¡Ay, Dios mío! Aquí seguimos con movidas raras. Resulta que el Ministerio Público anda tramitando la extradición de tres hombres a Estados Unidos, acusados de tráfico de drogas. La cosa se puso seria después de que fueran capturados con 70 kilos de cocaína aquí mismo, en nuestro país. ¡Qué torta!
Según la investigación, estos señores, Andrés Felipe Restrepo Uribe, Luis Alberto Sinisterra Lozano y Yon Freddy Sánchez Chavarro, tienen residencia o nacionalidad costarricense, lo que complica un poco el panorama. Pero parece que andaban metidos hasta el cuello en mandar cocaína a Miami, cosa que no se vale, obviamente. Ya van varios casos así que nos salen a la luz, diay… uno empieza a preguntarse qué está pasando.
Lo curioso es que Restrepo Uribe, además de estar involucrado en esto, se gana la vida como caddie y mensajero. ¿Un caddie traficante? Parece sacado de una novela, chunche. La información de la CCSS lo confirma, mostrando que lleva una vida relativamente normal, al menos en apariencia, porque esas redes sociales muestran una familia, una esposa y un niño. Ahí hay que ponerle lupa, y rápido.
Y ni hablar de los otros dos, Sinisterra Lozano y Sánchez Chavarro, quienes también cuentan con cédulas de residencia. Lo que ha salido a la luz es que los tres solían viajar bastante a Panamá, España y Colombia. Imagínate, iban y venían como si nada, mientras planeaban sus negocios turbios. Según el expediente de extradición, esos viajes eran parte de su operación logística para mover la droga, ¡qué nivel!
Las autoridades están revisando los registros migratorios con lupa, y los datos son contundentes. Por ejemplo, Restrepo Uribe entró al país desde Colombia apenas unos días antes de ser capturado. Sánchez Chavarro, por su lado, tenía una historia de viajes frecuentes a Colombia y una vez desapareció de Costa Rica sin regresar directamente. Sinisterra Lozano, misteriosamente, no aparece con muchos registros migratorios claros. Todo eso da mucho que pensar, ¿verdad?
La policía los atrapó el 1 de junio pasado en el Paseo Colón, escondiendo la cocaína en un compartimento secreto de un carro. ¡Se creyeron muy listos! Pero la coordinación entre la Fiscalía, la DEA y la Policía de Control de Drogas fue clave para pillarles in fraganti. Después de una compra controlada de un kilo de cocaína, le pusieron la mordaza y ahí quedaron. Ahora están pagando la penitencia en el centro penal, esperando ver qué pasa con la extradición.
No es la primera vez que vemos casos así, maé. Recordemos que hace poco detuvieron a José Villalobos López, alias Boligoma, requerido por Panamá. Y antes, varios otros individuos querían sacar tajada en Costa Rica, pero terminaron presos y extraditables. Esto demuestra que, aunque intentemos vivir tranquilos, siempre hay gente tratando de aprovecharse del brete. Parece que la pesca va a seguir siendo intensa, ¡y no precisamente de corvinos!
Con toda esta movida, me pregunto: ¿Cómo podemos fortalecer los controles fronterizos y la cooperación internacional para evitar que Costa Rica siga siendo utilizada como punto de tránsito para el narcotráfico? ¿Deberíamos endurecer las leyes para los extranjeros que cometen delitos en nuestro país, incluso si ya han obtenido la nacionalidad?
Según la investigación, estos señores, Andrés Felipe Restrepo Uribe, Luis Alberto Sinisterra Lozano y Yon Freddy Sánchez Chavarro, tienen residencia o nacionalidad costarricense, lo que complica un poco el panorama. Pero parece que andaban metidos hasta el cuello en mandar cocaína a Miami, cosa que no se vale, obviamente. Ya van varios casos así que nos salen a la luz, diay… uno empieza a preguntarse qué está pasando.
Lo curioso es que Restrepo Uribe, además de estar involucrado en esto, se gana la vida como caddie y mensajero. ¿Un caddie traficante? Parece sacado de una novela, chunche. La información de la CCSS lo confirma, mostrando que lleva una vida relativamente normal, al menos en apariencia, porque esas redes sociales muestran una familia, una esposa y un niño. Ahí hay que ponerle lupa, y rápido.
Y ni hablar de los otros dos, Sinisterra Lozano y Sánchez Chavarro, quienes también cuentan con cédulas de residencia. Lo que ha salido a la luz es que los tres solían viajar bastante a Panamá, España y Colombia. Imagínate, iban y venían como si nada, mientras planeaban sus negocios turbios. Según el expediente de extradición, esos viajes eran parte de su operación logística para mover la droga, ¡qué nivel!
Las autoridades están revisando los registros migratorios con lupa, y los datos son contundentes. Por ejemplo, Restrepo Uribe entró al país desde Colombia apenas unos días antes de ser capturado. Sánchez Chavarro, por su lado, tenía una historia de viajes frecuentes a Colombia y una vez desapareció de Costa Rica sin regresar directamente. Sinisterra Lozano, misteriosamente, no aparece con muchos registros migratorios claros. Todo eso da mucho que pensar, ¿verdad?
La policía los atrapó el 1 de junio pasado en el Paseo Colón, escondiendo la cocaína en un compartimento secreto de un carro. ¡Se creyeron muy listos! Pero la coordinación entre la Fiscalía, la DEA y la Policía de Control de Drogas fue clave para pillarles in fraganti. Después de una compra controlada de un kilo de cocaína, le pusieron la mordaza y ahí quedaron. Ahora están pagando la penitencia en el centro penal, esperando ver qué pasa con la extradición.
No es la primera vez que vemos casos así, maé. Recordemos que hace poco detuvieron a José Villalobos López, alias Boligoma, requerido por Panamá. Y antes, varios otros individuos querían sacar tajada en Costa Rica, pero terminaron presos y extraditables. Esto demuestra que, aunque intentemos vivir tranquilos, siempre hay gente tratando de aprovecharse del brete. Parece que la pesca va a seguir siendo intensa, ¡y no precisamente de corvinos!
Con toda esta movida, me pregunto: ¿Cómo podemos fortalecer los controles fronterizos y la cooperación internacional para evitar que Costa Rica siga siendo utilizada como punto de tránsito para el narcotráfico? ¿Deberíamos endurecer las leyes para los extranjeros que cometen delitos en nuestro país, incluso si ya han obtenido la nacionalidad?
