¡Ay, Dios mío! Resulta que la Onda Tropical 31, que ya andaba dando vueltas ahí cerca, decidió venir de frente a Costa Rica. El INM nos avisó desde hace rato, pero uno nunca cree esas cosas hasta que siente las gotas cayendo a mares, ¿verdad?
Según el Instituto Meteorológico Nacional, esta onda va a traer lluvias y aguaceros bien chéveres, especialmente en el Pacífico Sur, el Pacífico Central y las costas de esos lugares. No es una lloviznita suave, chunches, esto promete ser más bien a cántaros. Dicen que van a estar entre moderadas y débiles, pero eso significa que igual vamos a tener que sacar el impermeable y el botón.
Pero no solo el Pacífico va a sufrir, porque el Valle Central, la Zona Norte y el sector este del Pacífico Norte también van a recibir su dosis de humedad. Claro, nosotros aquí en la capital pensando que íbamos a tener un domingo tranquilito disfrutando del sol... ¡una decepción!
Y ni hablar de la vertiente del Pacífico y el Valle Central, que estaban soleados por la mañana. Un ratito de calma, para luego volvernos a empapar. El índice de radiación solar estaba alto en Guanacaste y en el centro del país, así que si salimos, hay que echarnos bloqueador, porque el sol sigue haciendo de las suyas aunque esté nublado.
Lo bueno, dicen los meteorólogos, es que después de que la onda pase, incluso hasta la madrugada del lunes, el viento alisio va a empezar a ganar terreno. Eso quiere decir que las lluvias podrían disminuir un poquito en el Valle Central y en el Pacífico. Pero no nos hagamos ilusiones demasiado, porque la tendencia semanal no pinta tan rosada… siempre viene otra onda, diay.
Pero lo que sí preocupa de verdad es que los suelos ya están bien cargaditos de agua, especialmente en la Zona Norte, la Península de Nicoya y el Pacífico Sur. Esto eleva muchísimo el riesgo de deslizamientos e inundaciones, entonces hay que estar super atentos. Mejor prevenir que lamentar, como dice mi abuela.
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) mantiene la alerta amarilla por todo el país, así que preparen sus paraguas, aseguren las cosas que puedan volar y estén pendientes de cualquier aviso oficial. En las zonas urbanas, por favor, revisen que los desagües estén limpios, porque si se saturan los alcantarillados, ¡qué torta! El brete sería que se inunden las calles y haya problemas peores.
Con todo esto, me pregunto: ¿Creemos que el gobierno está tomando las medidas necesarias para mitigar los riesgos de estos fenómenos climáticos, o deberíamos esperar más lluvias para ver acciones concretas? ¿Ustedes qué opinan, compañeros del Foro?
Según el Instituto Meteorológico Nacional, esta onda va a traer lluvias y aguaceros bien chéveres, especialmente en el Pacífico Sur, el Pacífico Central y las costas de esos lugares. No es una lloviznita suave, chunches, esto promete ser más bien a cántaros. Dicen que van a estar entre moderadas y débiles, pero eso significa que igual vamos a tener que sacar el impermeable y el botón.
Pero no solo el Pacífico va a sufrir, porque el Valle Central, la Zona Norte y el sector este del Pacífico Norte también van a recibir su dosis de humedad. Claro, nosotros aquí en la capital pensando que íbamos a tener un domingo tranquilito disfrutando del sol... ¡una decepción!
Y ni hablar de la vertiente del Pacífico y el Valle Central, que estaban soleados por la mañana. Un ratito de calma, para luego volvernos a empapar. El índice de radiación solar estaba alto en Guanacaste y en el centro del país, así que si salimos, hay que echarnos bloqueador, porque el sol sigue haciendo de las suyas aunque esté nublado.
Lo bueno, dicen los meteorólogos, es que después de que la onda pase, incluso hasta la madrugada del lunes, el viento alisio va a empezar a ganar terreno. Eso quiere decir que las lluvias podrían disminuir un poquito en el Valle Central y en el Pacífico. Pero no nos hagamos ilusiones demasiado, porque la tendencia semanal no pinta tan rosada… siempre viene otra onda, diay.
Pero lo que sí preocupa de verdad es que los suelos ya están bien cargaditos de agua, especialmente en la Zona Norte, la Península de Nicoya y el Pacífico Sur. Esto eleva muchísimo el riesgo de deslizamientos e inundaciones, entonces hay que estar super atentos. Mejor prevenir que lamentar, como dice mi abuela.
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) mantiene la alerta amarilla por todo el país, así que preparen sus paraguas, aseguren las cosas que puedan volar y estén pendientes de cualquier aviso oficial. En las zonas urbanas, por favor, revisen que los desagües estén limpios, porque si se saturan los alcantarillados, ¡qué torta! El brete sería que se inunden las calles y haya problemas peores.
Con todo esto, me pregunto: ¿Creemos que el gobierno está tomando las medidas necesarias para mitigar los riesgos de estos fenómenos climáticos, o deberíamos esperar más lluvias para ver acciones concretas? ¿Ustedes qué opinan, compañeros del Foro?