Existen muchas verdades y mentiras en el supuesto “paraíso financiero” que se te trata de vender con una tarjeta de crédito, el problema es que no nos informamos ni vamos más allá en lo que se nos vende antes de poner nuestra firma, no soy especialista financiero pero espero poder aportar un poco a la duda del compañero, para eso voy a tratar de exponer algunas de ellas.
SI NO USO LA TARJETA NO PAGO NADA
Mentira.
Cuado usted obtiene la tarjeta, tiene que pagar ciertos seguros como robo, vida, desempleo, etc. Estos seguros varían según el tipo y clase de tarjeta que posea, es decir, que aunque no la use puede que tenga que pagar por esos seguros mes a mes.
De igual manera la mayoría de tarjetas le cobran un “impuesto” por administración o por otros rublos el cual es anual.
SI REALIZO UNA COMPRA EL MONTO SE DIVIDE EN EL NUMERO DE MESES QUE QUIERA, Y EL MONTO QUE ME DA LE AGREGO EL INTERES Y ESO ES LO QUE TERMINO PAGANDO.
OSEA QUE PAGANDO EL MINIMO SALGO DE LA DEUDA EN EL TIEMPO ESTIPULADO
Mentira.
De nuevo algunas tarjeta le cobran impuestos y seguros, los cuales son SOBRE EL SALDO ADEUDADO, es decir que la amortización se estará dando sobre el saldo MÁS LOS INTERESES y no sobre el monto final, es por eso que en algunos casos pagas, y pagas el mínimo, y vez que nunca sales, es que lo que estas pagando son intereses sobre otros intereses.
SI PAGO DENTRO DE LOS PERIODOS DE FECHAS DE CORTE NO PAGO INTERESES
Verdad.
No pagas intereses pero debes recordar el asunto de los seguros los cuales no son iguales en todas las tarjetas.
TENGO VENTAJAS EN DESCUENTOS Y MILLAS, ASÍ COMO SISTEMAS DE PUNTOS.
Verdad.
Existen muchas promociones interesantes, en especial en restaurantes, pero al igual que toda promoción no se debe abusar ni llevar la tarjeta al límite de crédito, porque de lo contrario de nada valdrá lo que te ahorres en esos descuentos.
Y por ultimo
LAS TARJETAS SON UN MEDIO DE FACILITARME LA VIDA
Depende.
Las tarjetas son un lujo, no una necesidad, una vez que tengamos eso claro podremos acomodarnos con las mismas, yo solo tengo una tarjeta de crédito, y la manejo de forma que no me de dolores de cabeza, no es para comprarme esa camisa que vi en la ventana, ni para pagar esa comida en el restaurante(a no ser que se aplique un descuento, en ese caso si es buen negocio), tampoco me interesa tener una de oro o de platino(que me la han ofrecido) porque igual los gastos administrativos y otros seguros son de oro y de platino así como los intereses.
Pueden ser beneficiosas en tanto las utilicemos responsablemente y que nuestro presupuesto nos permita manejar ciertos gastos, si no, es mejor no “embarcarse” con estos temas.