Un Aplauso a OAS y equipo. :!: :!:
Gastos sin intereses comienzan a superar ingresos por impuestos
Reaparece peligroso déficit en las finanzas públicas
No hay registro de dicho faltante desde el 2001, que hay cifras comparables
Gobierno pide prestado para pagar intereses, lo cual crea más intereses
Patricia Leitón | [email protected]
Publicado: 2009/11/16
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Reapareció en las finanzas públicas un déficit que no se veía desde hace mucho tiempo.
Se trata del déficit primario, que es la diferencia entre los ingresos corrientes del Gobierno, que provienen principalmente de impuestos y los gastos, sin incluir el pago de intereses.
Desde el 2001, que hay cifras comparables, no hay registro de dicho déficit, aunque el Gobierno tenía déficit financiero, que es la diferencia entre los ingresos corrientes y los gastos totales.
En los últimos 12 meses que terminaron en setiembre, el déficit primario ascendió a ¢89.000 millones, lo cual representa casi medio punto del producto interno bruto.
¿Por qué es importante? El déficit primario es peligroso pues genera un círculo vicioso de endeudamiento.
Antes, cuando los ingresos por impuestos superaban a los gastos por intereses, el remanente podía usarse para pagar los intereses.
Ahora, el Gobierno tiene que pedir prestado para pagar los intereses, lo cual le generará más intereses en el futuro.
Si el país continúa por esta vía elevará cada vez más su endeudamiento.
El superávit primario que el país tuvo en los años anteriores contribuyó a que Costa Rica pudiera bajar la carga de la deuda pública, que es el monto de la deuda de las entidades públicas como porcentaje de la producción.
La carga de la deuda llegó a representar casi todo lo que el país producía en los años posteriores a la crisis de los 80.
Luego, con la renegociación de la deuda externa, se logró bajar casi a 60% de la producción, donde se mantuvo casi hasta el 2004.
A partir de ahí el porcentaje comenzó a bajar gracias, en parte, al superávit primario que permitía pagar intereses con el dinero de los impuestos.
En el 2008 la carga descendió a un 39%.
Para el 2009 y el 2010 el Ministerio de Hacienda prevé que la carga subirá tres puntos porcentuales cada año hasta cerca del 45% en el 2010.
Guillermo Zúñiga, exministro de Hacienda durante la actual administración, comentó que la reducción en el servicio de la deuda, cuando hubo superávit primario, permitió elevar la inversión.
“Cuando tuvimos superávit, bajamos la deuda y comprometimos menos los recursos en pagar el servicio de la deuda. Por ejemplo, hubo una reducción importante del gasto en intereses, que pudimos usar para financiar inversión productiva, incluida la inversión social. Como 2% del PIB (producto interno bruto) bajamos en intereses. Por el contrario, si la deuda sube, pues posiblemente habrá que enfrentar más intereses en el futuro, y esto afecta a la población”, comentó.
Hacia futuro. La transformación del superávit primario que tenía el país al déficit primario surgió por la fuerte caída que se registraron en los ingresos por impuestos y el constante incremento en el gasto.
La reversión de la tendencia pasa por un alza en los ingresos por impuestos o una baja en el gasto.
Hay diferentes posiciones sobre el camino que se debe seguir.
El Fondo Monetario Internacional, en las revisiones que ha realizado del país, ha recomendado una reforma fiscal que implique una ampliación de la base tributaria y el fortalecimiento de la administración tributaria.
Miguel Gutiérrez, director del programa Estado de La Nación, también urgió una reforma fiscal cuando se presentó el informe a finales del mes pasado.
Para el economista y exministro de Hacienda, Thelmo Vargas, la única forma de reducir la deuda es adoptando una política “pro-producción” para que la producción crezca aceleradamente y así pasar de tener un déficit a un superávit primario.
Vargas se opone a un incremento en los impuestos, pues considera que eso afectaría la producción. Así lo señaló en julio pasado, en una respuesta a este medio.
El exministro Zúñiga comentó que solo con la recuperación económica es difícil revertir la tendencia actual, pues la recuperación en la producción será lenta y así también la mejora en la recaudación de impuestos y, por otro lado, el país “debe seguir financiando los programas prioritarios, de focalización de inversión social, los programas universales, ampliar coberturas y seguir haciendo inversión llamemos “económica”, como carreteras, infraestructura en general, ciencia y tecnología, hospitales, y escuelas, por ejemplo. Bajo esta visión, posiblemente se requieran esfuerzos adicionales, tanto en recaudación, impuesto, y evaluación de gasto público”.
