¡Ay, Dios mío! Aquí seguimos raspando pared en la hexagonal final camino al Mundial 2026. La Selección Costarricense rescató un sufrido empate 0-0 contra Honduras en Tegucigalpa, un resultado que nos mantiene vivos, pero aún lejos de asegurar nuestro pasaje directo al torneo. Tres empates en seis partidos… bueno, no estamos jugando mal, pero tampoco precisamente pintando cosas bonitas, ¿verdad?
La verdad, este empate sabe a poco. Sí, evitamos la derrota y sumamos un punto crucial, pero la esperanza sigue colgando de un hilo delgado. Ahora, la responsabilidad es toda nuestra. No podemos andar esperando que Haití o Honduras se regalen puntos. Tenemos que salir a buscarlos nosotros mismos, y con ganas, porque la cosa está apretadísima.
Con tres partidos restantes – Nicaragua en casa, Haití en Curazao y otra vez Honduras en el Nacional –, tenemos la oportunidad de darle la vuelta a esta historia. Pero ojo, no es tan sencillo como decir “ganar los tres y listo”. Cada partido es una batalla aparte, y estos rivales no van a ponernos las cosas fáciles. Sobre todo esos hondureños, que siempre nos hacen sudar la gota gorda.
Actualmente, estamos ahí aguantando con tres puntos, dos menos que Honduras y Haití. Si le ganamos a Nicaragua este lunes en el Estadio Nacional, llegaremos a seis puntos. Ese escenario nos permitiría estar empatados con Haitianos y Hondureños, que además se medirán entre ellos ese mismo día. Imagínate la tensión, ¡qué brete!
Lo ideal sería que todas estas selecciones acumulen un máximo de 14 puntos. Pero si logramos sacarle pecho y ganarle a Nicaragua, ese tope bajaría a 11. Claramente, esto nos da una ventaja psicológica importante, aunque no debemos confiar demasiado. En el fútbol, las sorpresas son moneda corriente, y nadie te regala nada.
De perder el lunes con Nicaragua, la cosa se pondrá fea, muy fea. Ambos equipos llegaríamos a seis puntos, y tendríamos que esperar los resultados de los otros partidos para ver quién se queda con la última opción de clasificar vía repechaje. ¡Qué sal! Nadie quiere pasar por eso, prefiero ir directo al Mundial y dejar de sufrir ya.
Las bajas de Alexis Gamboa y Orlando Galo por acumulación de tarjetas amarillas complican las cosas, pero también abren oportunidades para otros jugadores. Miguel Herrera tendrá que hacer ajustes tácticos ingeniosos para contrarrestar la ausencia de estos dos fijos. Se habla de meter a Celso Borges en el medio campo, y reacomodar a Jeyland Mitchell y Carlos Mora en la defensa. Veremos si la apuesta funciona. Necesitamos frescura y goles, y rápido.
Ahora bien, mi pregunta para ustedes, mis queridos foristas: ¿creen que la Selección tiene lo suficiente para superar este bache y conseguir el pase directo al Mundial 2026? ¿Cuál sería el cambio más urgente que debería implementar el cuerpo técnico para mejorar nuestro rendimiento? ¡Den sus opiniones con honestidad y sin pelos en la lengua! Que se arme el debate, ¡vamos a ver qué dicen!
La verdad, este empate sabe a poco. Sí, evitamos la derrota y sumamos un punto crucial, pero la esperanza sigue colgando de un hilo delgado. Ahora, la responsabilidad es toda nuestra. No podemos andar esperando que Haití o Honduras se regalen puntos. Tenemos que salir a buscarlos nosotros mismos, y con ganas, porque la cosa está apretadísima.
Con tres partidos restantes – Nicaragua en casa, Haití en Curazao y otra vez Honduras en el Nacional –, tenemos la oportunidad de darle la vuelta a esta historia. Pero ojo, no es tan sencillo como decir “ganar los tres y listo”. Cada partido es una batalla aparte, y estos rivales no van a ponernos las cosas fáciles. Sobre todo esos hondureños, que siempre nos hacen sudar la gota gorda.
Actualmente, estamos ahí aguantando con tres puntos, dos menos que Honduras y Haití. Si le ganamos a Nicaragua este lunes en el Estadio Nacional, llegaremos a seis puntos. Ese escenario nos permitiría estar empatados con Haitianos y Hondureños, que además se medirán entre ellos ese mismo día. Imagínate la tensión, ¡qué brete!
Lo ideal sería que todas estas selecciones acumulen un máximo de 14 puntos. Pero si logramos sacarle pecho y ganarle a Nicaragua, ese tope bajaría a 11. Claramente, esto nos da una ventaja psicológica importante, aunque no debemos confiar demasiado. En el fútbol, las sorpresas son moneda corriente, y nadie te regala nada.
De perder el lunes con Nicaragua, la cosa se pondrá fea, muy fea. Ambos equipos llegaríamos a seis puntos, y tendríamos que esperar los resultados de los otros partidos para ver quién se queda con la última opción de clasificar vía repechaje. ¡Qué sal! Nadie quiere pasar por eso, prefiero ir directo al Mundial y dejar de sufrir ya.
Las bajas de Alexis Gamboa y Orlando Galo por acumulación de tarjetas amarillas complican las cosas, pero también abren oportunidades para otros jugadores. Miguel Herrera tendrá que hacer ajustes tácticos ingeniosos para contrarrestar la ausencia de estos dos fijos. Se habla de meter a Celso Borges en el medio campo, y reacomodar a Jeyland Mitchell y Carlos Mora en la defensa. Veremos si la apuesta funciona. Necesitamos frescura y goles, y rápido.
Ahora bien, mi pregunta para ustedes, mis queridos foristas: ¿creen que la Selección tiene lo suficiente para superar este bache y conseguir el pase directo al Mundial 2026? ¿Cuál sería el cambio más urgente que debería implementar el cuerpo técnico para mejorar nuestro rendimiento? ¡Den sus opiniones con honestidad y sin pelos en la lengua! Que se arme el debate, ¡vamos a ver qué dicen!
