¡Aguante, Banco Nacional! Parece que nuestros bancos nacionales andan haciendo bien las cosas, porque ahora Standard & Poor's, esos señores gringos que evalúan a las empresas, les dieron una califiqué que no cualquier cosa. Le pusieron una 'BB-/B' con perspectiva positiva, lo cual, entre nos, es como decir que van por buen camino, y eso siempre es bueno pa' tranquilizarnos a todos.
Pa' entender la magnitud de esto, hay que saber quién es S&P. Imagínate que son los jueces de un concurso de belleza, pero en vez de ver quien tiene el mejor disfraz, analizan la salud financiera de bancos y países. Una opinión suya vale oro, porque influye en cómo otros inversionistas ven a Costa Rica. Esto significa que el Banco Nacional se ve sólido, aguanta el trago y tiene potencial para crecer.
Según el reporte de S&P, el Banco Nacional ha mantenido su liderazgo en el sistema bancario gracias a sus clientes fieles, a tener muchas opciones de productos financieros – desde créditos hasta cuentas de ahorro– y a una estrategia clara que busca mejorar su servicio. No es poca cosa, porque en tiempos donde todo cambia rápido, mantenerse firme requiere esfuerzo y visión. Como dicen por ahí, “pa'l progreso hay que darle maicito”.
Pero la verdadera bomba es esa perspectiva 'positiva'. Eso quiere decir que si la economía del país sigue caminando bien, si seguimos generando empleos y si logramos mantenernos competitivos en el mercado mundial, la calificación del Banco Nacional podría subir aún más. Y eso, mi pana, atrae inversión extranjera y ayuda a bajar las tasas de interés, lo cual beneficia a todos los costarricenses.
Claro que no todo es color de rosa. S&P también advierte que el futuro depende mucho de cómo vaya la economía general de Costa Rica y de si podemos conseguir préstamos internacionales en buenas condiciones. Si empezamos a batallar, ahí sí podrían cambiarles el chip y la calificación podría irse cuesta abajo. Tenemos que estar pendientes, como decimos, “ojos que brillan, hambre que da”.
Lo positivo es que el Banco Nacional cuenta con una base sólida de ahorradores – gente como tú y como yo que depositamos nuestro dinero en el banco– y tienen suficiente efectivo para cubrir sus obligaciones. Además, han demostrado que les importa el medio ambiente, como cuando lanzaron aquel bono azul para proteger los mares y los ríos. Eso demuestra que no solo piensan en el negocio, sino también en dejarle un planeta decente a nuestros hijos. Como dice el dicho, “el que planta árboles, nunca mira dónde sopla el viento”.
José Antonio Vázquez, el jefe de finanzas del Banco Nacional, estaba contento con el reconocimiento. Dijo que esto valida su plan y que seguirán apoyando a las pequeñas empresas, a la construcción de viviendas, al turismo y a la agricultura. Porque al final del día, esos son los pilares de nuestra economía y necesitan todo nuestro apoyo. Sin pymes ni agricultores, ¿qué íbamos a comer, chunches?
En fin, parece que estamos viendo señales positivas para la economía nacional y para la estabilidad del Banco Nacional. Pero, dime tú: ¿crees que esta calificación positiva es un indicio de que la economía costaricense realmente se está recuperando o es solo un espejismo momentáneo, y deberíamos seguir agarrándole duro a la situación fiscal del país?
Pa' entender la magnitud de esto, hay que saber quién es S&P. Imagínate que son los jueces de un concurso de belleza, pero en vez de ver quien tiene el mejor disfraz, analizan la salud financiera de bancos y países. Una opinión suya vale oro, porque influye en cómo otros inversionistas ven a Costa Rica. Esto significa que el Banco Nacional se ve sólido, aguanta el trago y tiene potencial para crecer.
Según el reporte de S&P, el Banco Nacional ha mantenido su liderazgo en el sistema bancario gracias a sus clientes fieles, a tener muchas opciones de productos financieros – desde créditos hasta cuentas de ahorro– y a una estrategia clara que busca mejorar su servicio. No es poca cosa, porque en tiempos donde todo cambia rápido, mantenerse firme requiere esfuerzo y visión. Como dicen por ahí, “pa'l progreso hay que darle maicito”.
Pero la verdadera bomba es esa perspectiva 'positiva'. Eso quiere decir que si la economía del país sigue caminando bien, si seguimos generando empleos y si logramos mantenernos competitivos en el mercado mundial, la calificación del Banco Nacional podría subir aún más. Y eso, mi pana, atrae inversión extranjera y ayuda a bajar las tasas de interés, lo cual beneficia a todos los costarricenses.
Claro que no todo es color de rosa. S&P también advierte que el futuro depende mucho de cómo vaya la economía general de Costa Rica y de si podemos conseguir préstamos internacionales en buenas condiciones. Si empezamos a batallar, ahí sí podrían cambiarles el chip y la calificación podría irse cuesta abajo. Tenemos que estar pendientes, como decimos, “ojos que brillan, hambre que da”.
Lo positivo es que el Banco Nacional cuenta con una base sólida de ahorradores – gente como tú y como yo que depositamos nuestro dinero en el banco– y tienen suficiente efectivo para cubrir sus obligaciones. Además, han demostrado que les importa el medio ambiente, como cuando lanzaron aquel bono azul para proteger los mares y los ríos. Eso demuestra que no solo piensan en el negocio, sino también en dejarle un planeta decente a nuestros hijos. Como dice el dicho, “el que planta árboles, nunca mira dónde sopla el viento”.
José Antonio Vázquez, el jefe de finanzas del Banco Nacional, estaba contento con el reconocimiento. Dijo que esto valida su plan y que seguirán apoyando a las pequeñas empresas, a la construcción de viviendas, al turismo y a la agricultura. Porque al final del día, esos son los pilares de nuestra economía y necesitan todo nuestro apoyo. Sin pymes ni agricultores, ¿qué íbamos a comer, chunches?
En fin, parece que estamos viendo señales positivas para la economía nacional y para la estabilidad del Banco Nacional. Pero, dime tú: ¿crees que esta calificación positiva es un indicio de que la economía costaricense realmente se está recuperando o es solo un espejismo momentáneo, y deberíamos seguir agarrándole duro a la situación fiscal del país?
