¡Ay, Dios mío, qué chimba de noticia nos cayó! El Grupo ICE, esos compas que siempre andan trabajando a destajo, nos soltaron un balance que parece sacado de un sueño. Parece mentira, pero este año cerraron con broche de oro en casi todas las áreas. Vamos a ver cómo le hicieron, porque la verdad, uno ya estaba pensando que todo iba a irse al traste.
Después de varios bretes, el ICE demostró que todavía tiene cuerda para tirar. No es ningún secreto que la economía mundial anda medio apagadita, pero ellos, contracorriente, reportaron un crecimiento del 4% en sus ingresos. ¡Eso sí que es darle patada al tablero! Y ni hablar del excedente operativo, que llegó hasta los ₡184.198 millones. Uno se queda boquiabierto, ¿verdad?
Pero eso no es todo, mi pana. Lo más impresionante es que pudieron reducir la deuda financiera en un 28% en los últimos tres años. La Contraloría no tardó en reconocerlo, y las calificadoras internacionales –Fitch Ratings y Moody's– también les pusieron puntos extra. Imagínate, ahora tienen mejores calificaciones, ¡como si fueran a ganar la Lotería! Esto significa que pueden pedir prestado con condiciones más favorables, lo cual les permite seguir invirtiendo en el país.
Ahora, hablemos de lo social, porque ahí también dieron certero golpe. Reactivaron el Programa de Electrificación Rural, llevando luz a 3.000 familias que nunca la habían visto. ¡Imagínate la diferencia que eso hace en sus vidas! Y lanzaron la primera red 5G del país gracias a RACSA. Con esa tecnología, uno puede descargar pelis en un santiamén. Ya nadie va a tener excusas para no estar al día con las series.
Y no olvidemos a la gente más vulnerable en la Gran Área Metropolitana. Gracias a la CNFL, miles de familias pudieron formalizar sus servicios eléctricos. Además, expandieron la red de fibra óptica como locos, conectando 78.720 hogares y más de 2.500 centros educativos públicos. ¡Una verdadera revolución digital para nuestros niños y jóvenes! Ya no tendrán que andar buscando Wi-Fi en las pulperías para hacer sus tareas.
En cuanto al medio ambiente, el ICE siguió demostrando que sabe cuidarnos el planeta. Producieron más de 509.000 árboles en sus viveros, ¡y casi 77.000 de esos eran especies en peligro de extinción! Protegieron más de 10.000 hectáreas de bosque y destinaron otra parte para restaurar los que ya estaban dañados. Y eso sin mencionar que lograron cubrir la demanda eléctrica durante todo el año, pese a que El Niño nos dio unos sustos de campeonato.
El Embalse Arenal, que parecía haber perdido la esperanza, se recuperó 14 metros entre mayo y diciembre. ¡Como si le hubieran puesto turbo! Y con el Programa Bandera Azul Ecológica, evitaron unas 46.700 toneladas de carbono equivalente. Así, poquito a poco, vamos mitigando los efectos del cambio climático. Se nota que el ICE está comprometido con dejarle un buen legado a las futuras generaciones.
Definitivamente, el ICE ha demostrado que se puede trabajar duro, innovar y cuidar el medio ambiente al mismo tiempo. Han logrado mantener la estabilidad financiera, impulsar el desarrollo tecnológico y proteger nuestro entorno natural. Pero dime, ¿crees que el gobierno debería invertir aún más en energías renovables para asegurar un futuro sostenible para Costa Rica, o consideras que están haciendo bien enfocándose en la eficiencia energética actual?
Después de varios bretes, el ICE demostró que todavía tiene cuerda para tirar. No es ningún secreto que la economía mundial anda medio apagadita, pero ellos, contracorriente, reportaron un crecimiento del 4% en sus ingresos. ¡Eso sí que es darle patada al tablero! Y ni hablar del excedente operativo, que llegó hasta los ₡184.198 millones. Uno se queda boquiabierto, ¿verdad?
Pero eso no es todo, mi pana. Lo más impresionante es que pudieron reducir la deuda financiera en un 28% en los últimos tres años. La Contraloría no tardó en reconocerlo, y las calificadoras internacionales –Fitch Ratings y Moody's– también les pusieron puntos extra. Imagínate, ahora tienen mejores calificaciones, ¡como si fueran a ganar la Lotería! Esto significa que pueden pedir prestado con condiciones más favorables, lo cual les permite seguir invirtiendo en el país.
Ahora, hablemos de lo social, porque ahí también dieron certero golpe. Reactivaron el Programa de Electrificación Rural, llevando luz a 3.000 familias que nunca la habían visto. ¡Imagínate la diferencia que eso hace en sus vidas! Y lanzaron la primera red 5G del país gracias a RACSA. Con esa tecnología, uno puede descargar pelis en un santiamén. Ya nadie va a tener excusas para no estar al día con las series.
Y no olvidemos a la gente más vulnerable en la Gran Área Metropolitana. Gracias a la CNFL, miles de familias pudieron formalizar sus servicios eléctricos. Además, expandieron la red de fibra óptica como locos, conectando 78.720 hogares y más de 2.500 centros educativos públicos. ¡Una verdadera revolución digital para nuestros niños y jóvenes! Ya no tendrán que andar buscando Wi-Fi en las pulperías para hacer sus tareas.
En cuanto al medio ambiente, el ICE siguió demostrando que sabe cuidarnos el planeta. Producieron más de 509.000 árboles en sus viveros, ¡y casi 77.000 de esos eran especies en peligro de extinción! Protegieron más de 10.000 hectáreas de bosque y destinaron otra parte para restaurar los que ya estaban dañados. Y eso sin mencionar que lograron cubrir la demanda eléctrica durante todo el año, pese a que El Niño nos dio unos sustos de campeonato.
El Embalse Arenal, que parecía haber perdido la esperanza, se recuperó 14 metros entre mayo y diciembre. ¡Como si le hubieran puesto turbo! Y con el Programa Bandera Azul Ecológica, evitaron unas 46.700 toneladas de carbono equivalente. Así, poquito a poco, vamos mitigando los efectos del cambio climático. Se nota que el ICE está comprometido con dejarle un buen legado a las futuras generaciones.
Definitivamente, el ICE ha demostrado que se puede trabajar duro, innovar y cuidar el medio ambiente al mismo tiempo. Han logrado mantener la estabilidad financiera, impulsar el desarrollo tecnológico y proteger nuestro entorno natural. Pero dime, ¿crees que el gobierno debería invertir aún más en energías renovables para asegurar un futuro sostenible para Costa Rica, o consideras que están haciendo bien enfocándose en la eficiencia energética actual?