Después de casi tres décadas, Costa Rica ha sido elegida nuevamente para formar parte del Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el período 2024-2027. Este regreso marca un hito importante para el país, que no ocupaba este puesto desde 1996.
La ministra de Salud, Dra. Mary Munive, ha destacado que esta elección permitirá a Costa Rica tener una voz influyente en decisiones globales cruciales en materia de salud.
Este nombramiento refleja el reconocimiento a las políticas de salud de Costa Rica y su compromiso con la cooperación internacional. La Dra. Munive subrayó la necesidad de una respuesta coordinada para enfrentar problemas globales como las enfermedades crónicas, la salud mental, los desafíos migratorios y el cambio climático. Estos temas han cobrado aún más relevancia en el contexto post-pandemia, donde la colaboración internacional se vuelve indispensable.
La migración ha sido uno de los desafíos más significativos para el sistema de salud costarricense. La presión sobre los recursos sanitarios ha llevado al país a abogar por la implementación de herramientas digitales para gestionar la atención sanitaria de los migrantes y por la compra conjunta de medicamentos. Estas iniciativas buscan mejorar la eficiencia y sostenibilidad del sistema de salud, garantizando una atención inclusiva y equitativa.
En su discurso en Ginebra, la ministra también enfatizó la importancia de la salud digital y la inmunización. Instó a recuperar la confianza en la ciencia y en las prácticas clínicas, elementos fundamentales para lograr una salud accesible para todos. Además, insistió en la necesidad de fortalecer la cooperación subregional para implementar políticas de salud más efectivas.
El historial de participación de Costa Rica en el Consejo Ejecutivo de la OMS incluye dos periodos anteriores: de 1953 a 1956 y de 1993 a 1996. Este regreso no solo es un reconocimiento a su trayectoria en salud pública, sino también una oportunidad para influir en las políticas de salud a nivel mundial. El Consejo Ejecutivo, compuesto por 34 miembros con un mandato de tres años, tiene la responsabilidad de implementar las decisiones de la Asamblea de la Salud y asesorarla en su trabajo.
La participación de Costa Rica en este consejo tiene implicaciones significativas para la región centroamericana. Podrá abogar por políticas que beneficien a los países vecinos, especialmente en áreas como la compra conjunta de medicamentos y la respuesta a emergencias sanitarias. Esta representación es crucial para asegurar que las necesidades de los países en desarrollo sean consideradas en la toma de decisiones globales.
El papel de Costa Rica en el Consejo Ejecutivo de la OMS también ofrece una plataforma para compartir sus experiencias y mejores prácticas en salud pública. Este intercambio puede contribuir al aprendizaje y colaboración global, fortaleciendo la respuesta a desafíos comunes. La presencia de Costa Rica en el consejo es una oportunidad para que el país demuestre su liderazgo en salud global y reafirme su compromiso con la cooperación internacional.
El regreso de Costa Rica al Consejo Ejecutivo de la OMS es un hito significativo que resalta su compromiso con la salud global. En un mundo cada vez más interconectado, la cooperación y la colaboración son esenciales para enfrentar los desafíos de salud pública.
Costa Rica, con su enfoque en la salud digital, la inmunización y la cooperación regional, está bien posicionada para contribuir de manera significativa a estos esfuerzos globales.
La ministra de Salud, Dra. Mary Munive, ha destacado que esta elección permitirá a Costa Rica tener una voz influyente en decisiones globales cruciales en materia de salud.
Este nombramiento refleja el reconocimiento a las políticas de salud de Costa Rica y su compromiso con la cooperación internacional. La Dra. Munive subrayó la necesidad de una respuesta coordinada para enfrentar problemas globales como las enfermedades crónicas, la salud mental, los desafíos migratorios y el cambio climático. Estos temas han cobrado aún más relevancia en el contexto post-pandemia, donde la colaboración internacional se vuelve indispensable.
La migración ha sido uno de los desafíos más significativos para el sistema de salud costarricense. La presión sobre los recursos sanitarios ha llevado al país a abogar por la implementación de herramientas digitales para gestionar la atención sanitaria de los migrantes y por la compra conjunta de medicamentos. Estas iniciativas buscan mejorar la eficiencia y sostenibilidad del sistema de salud, garantizando una atención inclusiva y equitativa.
En su discurso en Ginebra, la ministra también enfatizó la importancia de la salud digital y la inmunización. Instó a recuperar la confianza en la ciencia y en las prácticas clínicas, elementos fundamentales para lograr una salud accesible para todos. Además, insistió en la necesidad de fortalecer la cooperación subregional para implementar políticas de salud más efectivas.
El historial de participación de Costa Rica en el Consejo Ejecutivo de la OMS incluye dos periodos anteriores: de 1953 a 1956 y de 1993 a 1996. Este regreso no solo es un reconocimiento a su trayectoria en salud pública, sino también una oportunidad para influir en las políticas de salud a nivel mundial. El Consejo Ejecutivo, compuesto por 34 miembros con un mandato de tres años, tiene la responsabilidad de implementar las decisiones de la Asamblea de la Salud y asesorarla en su trabajo.
La participación de Costa Rica en este consejo tiene implicaciones significativas para la región centroamericana. Podrá abogar por políticas que beneficien a los países vecinos, especialmente en áreas como la compra conjunta de medicamentos y la respuesta a emergencias sanitarias. Esta representación es crucial para asegurar que las necesidades de los países en desarrollo sean consideradas en la toma de decisiones globales.
El papel de Costa Rica en el Consejo Ejecutivo de la OMS también ofrece una plataforma para compartir sus experiencias y mejores prácticas en salud pública. Este intercambio puede contribuir al aprendizaje y colaboración global, fortaleciendo la respuesta a desafíos comunes. La presencia de Costa Rica en el consejo es una oportunidad para que el país demuestre su liderazgo en salud global y reafirme su compromiso con la cooperación internacional.
El regreso de Costa Rica al Consejo Ejecutivo de la OMS es un hito significativo que resalta su compromiso con la salud global. En un mundo cada vez más interconectado, la cooperación y la colaboración son esenciales para enfrentar los desafíos de salud pública.
Costa Rica, con su enfoque en la salud digital, la inmunización y la cooperación regional, está bien posicionada para contribuir de manera significativa a estos esfuerzos globales.
