¡Ay, Dios mío! Parece que algunos panas todavía no le agarran la onda a las normas de tránsito. Según datos fresquitos de la Policía de Tránsito, ¡casi 90 conductores al mes reciben una multa salada por no ponerle booster a los niños menores de 12!
La verdad, la ley es clarísima: si el nene o la nena mide menos de 1,45 metros, necesita un asiento especial en el carro. Ya llevan años diciendo lo mismo, pero parece que algunos se hacen los dormidos. El subdirector de Tránsito, Martín Sánchez, tuvo que salir a recordarle la cosa a los padres, especialmente ahora con las fiestas acercándose.
Y es que el mae Sánchez no andaba jugando. “Venimos repitiendo esto hasta cansarnos, pa’ que le entre en la cabeza a la gente,” dijo. Remarcó que los accidentes no toman vacaciones, ni aunque estemos celebrando. Insistió en que el booster es obligatorio, da igual si es un viaje cortito al supermercado o a visitar a la abuela en otra barriada. ¡Siempre sujetos, chunches!
La multa que se llevan estos panas por no cumplir la norma no es precisamente regalada: ¡¢246.000 y cuatro puntitos en la licencia! Eso ya empieza a pesar, diay. Además de que se arriesgan a poner en peligro a sus hijos, les sale caro, imagínense.
Pero eso no es todo, el oficial también aprovechó para meterles con otro rollo: alimentar al bebé en el auto con el peque suelto. ¡Eso es un despiche, pura imprudencia! Según él, nunca la necesidad justifica soltar al bebé del booser mientras el carro anda rodando. Mejor parquearse y atender al chiquillo con calma, ¿eh?
Y hablando de riesgos, el policía nos recordó que los nenes menores de cinco años jamás deberían viajar en moto. ¡Ni loco! No tienen la fuerza ni la coordinación para sujetarse bien, y es un peligro enorme. Ahí también hay multa, por si alguien estaba pensando en hacerlo.
En resumen, la idea es clara: la seguridad de los niños es primordial, y no hay excusa que valga para ponernos laxos. Como dice el dicho, “mejor prevenir que lamentar”. La Policía de Tránsito está sacando todos los hilos para concienciar a los padres, y vaya que necesitan que le agarren la onda.
Ahora dime, ¿crees que las multas actuales son suficientes para obligar a los padres a usar el booster consistentemente, o deberíamos subir el valor para que realmente impacte? Déjanos tu opinión en los comentarios, ¡queremos saber qué piensas sobre este brete!
La verdad, la ley es clarísima: si el nene o la nena mide menos de 1,45 metros, necesita un asiento especial en el carro. Ya llevan años diciendo lo mismo, pero parece que algunos se hacen los dormidos. El subdirector de Tránsito, Martín Sánchez, tuvo que salir a recordarle la cosa a los padres, especialmente ahora con las fiestas acercándose.
Y es que el mae Sánchez no andaba jugando. “Venimos repitiendo esto hasta cansarnos, pa’ que le entre en la cabeza a la gente,” dijo. Remarcó que los accidentes no toman vacaciones, ni aunque estemos celebrando. Insistió en que el booster es obligatorio, da igual si es un viaje cortito al supermercado o a visitar a la abuela en otra barriada. ¡Siempre sujetos, chunches!
La multa que se llevan estos panas por no cumplir la norma no es precisamente regalada: ¡¢246.000 y cuatro puntitos en la licencia! Eso ya empieza a pesar, diay. Además de que se arriesgan a poner en peligro a sus hijos, les sale caro, imagínense.
Pero eso no es todo, el oficial también aprovechó para meterles con otro rollo: alimentar al bebé en el auto con el peque suelto. ¡Eso es un despiche, pura imprudencia! Según él, nunca la necesidad justifica soltar al bebé del booser mientras el carro anda rodando. Mejor parquearse y atender al chiquillo con calma, ¿eh?
Y hablando de riesgos, el policía nos recordó que los nenes menores de cinco años jamás deberían viajar en moto. ¡Ni loco! No tienen la fuerza ni la coordinación para sujetarse bien, y es un peligro enorme. Ahí también hay multa, por si alguien estaba pensando en hacerlo.
En resumen, la idea es clara: la seguridad de los niños es primordial, y no hay excusa que valga para ponernos laxos. Como dice el dicho, “mejor prevenir que lamentar”. La Policía de Tránsito está sacando todos los hilos para concienciar a los padres, y vaya que necesitan que le agarren la onda.
Ahora dime, ¿crees que las multas actuales son suficientes para obligar a los padres a usar el booster consistentemente, o deberíamos subir el valor para que realmente impacte? Déjanos tu opinión en los comentarios, ¡queremos saber qué piensas sobre este brete!
