Bueno, pues gente, parece que tenemos un problemón en puerta. La Contraloría General de la República, con Marta Acosta al mando, soltó la bomba este miércoles: la propuesta de ingresos del gobierno para el 2026 no pinta nada bien en cuanto a la recolección de impuestos. Más bien, da la impresión de que estamos retrocediendo, ¡y eso no es precisamente lo que queríamos!
Para ponerle pausa al asunto, la Contralora explicó que el crecimiento esperado de los ingresos corrientes para el 2026 es de apenas un 2,5%, comparado con el año pasado. Y si hablamos de los ingresos tributarios, la cosa empeora aún más: solo esperamos un aumento del 2,2%. ¿Lo feo? Que estas cifras están por debajo del crecimiento que se proyecta para nuestro querido Producto Interno Bruto (PIB), que va camino a un 5,7%. ¡Una diferencia considerable, diay!
Acosta, con toda la honestidad del mundo, fue clara: “No se esperan mejoras en cómo están llegando los dineros ni a través de impuestos. Estamos creciendo por debajo de lo que debería, y eso tiene mucho que ver con la reducción de la carga tributaria.” En otras palabras, le bajaron el acelerador a la recolección de impuestos y ahora pagamos las consecuencias. Además, añadió que esto también se debe al agotamiento de la famosa reforma fiscal del 2018, que ya no está dando los frutos esperados.
Y aquí viene otra vareta: los ingresos actuales apenas alcanzan a cubrir el 79,6% del gasto que tienen planeado para el 2026. Eso significa que necesitamos urgentemente una estrategia seria para mejorar la recolección de dinero, una estrategia que vaya más allá de promesas vacías y que realmente genere resultados tangibles. ¿Quién se anima a darle con todo a esa tarea?
Pero la cosa no termina ahí. La Contraloría también echó luz sobre el tema del gasto público. Resulta que el gasto total va a subir un 3,2% en 2026, y el gasto corriente –el que usamos para mantener funcionando el país– subirá hasta un 4,5%. Esto es gracias a que volvimos a un panorama económico menos restrictivo. El problema es que, aunque suene positivo, este aumento en el gasto no está acompañado por un aumento proporcional en los ingresos, generando un desbalance preocupante.
Para colmo, el proyecto de presupuesto para el 2026 muestra una tendencia hacia un mayor déficit, revirtiendo la mejora que habíamos visto después de la pandemia. ¡Imagínense! El déficit financiero podría aumentar un 17,4% comparado con este año, representando un 3,7% del PIB. Además, la relación deuda/PIB se dispararía al 62%, lo que nos pone en una posición financiera bastante delicada, sin exagerar.
“El creciente desbalance entre lo que ganamos y lo que gastamos nos mete en un déficit financiero del 3,7% del PIB, volteando la tortilla de la recuperación económica”, sentenció Acosta, dejando claro que la situación requiere atención inmediata. Es como si estuviéramos tratando de llenar un balde lleno de agujeros, ¡qué torta!
Ahora, díganme ustedes, ¿cree que el gobierno está tomando las medidas necesarias para solucionar este problema de fondo? ¿Deberían priorizar reducir el gasto, buscar nuevas fuentes de ingreso o ambas cosas? ¡Desempolven sus opiniones y mándenlas al foro, porque necesitamos saber qué piensa la calle sobre este brete que nos espera!
Para ponerle pausa al asunto, la Contralora explicó que el crecimiento esperado de los ingresos corrientes para el 2026 es de apenas un 2,5%, comparado con el año pasado. Y si hablamos de los ingresos tributarios, la cosa empeora aún más: solo esperamos un aumento del 2,2%. ¿Lo feo? Que estas cifras están por debajo del crecimiento que se proyecta para nuestro querido Producto Interno Bruto (PIB), que va camino a un 5,7%. ¡Una diferencia considerable, diay!
Acosta, con toda la honestidad del mundo, fue clara: “No se esperan mejoras en cómo están llegando los dineros ni a través de impuestos. Estamos creciendo por debajo de lo que debería, y eso tiene mucho que ver con la reducción de la carga tributaria.” En otras palabras, le bajaron el acelerador a la recolección de impuestos y ahora pagamos las consecuencias. Además, añadió que esto también se debe al agotamiento de la famosa reforma fiscal del 2018, que ya no está dando los frutos esperados.
Y aquí viene otra vareta: los ingresos actuales apenas alcanzan a cubrir el 79,6% del gasto que tienen planeado para el 2026. Eso significa que necesitamos urgentemente una estrategia seria para mejorar la recolección de dinero, una estrategia que vaya más allá de promesas vacías y que realmente genere resultados tangibles. ¿Quién se anima a darle con todo a esa tarea?
Pero la cosa no termina ahí. La Contraloría también echó luz sobre el tema del gasto público. Resulta que el gasto total va a subir un 3,2% en 2026, y el gasto corriente –el que usamos para mantener funcionando el país– subirá hasta un 4,5%. Esto es gracias a que volvimos a un panorama económico menos restrictivo. El problema es que, aunque suene positivo, este aumento en el gasto no está acompañado por un aumento proporcional en los ingresos, generando un desbalance preocupante.
Para colmo, el proyecto de presupuesto para el 2026 muestra una tendencia hacia un mayor déficit, revirtiendo la mejora que habíamos visto después de la pandemia. ¡Imagínense! El déficit financiero podría aumentar un 17,4% comparado con este año, representando un 3,7% del PIB. Además, la relación deuda/PIB se dispararía al 62%, lo que nos pone en una posición financiera bastante delicada, sin exagerar.
“El creciente desbalance entre lo que ganamos y lo que gastamos nos mete en un déficit financiero del 3,7% del PIB, volteando la tortilla de la recuperación económica”, sentenció Acosta, dejando claro que la situación requiere atención inmediata. Es como si estuviéramos tratando de llenar un balde lleno de agujeros, ¡qué torta!
Ahora, díganme ustedes, ¿cree que el gobierno está tomando las medidas necesarias para solucionar este problema de fondo? ¿Deberían priorizar reducir el gasto, buscar nuevas fuentes de ingreso o ambas cosas? ¡Desempolven sus opiniones y mándenlas al foro, porque necesitamos saber qué piensa la calle sobre este brete que nos espera!