Se intentó obtener la opinión de otros exministros.
http://www.nacion.com/ln_ee/2009/noviem ... 59708.html
Gastos sin intereses comienzan a superar ingresos por impuestos
Reaparece peligroso déficit en las finanzas públicas
No hay registro de dicho faltante desde el 2001, que hay cifras comparables
Gobierno pide prestado para pagar intereses, lo cual crea más intereses
Patricia Leitón | [email protected]
Publicado: 2009/11/16
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Reapareció en las finanzas públicas un déficit que no se veía desde hace mucho tiempo.
Se trata del déficit primario, que es la diferencia entre los ingresos corrientes del Gobierno, que provienen principalmente de impuestos y los gastos, sin incluir el pago de intereses.
Desde el 2001, que hay cifras comparables, no hay registro de dicho déficit, aunque el Gobierno tenía déficit financiero, que es la diferencia entre los ingresos corrientes y los gastos totales.
En los últimos 12 meses que terminaron en setiembre, el déficit primario ascendió a ¢89.000 millones, lo cual representa casi medio punto del producto interno bruto.
¿Por qué es importante? El déficit primario es peligroso pues genera un círculo vicioso de endeudamiento.
Antes, cuando los ingresos por impuestos superaban a los gastos por intereses, el remanente podía usarse para pagar los intereses.
Ahora, el Gobierno tiene que pedir prestado para pagar los intereses, lo cual le generará más intereses en el futuro.
Si el país continúa por esta vía elevará cada vez más su endeudamiento.
El superávit primario que el país tuvo en los años anteriores contribuyó a que Costa Rica pudiera bajar la carga de la deuda pública, que es el monto de la deuda de las entidades públicas como porcentaje de la producción.
La carga de la deuda llegó a representar casi todo lo que el país producía en los años posteriores a la crisis de los 80.
Luego, con la renegociación de la deuda externa, se logró bajar casi a 60% de la producción, donde se mantuvo casi hasta el 2004.
A partir de ahí el porcentaje comenzó a bajar gracias, en parte, al superávit primario que permitía pagar intereses con el dinero de los impuestos.
En el 2008 la carga descendió a un 39%.
Para el 2009 y el 2010 el Ministerio de Hacienda prevé que la carga subirá tres puntos porcentuales cada año hasta cerca del 45% en el 2010.
Guillermo Zúñiga, exministro de Hacienda durante la actual administración, comentó que la reducción en el servicio de la deuda, cuando hubo superávit primario, permitió elevar la inversión.
“Cuando tuvimos superávit, bajamos la deuda y comprometimos menos los recursos en pagar el servicio de la deuda. Por ejemplo, hubo una reducción importante del gasto en intereses, que pudimos usar para financiar inversión productiva, incluida la inversión social. Como 2% del PIB (producto interno bruto) bajamos en intereses. Por el contrario, si la deuda sube, pues posiblemente habrá que enfrentar más intereses en el futuro, y esto afecta a la población”, comentó.
Hacia futuro. La transformación del superávit primario que tenía el país al déficit primario surgió por la fuerte caída que se registraron en los ingresos por impuestos y el constante incremento en el gasto.
La reversión de la tendencia pasa por un alza en los ingresos por impuestos o una baja en el gasto.
Hay diferentes posiciones sobre el camino que se debe seguir.
El Fondo Monetario Internacional, en las revisiones que ha realizado del país, ha recomendado una reforma fiscal que implique una ampliación de la base tributaria y el fortalecimiento de la administración tributaria.
Miguel Gutiérrez, director del programa Estado de La Nación, también urgió una reforma fiscal cuando se presentó el informe a finales del mes pasado.
Para el economista y exministro de Hacienda, Thelmo Vargas, la única forma de reducir la deuda es adoptando una política “pro-producción” para que la producción crezca aceleradamente y así pasar de tener un déficit a un superávit primario.
Vargas se opone a un incremento en los impuestos, pues considera que eso afectaría la producción. Así lo señaló en julio pasado, en una respuesta a este medio.
El exministro Zúñiga comentó que solo con la recuperación económica es difícil revertir la tendencia actual, pues la recuperación en la producción será lenta y así también la mejora en la recaudación de impuestos y, por otro lado, el país “debe seguir financiando los programas prioritarios, de focalización de inversión social, los programas universales, ampliar coberturas y seguir haciendo inversión llamemos “económica”, como carreteras, infraestructura en general, ciencia y tecnología, hospitales, y escuelas, por ejemplo. Bajo esta visión, posiblemente se requieran esfuerzos adicionales, tanto en recaudación, impuesto, y evaluación de gasto público”.
Se intentó obtener la opinión de otros exministros.
http://www.nacion.com/ln_ee/2009/noviem ... 59708.html