Fuente: Elecciones 2010 y las personas con discapacidad - OPINIÓN - nacion.com
Adriana Retana Salazar Directora ejecutiva, Consejo Nacional de Rehabilitación y Educación Especial
La determinación acerca del área de acción del Estado, ha variado en los últimos años y, aunque es de común acuerdo que a ciertas poblaciones se les debe prestar una atención personalizada, la manera conceptual y práctica para lograr un progreso en la calidad de vida de las personas con discapacidad, es un proceso aún en construcción.
En el Consejo Nacional de Rehabilitación y Educación Especial, ente rector público en la materia de discapacidad en Costa Rica, hemos analizado con atención esta campaña electoral, en especial lo que se plantea respecto al tema, ya de por sí complejo y multifactorial.
Hay dos aspectos que nos parecen fundamentales en este proceso electoral: los elementos generales en el tratamiento del tema de discapacidad por los diversos actores políticos, y seguidamente algunos aspectos que debería tomar en cuenta la ciudadanía y el próximo gobierno sobre este tema.
Diálogo abierto. Es importante entender que las campañas políticas son más que la venta de un candidato como un producto; éstas deben ser un diálogo abierto con la ciudadanía para identificar sus necesidades básicas, sus preocupaciones y con respecto a esto generar soluciones a los problemas que afectan al país.
Los candidatos a puestos de elección popular deben analizar el entorno y las demandas de los ciudadanos y, analizados éstos enviar un mensaje con propuestas a los ciudadanos, esperando la retroalimentación de los votantes y así perfeccionar sus planes y las acciones a realizar en un posible gobierno. En el caso de las personas con discapacidad estas respuestas deben ser integrales y no solo coyunturales.
Las situaciones que viven las personas con discapacidad trascienden el plano electoral y no se deben utilizar simplemente para captar votos o como estrategias de comunicación. Remitir a lo emotivo es un mal de antaño que debe cambiarse por ideas concretas y claras acerca de lo que se planea realizar.
Los medios de comunicación masiva han brindado poca cobertura al tema discapacidad, además de esto, en la mayoría de debates no han contado con interpretación de lengua de señas u otros apoyos, no se ha mencionado el tema en la mayoría de estos espacios y cuando los candidatos se refieren a éste, lo hacen de manera superficial.
Mayor accesibilidad. El Tribunal Supremo de Elecciones ha realizado una tarea importante en el tema de accesibilidad del voto e inclusive ha manejado varios anuncios televisivos dirigidos a la población con discapacidad, además para facilitar el ejercicio del voto el día de las elecciones en cada centro electoral se cuenta con una serie de ayudas técnicas dispuestas para tal fin.
El 7 de febrero, nuestros funcionarios realizarán una observación a nivel nacional en los centros de votación para poder verificar que las personas con discapacidad votan en igualdad de condiciones, con información, apoyo, ayudas técnicas, infraestructura y equipamiento accesibles para todos y todas.
Analizando los diferentes planes de gobierno, hay solo algunas líneas cortas que mencionan el tema discapacidad, y aunque podríamos ampliar en estas promesas, nos parece más importante mencionar algunas acciones que debería tomar en cuenta el futuro gobierno.
Las acciones gubernamentales deben alejarse del asistencialismo imperante en años anteriores, las políticas sociales selectivas necesariamente, deben proponerse bajo un enfoque de derechos, y manejar el concepto de discapacidad dentro del contexto en el que las personas se desarrollan.
Bajo el paradigma de Derechos Humanos promovido en el CNREE, el Estado, más que brindarles una ayuda temporal les ofrece las herramientas, el asesoramiento y la capacitación para lograr el empoderamiento de este grupo de la población en la sociedad costarricense.
Se debe mejorar el cumplimiento de la legislación vigente, ley 7600 sobre Igualdad de Oportunidades para las Personas con Discapacidad y la 8661: Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y su Protocolo Facultativo, con medidas más contundentes hacia las instituciones estatales y privadas, generando espacios universales que permitan que todas las personas puedan desarrollarse dentro de una sociedad inclusiva.
Al menos cuatro aspectos claves son fundamentales hacia esta población:
k 1. La cobertura, accesibilidad y universalización de los servicios básicos como la educación y la salud.
k 2. Mejorar y ampliar la oferta de trabajo, incluyendo adaptaciones en el puesto de trabajo, ya que el desempleo es uno de los problemas más acuciantes que afectan a las personas con discapacidad y causal directa de la condición de pobreza y vulnerabilidad de muchos de ellos.
k 3. El acceso y la calidad de la información que reciben las personas con discapacidad.
k 4. El mejoramiento en las condiciones de infraestructura y opciones de modalidades de transporte y movilidad en el entorno para esta población.
El tema de las personas con discapacidad no debe ser mercadeado con discursos simplistas o promesas irreales.
Las acciones que se generen del futuro gobierno deben entender el nuevo escenario internacional cada vez más demandante y en constante cambio, pero sobre todo lanzamos la invitación para que respondan y se materialicen de acuerdo al enfoque de Derechos Humanos, universalidad y accesibilidad del espacio físico y político para potenciar el crecimiento personal y la calidad de vida de esta población y, por ende, de todas las personas, aspiración que todos los seres humanos pretendemos conquistar.
