¡Ay, Dios mío! Este sábado amanecimos con un buen sustazo. Un temblor de 5.6 sacudió el Pacífico Sur pasaditas las doce, justo cuando estábamos echando el almuerzo. El epicentro quedó a casi 60 kilómetros de Uvita, en Osa, pero se sintió hasta acá arriba en el Valle Central. ¡Imagínate!, algunos dijeron que les movió los adornos y todo.
Lo que preocupa es que esto no es un caso aislado, maes. Según el Observatorio Vulcanológico y Sismológico (Ovsicori), este es el quinto temblor con magnitud similar que le pega a la misma zona desde el lunes pasado. Parece que la Tierra se ha puesto quisquillosa y quiere sacudirnos un rato. El director del Ovsicori, Esteban Chaves, comentó que el temblor del martes, que llegó a 6 de magnitud, fue el más fuerte de toda esta ‘secuencia’.
Y ojo, porque la cosa no pinta tranquila. Desde el lunes, la zona se ha convertido en un festival de movimientos telúricos. ¡Más de 400 réplicas han reportado! Algunas bien superficiales, otras a unos 40 kilómetros de profundidad. Según los expertos, esto es resultado del juego de placas tectónicas –la de Cocos metiéndose por debajo de la del Caribe–, y eso, como sabemos, a veces le sale caro.
Chaves, el profe del Ovsicori, nos cuenta que esta es “una de las secuencias más activas” que han visto este año. Claramente, el planeta está sacudiendo el avispero en el Pacífico Sur. De hecho, ya pusieron fotos y videos en sus redes sociales mostrando cómo están monitoreando la actividad. Así que ya saben, si ven algo raro, mejor chequear el perfil de Ovsicori; ahí andan poniendo toda la data actualizada.
Ahora, vale aclarar que aunque estén saliendo temblecos seguido, esto no significa que vaya a haber un terremoto de proporciones bíblicas, tranquilos. Pero sí hay que estar atentos, prestarle atención a las recomendaciones de las autoridades y, sobre todo, revisar esos planes de evacuación que hicimos hace años y que seguro ya ni acordamos. Mejor prevenir que lamentar, ¿no?
Ovsicori insiste en que se mantengan informados y eviten compartir fake news por WhatsApp. Ya sabemos cómo se prende el mundo con cualquier cosita. Además, recuerden asegurar bien sus casas, fijar muebles pesados y tener a mano una mochila con lo esencial: agua, comida, linterna, radio… Todo eso que uno piensa que nunca va a necesitar, pero que luego puede salvarle la vida. ¡Mejor estar preparado!
Esta ‘vara’ sísmica nos recuerda que vivimos en un país volcánicamente activo y que la naturaleza siempre tiene la última palabra. Hay que respetar la Madre Tierra y entender que ella nos regala paisajes increíbles, pero también nos pone a prueba de vez en cuando. ¡Qué manera de recordarnos nuestra pequeñez!
Con tantos temblores últimamente, me pregunto: ¿Será que deberíamos empezar a considerar seriamente instalar sistemas de alerta temprana más sofisticados en nuestras escuelas y oficinas, o creen que la gente simplemente no le va a prestar atención aunque suene la alarma?
Lo que preocupa es que esto no es un caso aislado, maes. Según el Observatorio Vulcanológico y Sismológico (Ovsicori), este es el quinto temblor con magnitud similar que le pega a la misma zona desde el lunes pasado. Parece que la Tierra se ha puesto quisquillosa y quiere sacudirnos un rato. El director del Ovsicori, Esteban Chaves, comentó que el temblor del martes, que llegó a 6 de magnitud, fue el más fuerte de toda esta ‘secuencia’.
Y ojo, porque la cosa no pinta tranquila. Desde el lunes, la zona se ha convertido en un festival de movimientos telúricos. ¡Más de 400 réplicas han reportado! Algunas bien superficiales, otras a unos 40 kilómetros de profundidad. Según los expertos, esto es resultado del juego de placas tectónicas –la de Cocos metiéndose por debajo de la del Caribe–, y eso, como sabemos, a veces le sale caro.
Chaves, el profe del Ovsicori, nos cuenta que esta es “una de las secuencias más activas” que han visto este año. Claramente, el planeta está sacudiendo el avispero en el Pacífico Sur. De hecho, ya pusieron fotos y videos en sus redes sociales mostrando cómo están monitoreando la actividad. Así que ya saben, si ven algo raro, mejor chequear el perfil de Ovsicori; ahí andan poniendo toda la data actualizada.
Ahora, vale aclarar que aunque estén saliendo temblecos seguido, esto no significa que vaya a haber un terremoto de proporciones bíblicas, tranquilos. Pero sí hay que estar atentos, prestarle atención a las recomendaciones de las autoridades y, sobre todo, revisar esos planes de evacuación que hicimos hace años y que seguro ya ni acordamos. Mejor prevenir que lamentar, ¿no?
Ovsicori insiste en que se mantengan informados y eviten compartir fake news por WhatsApp. Ya sabemos cómo se prende el mundo con cualquier cosita. Además, recuerden asegurar bien sus casas, fijar muebles pesados y tener a mano una mochila con lo esencial: agua, comida, linterna, radio… Todo eso que uno piensa que nunca va a necesitar, pero que luego puede salvarle la vida. ¡Mejor estar preparado!
Esta ‘vara’ sísmica nos recuerda que vivimos en un país volcánicamente activo y que la naturaleza siempre tiene la última palabra. Hay que respetar la Madre Tierra y entender que ella nos regala paisajes increíbles, pero también nos pone a prueba de vez en cuando. ¡Qué manera de recordarnos nuestra pequeñez!
Con tantos temblores últimamente, me pregunto: ¿Será que deberíamos empezar a considerar seriamente instalar sistemas de alerta temprana más sofisticados en nuestras escuelas y oficinas, o creen que la gente simplemente no le va a prestar atención aunque suene la alarma?