a los cuatro millones de toneladas, también es clave. Edgard Herrera, de Laica, nos explica que esa caña se convierte en un montón de cosas: azúcar, refrescos en polvo, melaza, gelatina e incluso etanol. ¡Un Chunche de posibilidades! Pa' que sepan, la industria azucarera le da bastante impulso a nuestra economía, aunque a veces hay algunas broncas con los precios.
Y ni olvidemos los cultivos anuales, esos que cosechamos rápido. El arroz sigue siendo importante, a pesar de que los agricultores andan con la mosca atrás de la oreja por las políticas de importación. Parece que el gobierno no sabe bien cómo manejar la cosa y eso afecta a nuestros campesinos, mándale saludos.
Andrade recalcó que los granos básicos ocupan el 57.5% de las áreas sembradas en esta categoría, y ahí el arroz vuelve a liderar la danza, seguido por el maíz y el frijol. Una combinación clásica que alimenta a familias enteras, diay, qué rico comer casero.
Esta movida agrícola es importantísima para nuestra economía, pero también plantea preguntas sobre sostenibilidad y seguridad alimentaria. ¿Estamos produciendo suficiente para alimentar a todos los costarricenses o estamos dependiendo demasiado de la exportación? También es crucial ver cómo podemos apoyar a nuestros agricultores, especialmente a los pequeños productores que luchan contra la competencia y los cambios climáticos.
En fin, parece que la agricultura tica anda a toda marcha, pero todavía hay mucho por hacer. ¿Ustedes creen que el gobierno está haciendo lo suficiente para proteger a nuestros agricultores y garantizar la seguridad alimentaria del país? Déjenme saber sus opiniones en el foro, ¡quiero escuchar sus ideas!”,
La noticia, presentada por Xinia Andrade, vocera del INES, nos dice que esto salió de la famosa “Encuesta Nacional Agropecuaria”. Aparentemente, los cultivos industriales son los que más terreno ocuparon, representando el 67.5% de los cultivos permanentes. Y pa’ que no digan que no les avisamos, ahí va la lista: caña de azúcar encabezando con fuerza, seguida de la palma aceitera y luego, humildemente, el café que siempre nos salva el pellejo.
Si hablamos de la tríada agroexportadora, pues ahí brillaron el café y el banano. El café, con sus 71 mil hectáreas, nos dio unas 360 mil toneladas, suficiente pa’ llenar tazas en todo el mundo. El banano, más trabajador aún, nos produjo más de 2.27 millones de toneladas que casi todas terminan afuera del país. ¡Pa'l extranjero, brete!
Pero no todo es exportación. La caña de azúcar, con su jugosito rendimiento cercano a los cuatro millones de toneladas, también es clave. Edgard Herrera, de Laica, nos explica que esa caña se convierte en un montón de cosas: azúcar, refrescos en polvo, melaza, gelatina e incluso etanol. ¡Un Chunche de posibilidades! Pa' que sepan, la industria azucarera le da bastante impulso a nuestra economía, aunque a veces hay algunas broncas con los precios.
Y ni olvidemos los cultivos anuales, esos que cosechamos rápido. El arroz sigue siendo importante, a pesar de que los agricultores andan con la mosca atrás de la oreja por las políticas de importación. Parece que el gobierno no sabe bien cómo manejar la cosa y eso afecta a nuestros campesinos, mándale saludos.
Andrade recalcó que los granos básicos ocupan el 57.5% de las áreas sembradas en esta categoría, y ahí el arroz vuelve a liderar la danza, seguido por el maíz y el frijol. Una combinación clásica que alimenta a familias enteras, diay, qué rico comer casero.
Esta movida agrícola es importantísima para nuestra economía, pero también plantea preguntas sobre sostenibilidad y seguridad alimentaria. ¿Estamos produciendo suficiente para alimentar a todos los costarricenses o estamos dependiendo demasiado de la exportación? También es crucial ver cómo podemos apoyar a nuestros agricultores, especialmente a los pequeños productores que luchan contra la competencia y los cambios climáticos.
En fin, parece que la agricultura tica anda a toda marcha, pero todavía hay mucho por hacer. ¿Ustedes creen que el gobierno está haciendo lo suficiente para proteger a nuestros agricultores y garantizar la seguridad alimentaria del país? Déjenme saber sus opiniones en el foro, ¡quiero escuchar sus ideas!”,