Adriana Retana Salazar Directora ejecutiva, Consejo Nacional de Rehabilitación y Educación Especial
La determinación acerca del área de acción del Estado, ha variado en los últimos años y, aunque es de común acuerdo que a ciertas poblaciones se les debe prestar una atención personalizada, la manera conceptual y práctica para lograr un progreso en la calidad de vida de las personas con discapacidad, es un proceso aún en construcción.
En el Consejo Nacional de Rehabilitación y Educación Especial, ente rector público en la materia de discapacidad en Costa Rica, hemos analizado con atención esta campaña electoral, en especial lo que se plantea respecto al tema, ya de por sí complejo y multifactorial.
Hay dos aspectos que nos parecen fundamentales en este proceso electoral: los elementos generales en el tratamiento del tema de discapacidad por los diversos actores políticos, y seguidamente algunos aspectos que debería tomar en cuenta la ciudadanía y el próximo gobierno sobre este tema.
Diálogo abierto. Es importante entender que las campañas políticas son más que la venta de un candidato como un producto; éstas deben ser un diálogo abierto con la ciudadanía para identificar sus necesidades básicas, sus preocupaciones y con respecto a esto generar soluciones a los problemas que afectan al país.
Los candidatos a puestos de elección popular deben analizar el entorno y las demandas de los ciudadanos y, analizados éstos enviar un mensaje con propuestas a los ciudadanos, esperando la retroalimentación de los votantes y así perfeccionar sus planes y las acciones a realizar en un posible gobierno. En el caso de las personas con discapacidad estas respuestas deben ser integrales y no solo coyunturales.
Las situaciones que viven las personas con discapacidad trascienden el plano electoral y no se deben utilizar simplemente para captar votos o como estrategias de comunicación. Remitir a lo emotivo es un mal de antaño que debe cambiarse por ideas concretas y claras acerca de lo que se planea realizar.
Los medios de comunicación masiva han brindado poca cobertura al tema discapacidad, además de esto, en la mayoría de debates no han contado con interpretación de lengua de señas u otros apoyos, no se ha mencionado el tema en la mayoría de estos espacios y cuando los candidatos se refieren a éste, lo hacen de manera superficial.
Mayor accesibilidad. El Tribunal Supremo de Elecciones ha realizado una tarea importante en el tema de accesibilidad del voto e inclusive ha manejado varios anuncios televisivos dirigidos a la población con discapacidad, además para facilitar el ejercicio del voto el día de las elecciones en cada centro electoral se cuenta con una serie de ayudas técnicas dispuestas para tal fin.
El 7 de febrero, nuestros funcionarios realizarán una observación a nivel nacional en los centros de votación para poder verificar que las personas con discapacidad votan en igualdad de condiciones, con información, apoyo, ayudas técnicas, infraestructura y equipamiento accesibles para todos y todas.
Analizando los diferentes planes de gobierno, hay solo algunas líneas cortas que mencionan el tema discapacidad, y aunque podríamos ampliar en estas promesas, nos parece más importante mencionar algunas acciones que debería tomar en cuenta el futuro gobierno.
Las acciones gubernamentales deben alejarse del asistencialismo imperante en años anteriores, las políticas sociales selectivas necesariamente, deben proponerse bajo un enfoque de derechos, y manejar el concepto de discapacidad dentro del contexto en el que las personas se desarrollan.
Bajo el paradigma de Derechos Humanos promovido en el CNREE, el Estado, más que brindarles una ayuda temporal les ofrece las herramientas, el asesoramiento y la capacitación para lograr el empoderamiento de este grupo de la población en la sociedad costarricense.
Se debe mejorar el cumplimiento de la legislación vigente, ley 7600 sobre Igualdad de Oportunidades para las Personas con Discapacidad y la 8661: Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y su Protocolo Facultativo, con medidas más contundentes hacia las instituciones estatales y privadas, generando espacios universales que permitan que todas las personas puedan desarrollarse dentro de una sociedad inclusiva.
Al menos cuatro aspectos claves son fundamentales hacia esta población:
k 1. La cobertura, accesibilidad y universalización de los servicios básicos como la educación y la salud.
k 2. Mejorar y ampliar la oferta de trabajo, incluyendo adaptaciones en el puesto de trabajo, ya que el desempleo es uno de los problemas más acuciantes que afectan a las personas con discapacidad y causal directa de la condición de pobreza y vulnerabilidad de muchos de ellos.
k 3. El acceso y la calidad de la información que reciben las personas con discapacidad.
k 4. El mejoramiento en las condiciones de infraestructura y opciones de modalidades de transporte y movilidad en el entorno para esta población.
El tema de las personas con discapacidad no debe ser mercadeado con discursos simplistas o promesas irreales.
Las acciones que se generen del futuro gobierno deben entender el nuevo escenario internacional cada vez más demandante y en constante cambio, pero sobre todo lanzamos la invitación para que respondan y se materialicen de acuerdo al enfoque de Derechos Humanos, universalidad y accesibilidad del espacio físico y político para potenciar el crecimiento personal y la calidad de vida de esta población y, por ende, de todas las personas, aspiración que todos los seres humanos pretendemos conquistar.