Ahora que EEUU y Brasil hacen alianza para buscar reducir las emisiones contaminantes a Chavez se le para la peluca, por que va a perder su imperialismo basado en el petróleo..
La Nación dijo:
Lula y Bush sellan una alianza centrada en el etanol, que inquieta a Chávez
Brasilia (AFP). El presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva y el estadounidense George W. Bush sellarán el viernes en Sao Paulo una alianza que pretende convertir al etanol en locomotora de la integración regional, una estrategia que preocupa al mandatario venezolano Hugo Chávez.
Ese proyecto fue criticado por Chávez, que ejerce su influencia ofreciendo petróleo más barato que el mercado.
Lula y Bush, que inicia en Sao Paulo una gira por cinco países latinoamericanos, también discutirán la reactivación de las negociaciones de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
"Si encontramos soluciones para el acuerdo de la OMC y para el biocombustible, ya estaremos haciendo un bien extraordinario a la humanidad", dijo Lula.
El buen entendimiento entre la primera potencia mundial y la primera de Sudamérica será ratificado a fin de mes, cuando Bush reciba a Lula en su residencia de descanso de Camp David.
"Nuestra relación con Estados Unidos hoy en día es íntima (...); ellos nunca nos valorizaron tanto", dijo el canciller Celso Amorim a la revista Carta Capital.
Esa evolución se dio pese a las críticas de Brasil a la guerra de Irak y a su resistencia al Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) impulsada por Washington.
"Brasil cometió el error de ser servil durante décadas. Ningún interlocutor respeta el servilismo", explicó Lula.
Estados Unidos aprecia el liderazgo de Brasil en la misión militar de la ONU en Haití, y los dos gobiernos elaboran una "lista" de países de otras zonas para cooperar en materia de seguridad, dijo el embajador de Washington en Brasilia, Clifford Sobel, al diario Valor.
Los dos dirigentes también hablarán, "obviamente", del interés de Brasil en obtener un asiento permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, indicó el subsecretario de asuntos políticos de la cancillería, Everton Vargas.
La principal apuesta es el etanol. Brasil y Estados Unidos son los mayores productores de ese alcohol carburante, menos contaminante y más barato que la gasolina.
En espera de que Estados Unidos suprima el arancel a la importación de etanol, la cooperación se orienta al desarrollo tecnológico y a instalar usinas en países de América Latina y el Caribe productores de caña de azúcar, la materia prima con que se lo fabrica en Brasil (en EEUU es el maíz).
Lula cree que el etanol puede convertir a Brasil en potencia energética; Estados Unidos quiere que le sirva para emitir menos gas carbónico y reducir su dependencia petrolera de países hostiles como Venezuela.
Chávez acusó por eso a Bush de tener un "plan económico" para desestabilizarlo y de querer apoderarse de tierras ajenas para plantar caña.
"Están buscando tierras en el Sur, quitándoles a los pobres la tierra para producir", afirmó Chávez en su programa radial.
Brasil trata de disipar esas inquietudes.
Lula dijo que Venezuela no era tema de su agenda con Bush y Amorim afirmó que "una buena relación entre Brasil y Estados Unidos refuerza la posibilidad de una buena relación entre el conjunto de América del Sur y Estados Unidos".
Lula, un ex líder sindical al frente de la décima economía mundial, se ve desafiado por la ola nacionalista de izquierda que se expande en el continente al amparo de Chávez.
"No somos los imperialistas que algunos dicen que somos, no somos hegemonistas como algunos quieren que seamos", declaró Lula tras una dura negociación con el presidente boliviano Evo Morales sobre los precios del gas vendido a Brasil.
"Hay una disputa por el liderazgo regional", pero a Brasil "no le interesa tener tensiones" con sus vecinos pues "su economía desproporcionadamente mayor que las demás le da un gran poder de disuasión", sostiene Candido Grzybowski, director del Instituto Brasileño de Análisis Sociales y Económicos.
En sus encuentros, Lula y Bush buscarán impulsar el comercio bilateral.
Estados Unidos es el principal mercado de las empresas brasileñas, aunque su participación en la facturación total de Brasil cayó de 25% en 2002 a 18% en 2006.
En 2006, las exportaciones de Brasil a Estados Unidos totalizaron 24.431 millones de dólares y las importaciones sumaron 14.689 millones.