¡Ay, Dios mío, qué susto nos llevamos ayer en Aguas Zarcas! Las nubes se descargaron como si no hubiera mañana, y todos estábamos pegaditos al celular esperando lo peor. Pero bueno, parece que esta vez zafamos relativamente ilesos, aunque el corazón latiendo fuerte, ¿eh?
Las lluvias torrenciales de este miércoles por la tarde pusieron a temblar a varios vecinos de San Carlos, especialmente aquellos que viven cerca del río Aguas Zarcas. Imagínate, el agua cayendo a cántaros, el viento sacudiendo las casas… una verdadera escena de película. Por suerte, hasta donde sabemos, no hubo necesidad de activar mega refugios ni esas cosas feas.
La Municipalidad de San Carlos salió rápido al frente con un comunicado tratando de tranquilizarnos a todos, diciéndonos que, a pesar de la lluvia intensa, el caudal del río se mantiene, diay, más o menos normal. Eso es bueno, eso es bueno, porque nadie quiere ver el río crecido otra vez como en años anteriores. Todos todavía tenemos frescos esos recuerdos de cómo estaba la cosa, con gente evacuada y todo el pandemonio. Un brete complicado, señores.
Pero ojo, que no hay que bajar la guardia. Según informan desde la Comisión Municipal de Emergencias y los comités comunales, ellos siguen vigilantes, revisando los niveles de los ríos y arroyos en toda la zona de San Carlos. Se tocan con mantener todo bajo control, y eso es bueno, muy bueno. Uno agradece el esfuerzo, porque estos varones realmente se preocupan por nosotros.
Y claro, como dicen en el comunicado oficial, es importante que todos estemos atentos a la información que dan las autoridades. No vayan a creerse los rumores que circulan por WhatsApp y a meterse en líos innecesarios. ¡Qué torta andar asustándose por tonterías! Mejor quedarse informado por canales oficiales y seguir las recomendaciones que nos den.
En fin, creo que este episodio nos sirve para reflexionar sobre nuestra vulnerabilidad ante estos fenómenos climáticos. Ya estamos viendo que los aguaceros son cada año más intensos, y nos toca prepararnos mejor. ¿Será que necesitamos invertir más en sistemas de drenaje, mejorar las defensas fluviales, educar a la población sobre riesgos…? Hay mucho por hacer, mi clave. ¡Un chunche de trabajo!
Mirando hacia atrás, es inevitable recordar los problemas que hemos tenido en el pasado con inundaciones y deslizamientos en la zona. Recuerdo aquella vez que el puente colgante de [nombre de lugar afectado] casi se va al traste… ¡qué susto! Y cómo olvidarnos de las familias que perdieron sus hogares por los huaicos. Estos sucesos nos enseñan a valorar lo que tenemos y a prepararnos para lo que pueda venir.
Así que, mientras celebramos que esta vez nos salvamos de mayores daños, queda la pregunta abierta: ¿Realmente estamos haciendo todo lo posible para protegernos de futuras emergencias climáticas en Aguas Zarcas y en toda la provincia de Alajuela? ¿Qué medidas creen que deberían tomarse urgentemente para estar mejor preparados para el próximo chaparrón y evitar que la situación se vaya al traste?
Las lluvias torrenciales de este miércoles por la tarde pusieron a temblar a varios vecinos de San Carlos, especialmente aquellos que viven cerca del río Aguas Zarcas. Imagínate, el agua cayendo a cántaros, el viento sacudiendo las casas… una verdadera escena de película. Por suerte, hasta donde sabemos, no hubo necesidad de activar mega refugios ni esas cosas feas.
La Municipalidad de San Carlos salió rápido al frente con un comunicado tratando de tranquilizarnos a todos, diciéndonos que, a pesar de la lluvia intensa, el caudal del río se mantiene, diay, más o menos normal. Eso es bueno, eso es bueno, porque nadie quiere ver el río crecido otra vez como en años anteriores. Todos todavía tenemos frescos esos recuerdos de cómo estaba la cosa, con gente evacuada y todo el pandemonio. Un brete complicado, señores.
Pero ojo, que no hay que bajar la guardia. Según informan desde la Comisión Municipal de Emergencias y los comités comunales, ellos siguen vigilantes, revisando los niveles de los ríos y arroyos en toda la zona de San Carlos. Se tocan con mantener todo bajo control, y eso es bueno, muy bueno. Uno agradece el esfuerzo, porque estos varones realmente se preocupan por nosotros.
Y claro, como dicen en el comunicado oficial, es importante que todos estemos atentos a la información que dan las autoridades. No vayan a creerse los rumores que circulan por WhatsApp y a meterse en líos innecesarios. ¡Qué torta andar asustándose por tonterías! Mejor quedarse informado por canales oficiales y seguir las recomendaciones que nos den.
En fin, creo que este episodio nos sirve para reflexionar sobre nuestra vulnerabilidad ante estos fenómenos climáticos. Ya estamos viendo que los aguaceros son cada año más intensos, y nos toca prepararnos mejor. ¿Será que necesitamos invertir más en sistemas de drenaje, mejorar las defensas fluviales, educar a la población sobre riesgos…? Hay mucho por hacer, mi clave. ¡Un chunche de trabajo!
Mirando hacia atrás, es inevitable recordar los problemas que hemos tenido en el pasado con inundaciones y deslizamientos en la zona. Recuerdo aquella vez que el puente colgante de [nombre de lugar afectado] casi se va al traste… ¡qué susto! Y cómo olvidarnos de las familias que perdieron sus hogares por los huaicos. Estos sucesos nos enseñan a valorar lo que tenemos y a prepararnos para lo que pueda venir.
Así que, mientras celebramos que esta vez nos salvamos de mayores daños, queda la pregunta abierta: ¿Realmente estamos haciendo todo lo posible para protegernos de futuras emergencias climáticas en Aguas Zarcas y en toda la provincia de Alajuela? ¿Qué medidas creen que deberían tomarse urgentemente para estar mejor preparados para el próximo chaparrón y evitar que la situación se vaya al traste?