¡Paté!, el Programa Semilla anda celebrando esos diez añitos de darle muralla a los emprendedores y pymes del país. Pero no andan echando las campanas al aire solamente, porque ahora también van a estar manejando unos buenos billetes del Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD). ¡Esto sí que es chiva!
Imagínense, durante una década, Semilla ha sido como un abuelo sabio guiando a más de cuatro mil iniciativas, tanto acá adentro como afuera de nuestras fronteras. Han hecho un brete de trabajo ayudando a gente que necesita una mano amiga para hacer crecer sus negocios. No es pa’ bromear, este programa le ha dado un empujón tremendo a muchos maes.
Paola Rodríguez, la directora de Programa Semilla, nos explica que estos fondos nuevos tienen un propósito claro: “Abrirle el camino a esas personas que enfrentan más trabas para conseguir capital”. En otras palabras, quieren apoyar a aquellos que el sistema financiero tradicional les da largas. ¡Eso sí que es ponerse del lado de la gente!
Y ¿qué tan generosos van a ser? Pues cada proyecto tendrá la oportunidad de recibir hasta ¡cuatro millones de colones! Eso sí que es una boa ayuda para empezar con el pie derecho o meterle turbo a un negocio ya existente. Con eso, cualquiera puede tener la posibilidad de convertir su idea en realidad y darle dinamismo a nuestra economía.
Pero esperen, que hay más. Estos fondos del SBD vienen en dos modalidades distintas. Primero tenemos NEXO, que va enfocado en apoyarnos a los compañeros y compañeras con discapacidad que lideran sus propios negocios. Que estén al mando de la vara, ¡eso es lo importante!
Luego, tenemos CROCUS, un fondo gastronómico diseñado específicamente para ayudar a las comunidades rurales a rescatar y transformar esos productos típicos que nos hacen únicos. Piénselo: café de Tarrazú con un toque moderno, salsas picantes artesanales... ¡Un verdadero tesoro culinario esperando ser descubierto y aprovechado!
Si usted tiene un proyecto y quiere echarle ojo a esto, vaya corriendo a www.programasemilla.com. Ahí encontrará todos los requisitos y cómo participar. Buscan proyectos con ganas de crecer, que tengan impacto en la comunidad y que piensen en el medio ambiente. ¡Que no anden con rodeos, que sepan qué quieren hacer!
Estos últimos diez años, Semilla ha demostrado que se puede trabajar duro, ser inclusivo y adaptable, con un equipo que además tiene más del 50% de mujeres. Además de implementar el teletrabajo mucho antes de que se volviera obligatorio. Así que, dime tú, ¿crees que estas nuevas inyecciones de capital serán suficientes para realmente transformar el panorama del emprendimiento en Costa Rica y darle una oportunidad a quienes más lo necesitan, o necesitamos medidas aún más radicales para romper las barreras existentes?
Imagínense, durante una década, Semilla ha sido como un abuelo sabio guiando a más de cuatro mil iniciativas, tanto acá adentro como afuera de nuestras fronteras. Han hecho un brete de trabajo ayudando a gente que necesita una mano amiga para hacer crecer sus negocios. No es pa’ bromear, este programa le ha dado un empujón tremendo a muchos maes.
Paola Rodríguez, la directora de Programa Semilla, nos explica que estos fondos nuevos tienen un propósito claro: “Abrirle el camino a esas personas que enfrentan más trabas para conseguir capital”. En otras palabras, quieren apoyar a aquellos que el sistema financiero tradicional les da largas. ¡Eso sí que es ponerse del lado de la gente!
Y ¿qué tan generosos van a ser? Pues cada proyecto tendrá la oportunidad de recibir hasta ¡cuatro millones de colones! Eso sí que es una boa ayuda para empezar con el pie derecho o meterle turbo a un negocio ya existente. Con eso, cualquiera puede tener la posibilidad de convertir su idea en realidad y darle dinamismo a nuestra economía.
Pero esperen, que hay más. Estos fondos del SBD vienen en dos modalidades distintas. Primero tenemos NEXO, que va enfocado en apoyarnos a los compañeros y compañeras con discapacidad que lideran sus propios negocios. Que estén al mando de la vara, ¡eso es lo importante!
Luego, tenemos CROCUS, un fondo gastronómico diseñado específicamente para ayudar a las comunidades rurales a rescatar y transformar esos productos típicos que nos hacen únicos. Piénselo: café de Tarrazú con un toque moderno, salsas picantes artesanales... ¡Un verdadero tesoro culinario esperando ser descubierto y aprovechado!
Si usted tiene un proyecto y quiere echarle ojo a esto, vaya corriendo a www.programasemilla.com. Ahí encontrará todos los requisitos y cómo participar. Buscan proyectos con ganas de crecer, que tengan impacto en la comunidad y que piensen en el medio ambiente. ¡Que no anden con rodeos, que sepan qué quieren hacer!
Estos últimos diez años, Semilla ha demostrado que se puede trabajar duro, ser inclusivo y adaptable, con un equipo que además tiene más del 50% de mujeres. Además de implementar el teletrabajo mucho antes de que se volviera obligatorio. Así que, dime tú, ¿crees que estas nuevas inyecciones de capital serán suficientes para realmente transformar el panorama del emprendimiento en Costa Rica y darle una oportunidad a quienes más lo necesitan, o necesitamos medidas aún más radicales para romper las barreras existentes?