¡Ay, Dios mío! Acá en Costa Rica siempre pasa algo inesperado, ¿verdad, maes? Esta vez, la noticia viene desde San Rafael de Cerro de Quepos, donde un incendio sacudió a un vecindario entero, pero la historia tiene un giro digno de película. Resulta que la heroína del día es doña Ángela Flores, una señora de 59 años que, sin pensarlo dos veces, saltó a la acción para ayudar a apagar las llamas.
Todo comenzó este jueves cuando un incendio se desató en una vivienda de unos 200 metros cuadrados. Según el reporte de los bomberos, el fuego se propagó rápidamente por desconocidas razones. Imagínate el susto, la gente corriendo, el humo cubriendo todo… ¡qué despiche!, pero ahí apareció doña Ángela, lista para enfrentarse a las llamas.
Lo curioso de la historia es que doña Ángela es madre de Fabián Fallas, el mismo bombero encargado de liderar las labores de extinción. Al escuchar los gritos y ver el humo salir de la casa, doña Ángela no dudó ni un segundo. Corrió a buscar el extintor que guarda en su casa —gracias a los consejos de su hijo— y se sumó a los esfuerzos de los vecinos para controlar el fuego. ¡Una verdadera carga la reacción de la señora!
Y no fue cualquier cosa, maes. Doña Ángela, junto con otros vecinos que también tenían extintores, lograron controlar las llamas antes de que consumieran toda la estructura. De hecho, se salvó aproximadamente el 90% de la vivienda, evitando una pérdida aún mayor. ¡Qué tuanis la respuesta solidaria del vecindario!
Según los bomberos, el fuego afectó alrededor de 20 metros cuadrados, pero gracias a la intervención rápida de doña Ángela y los vecinos, se pudo evitar que la situación empeorara. El propietario de la vivienda, visiblemente emocionado, expresó su gratitud a doña Ángela y a todos los que colaboraron en la extinción del incendio. "Gracias a ella y a esos vecinos, la tragedia pudo haberse evitado", declaró entre lágrimas.
El bombero a cargo, Fabián Fallas, destacó la importancia de contar con extintores en casa y elogió la valentía de su madre. “Mi mamá es increíble, siempre ha sido una guerrera. No dudo que sus acciones marcaron la diferencia en esta emergencia,” comentó orgullosamente.
Este incidente sirve como un recordatorio de la importancia de estar preparados ante emergencias y de la fuerza de la comunidad tica. En momentos difíciles, la solidaridad y la colaboración son fundamentales para superar cualquier adversidad. Es admirable cómo la gente se une para ayudarse mutuamente, demostrando que acá en Costa Rica sí somos pura vida.
En fin, una historia llena de emoción, valentía y agradecimiento. Pero dime, ¿crees que todos los hogares deberían tener extintores y conocer cómo utilizarlos? ¿Y qué opinas de la actitud ejemplar de doña Ángela, quien arriesgó su propia seguridad para proteger a su familia y a sus vecinos?
Todo comenzó este jueves cuando un incendio se desató en una vivienda de unos 200 metros cuadrados. Según el reporte de los bomberos, el fuego se propagó rápidamente por desconocidas razones. Imagínate el susto, la gente corriendo, el humo cubriendo todo… ¡qué despiche!, pero ahí apareció doña Ángela, lista para enfrentarse a las llamas.
Lo curioso de la historia es que doña Ángela es madre de Fabián Fallas, el mismo bombero encargado de liderar las labores de extinción. Al escuchar los gritos y ver el humo salir de la casa, doña Ángela no dudó ni un segundo. Corrió a buscar el extintor que guarda en su casa —gracias a los consejos de su hijo— y se sumó a los esfuerzos de los vecinos para controlar el fuego. ¡Una verdadera carga la reacción de la señora!
Y no fue cualquier cosa, maes. Doña Ángela, junto con otros vecinos que también tenían extintores, lograron controlar las llamas antes de que consumieran toda la estructura. De hecho, se salvó aproximadamente el 90% de la vivienda, evitando una pérdida aún mayor. ¡Qué tuanis la respuesta solidaria del vecindario!
Según los bomberos, el fuego afectó alrededor de 20 metros cuadrados, pero gracias a la intervención rápida de doña Ángela y los vecinos, se pudo evitar que la situación empeorara. El propietario de la vivienda, visiblemente emocionado, expresó su gratitud a doña Ángela y a todos los que colaboraron en la extinción del incendio. "Gracias a ella y a esos vecinos, la tragedia pudo haberse evitado", declaró entre lágrimas.
El bombero a cargo, Fabián Fallas, destacó la importancia de contar con extintores en casa y elogió la valentía de su madre. “Mi mamá es increíble, siempre ha sido una guerrera. No dudo que sus acciones marcaron la diferencia en esta emergencia,” comentó orgullosamente.
Este incidente sirve como un recordatorio de la importancia de estar preparados ante emergencias y de la fuerza de la comunidad tica. En momentos difíciles, la solidaridad y la colaboración son fundamentales para superar cualquier adversidad. Es admirable cómo la gente se une para ayudarse mutuamente, demostrando que acá en Costa Rica sí somos pura vida.
En fin, una historia llena de emoción, valentía y agradecimiento. Pero dime, ¿crees que todos los hogares deberían tener extintores y conocer cómo utilizarlos? ¿Y qué opinas de la actitud ejemplar de doña Ángela, quien arriesgó su propia seguridad para proteger a su familia y a sus vecinos?
