No tanto cuándo como cuánto...
Diay yo no puedo decir cuándo es conveniente decidirse a gastar plata en una wila sino cuánto... mi límite lo pone cúanto es lo que estoy dispuesto a pagar a una chica de compañía contra lo que toca invertir en una wila que le guste a uno. Si la última se pone muy rogada, a ponerse vivo que puede ser una de esas wilas que solo chupan para dentro y andan buscando quién les pague tragos y la fiesta, peor aún si ni siquiera te da oportunidad. En este caso, vale más invertir en la chica de compañia, pues ya sabés que tenés asegurado los polvillos.
Diay yo no puedo decir cuándo es conveniente decidirse a gastar plata en una wila sino cuánto... mi límite lo pone cúanto es lo que estoy dispuesto a pagar a una chica de compañía contra lo que toca invertir en una wila que le guste a uno. Si la última se pone muy rogada, a ponerse vivo que puede ser una de esas wilas que solo chupan para dentro y andan buscando quién les pague tragos y la fiesta, peor aún si ni siquiera te da oportunidad. En este caso, vale más invertir en la chica de compañia, pues ya sabés que tenés asegurado los polvillos.