¡Ay, Dios mío! Parece que nos vamos a meter en un brete gordo, gente. El gobierno, con toda la chispa que tiene, acaba de anunciar que Rebeca Grynspan va a ser nuestra candidata para la Secretaría General de la ONU. Sí, usted me escucha bien. La exsecretaria iberoamericana, la mae que anduvo dando vueltas por el PNUD… ahora quiere irle a dar al puesto de jefa mundial. ¡Qué carga!
Rodrigo Chaves, en una reunión con Rebeca en Casa Presidencial – imagínese la foto, pura diplomacia y sonrisas forzadas–, soltó la bomba. Dice que esto es reflejo de la fortaleza de nuestras instituciones y nuestra vocación histórica por la paz. Yo digo, ¡eso ya lo sabemos todos! Pero bueno, hay que darle crédito donde corresponde. Al final, Costa Rica siempre ha sido medio “paloma” en los asuntos internacionales, ¿quién iba a pensar que íbamos a postular a alguien para semejante puesto?
Lo cierto es que Rebeca Grynspan tiene un currículum que da envidia. Ha trabajado en Costa Rica, por supuesto, pero también ha dado vueltas por Iberoamérica y ha hecho cosas interesantes en el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y en la UNCTAD. No es cualquier mae, dicen algunos expertos. Tiene experiencia, sabe cómo moverse en esos círculos de poder y, aparentemente, tiene contactos hasta en el quinto cajón. Eso sí, manejar a toda la ONU es otro rollo, ¡no es lo mismo organizar reuniones iberoamericanas!
Y hablando de rolos, el presidente Chaves está convencido de que Grynspan puede unir a las regiones con visiones distintas y resolver los problemas de paz, desarrollo, cambio climático y seguridad que nos aquejan a todos. Suena lindo, ¿verdad? Pero ahí viene el detalle: la competencia va a ser dura. Hay otros países con aspirantes fuertes, con más influencia y, probablemente, con más billete para gastar en campañas de marketing.
Ahora, para que no piensen que solo estamos hablando de política internacional, hay que recordar que esto podría tener implicaciones directas para nosotros. Si Rebeca consigue el puesto, podríamos tener más peso en la agenda mundial. Podríamos influir en las decisiones sobre cambio climático, comercio, ayuda humanitaria… Imagínese, ¡podríamos conseguirle a Costa Rica unos cuantos chunches extra!
Pero no todo es color de rosa, ay, no. Algunos analistas señalan que Grynspan ha tenido sus polémicas a lo largo de su carrera. Recuerdo algunas críticas a su gestión en la Secretaría Iberoamericana, aunque nada muy grave. Además, hay quienes cuestionan si realmente representa los intereses de la pequeña y media empresa, que es donde está la sangre latina de nuestro país. ¿Será que ella está demasiado metida en los juegos de los poderosos?
Sea como fuere, el apoyo del país a esta candidatura es un motivo de orgullo, eso sí. Demuestra que seguimos vivos en el mapa internacional y que todavía tenemos algo que aportar al mundo. Después de tanta bronca interna y tanta controversia, quizás podamos estar orgullosos de alguna vara positiva. Que le voy a decir, ¡el tico siempre busca algo bueno para agarrarle!
Entonces, díganme, ¿creen que Rebeca Grynspan tiene posibilidades reales de ganar la Secretaría General de la ONU? ¿O es solo una campaña más para engordar el ego de los políticos y hacer quedar bien al país en el extranjero? ¡Déjenme sus opiniones aquí abajo! Me interesa saber qué piensa la gente sobre este asunto tan importante.
Rodrigo Chaves, en una reunión con Rebeca en Casa Presidencial – imagínese la foto, pura diplomacia y sonrisas forzadas–, soltó la bomba. Dice que esto es reflejo de la fortaleza de nuestras instituciones y nuestra vocación histórica por la paz. Yo digo, ¡eso ya lo sabemos todos! Pero bueno, hay que darle crédito donde corresponde. Al final, Costa Rica siempre ha sido medio “paloma” en los asuntos internacionales, ¿quién iba a pensar que íbamos a postular a alguien para semejante puesto?
Lo cierto es que Rebeca Grynspan tiene un currículum que da envidia. Ha trabajado en Costa Rica, por supuesto, pero también ha dado vueltas por Iberoamérica y ha hecho cosas interesantes en el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y en la UNCTAD. No es cualquier mae, dicen algunos expertos. Tiene experiencia, sabe cómo moverse en esos círculos de poder y, aparentemente, tiene contactos hasta en el quinto cajón. Eso sí, manejar a toda la ONU es otro rollo, ¡no es lo mismo organizar reuniones iberoamericanas!
Y hablando de rolos, el presidente Chaves está convencido de que Grynspan puede unir a las regiones con visiones distintas y resolver los problemas de paz, desarrollo, cambio climático y seguridad que nos aquejan a todos. Suena lindo, ¿verdad? Pero ahí viene el detalle: la competencia va a ser dura. Hay otros países con aspirantes fuertes, con más influencia y, probablemente, con más billete para gastar en campañas de marketing.
Ahora, para que no piensen que solo estamos hablando de política internacional, hay que recordar que esto podría tener implicaciones directas para nosotros. Si Rebeca consigue el puesto, podríamos tener más peso en la agenda mundial. Podríamos influir en las decisiones sobre cambio climático, comercio, ayuda humanitaria… Imagínese, ¡podríamos conseguirle a Costa Rica unos cuantos chunches extra!
Pero no todo es color de rosa, ay, no. Algunos analistas señalan que Grynspan ha tenido sus polémicas a lo largo de su carrera. Recuerdo algunas críticas a su gestión en la Secretaría Iberoamericana, aunque nada muy grave. Además, hay quienes cuestionan si realmente representa los intereses de la pequeña y media empresa, que es donde está la sangre latina de nuestro país. ¿Será que ella está demasiado metida en los juegos de los poderosos?
Sea como fuere, el apoyo del país a esta candidatura es un motivo de orgullo, eso sí. Demuestra que seguimos vivos en el mapa internacional y que todavía tenemos algo que aportar al mundo. Después de tanta bronca interna y tanta controversia, quizás podamos estar orgullosos de alguna vara positiva. Que le voy a decir, ¡el tico siempre busca algo bueno para agarrarle!
Entonces, díganme, ¿creen que Rebeca Grynspan tiene posibilidades reales de ganar la Secretaría General de la ONU? ¿O es solo una campaña más para engordar el ego de los políticos y hacer quedar bien al país en el extranjero? ¡Déjenme sus opiniones aquí abajo! Me interesa saber qué piensa la gente sobre este asunto tan importante.