¡Al fin! Después de unos sustos bien gordos por las lluvias de fin de semana, el paso por el Cerro de la Muerte volvió a abrirse este lunes en la mañana. Los conductores que se mueven entre Pérez Zeledón y el resto del país pueden respirar tranquilos… por ahora. Porque, vamos a ser honestos, con esto del cambio climático, uno nunca sabe qué nos va a tocar aguantar.
Como muchos recordaremos, el MOPT cerró la carretera el sábado alrededor de las seis de la tarde, medio apurados porque las lluvias estaban haciendo bastante desastre. No querían arriesgarse a que hubiera deslizamientos o algo peor. Una medida preventiva, dicen ellos, y con toda razón. Las fotos que andaban circulando por WhatsApp eran de mantener a cualquiera despierto por la noche. Un río de barro ahí abajo, ¡qué despiche!
La verdad es que el Cerro de la Muerte siempre ha sido un brete. La altura, las curvas, el clima impredecible... Todo conspira para que cualquier pequeño problema se convierta en una crisis. No es para tomarselo a broma, y el MOPT lo tuvo claro al tomar medidas preventivas, aunque eso significara incomodar un poco a la gente. Pero bueno, la seguridad primero, ¿no?
Según el comunicado que echaron a volar por redes sociales, luego de hacerle una revisión bien completa a la carretera, decidieron que era seguro reabrirla. “Tras la inspección, se procede a la apertura de ruta 2, sector Cerro de la Muerte”, rezaba el mensaje. Vamos, que le dieron un vistazo rápido y dijeron: 'todo parece estar ok'. Esperemos que así sea, porque nadie quiere quedarse varado ahí arriba con niebla y frío.
Ahora, la gran pregunta es si van a seguir teniendo que cerrar la carretera con tanta frecuencia. Con las lluvias que hemos tenido últimamente, parece que estamos entrando en una época de aguacero constante. Ya no es cuestión de chaparrón ocasional, sino de tormentas torrenciales que te dejan sin habla. Y mientras más sube la temperatura global, más volátiles se ponen estos patrones climáticos, ¿entienden la vara?
Algunos expertos advierten que este tipo de fenómenos serán cada vez más comunes y severos. Nos toca acostumbrarnos a que los cierres de carreteras sean parte del día a día, especialmente en zonas altas y montañosas como el Cerro de la Muerte. Lo único que podemos esperar es que las autoridades estén preparadas para actuar rápido y eficiente ante cualquier emergencia.
Y hablando de preparativos, también sería bueno que los conductores estuvieran al tanto de las condiciones de la carretera antes de salir. Revisar el reporte del tiempo, llevar cadenas para los neumáticos, tener suficiente comida y agua… cosas básicas que podrían salvarles la vida en caso de quedar atrapados. ¡No hay que fiarse nomás! Este lugar es bonito, sí, pero también peligroso.
Así que, amigos, disfrutemos del hecho de que la carretera está abierta, pero mantengamos los ojos abiertos y la precaución al máximo. Ahora me pregunto… ¿creen que tendremos que empezar a considerar el Cerro de la Muerte como un punto crítico vulnerable que requiere de mejoras estructurales urgentes o simplemente seguimos esperando que las cosas se arreglen solas?
Como muchos recordaremos, el MOPT cerró la carretera el sábado alrededor de las seis de la tarde, medio apurados porque las lluvias estaban haciendo bastante desastre. No querían arriesgarse a que hubiera deslizamientos o algo peor. Una medida preventiva, dicen ellos, y con toda razón. Las fotos que andaban circulando por WhatsApp eran de mantener a cualquiera despierto por la noche. Un río de barro ahí abajo, ¡qué despiche!
La verdad es que el Cerro de la Muerte siempre ha sido un brete. La altura, las curvas, el clima impredecible... Todo conspira para que cualquier pequeño problema se convierta en una crisis. No es para tomarselo a broma, y el MOPT lo tuvo claro al tomar medidas preventivas, aunque eso significara incomodar un poco a la gente. Pero bueno, la seguridad primero, ¿no?
Según el comunicado que echaron a volar por redes sociales, luego de hacerle una revisión bien completa a la carretera, decidieron que era seguro reabrirla. “Tras la inspección, se procede a la apertura de ruta 2, sector Cerro de la Muerte”, rezaba el mensaje. Vamos, que le dieron un vistazo rápido y dijeron: 'todo parece estar ok'. Esperemos que así sea, porque nadie quiere quedarse varado ahí arriba con niebla y frío.
Ahora, la gran pregunta es si van a seguir teniendo que cerrar la carretera con tanta frecuencia. Con las lluvias que hemos tenido últimamente, parece que estamos entrando en una época de aguacero constante. Ya no es cuestión de chaparrón ocasional, sino de tormentas torrenciales que te dejan sin habla. Y mientras más sube la temperatura global, más volátiles se ponen estos patrones climáticos, ¿entienden la vara?
Algunos expertos advierten que este tipo de fenómenos serán cada vez más comunes y severos. Nos toca acostumbrarnos a que los cierres de carreteras sean parte del día a día, especialmente en zonas altas y montañosas como el Cerro de la Muerte. Lo único que podemos esperar es que las autoridades estén preparadas para actuar rápido y eficiente ante cualquier emergencia.
Y hablando de preparativos, también sería bueno que los conductores estuvieran al tanto de las condiciones de la carretera antes de salir. Revisar el reporte del tiempo, llevar cadenas para los neumáticos, tener suficiente comida y agua… cosas básicas que podrían salvarles la vida en caso de quedar atrapados. ¡No hay que fiarse nomás! Este lugar es bonito, sí, pero también peligroso.
Así que, amigos, disfrutemos del hecho de que la carretera está abierta, pero mantengamos los ojos abiertos y la precaución al máximo. Ahora me pregunto… ¿creen que tendremos que empezar a considerar el Cerro de la Muerte como un punto crítico vulnerable que requiere de mejoras estructurales urgentes o simplemente seguimos esperando que las cosas se arreglen solas?