¡Ay, Dios mío! ¿Se imaginan la bronca? Otro niño, Leandro, arrastrado por la furia de un caño descontrolado, terminando directo en una alcantarilla. La cosa se puso fea, qué torta, porque ahora el AyA y la Municipalidad de Goicoechea se están echando la bolita, diciendo que la culpa es del otro. ¡Y encima, el Conavi metido en el brete, diciendo que es ruta nacional! Parece novela, pero la verdad es que este tema de las alcantarillas en Costa Rica es un verdadero chinchorro.
El asunto es que hay leyes, claro, pero parece que nadie quiere agarrarle el toro por las astas. La legislación, con toda su letra menuda, intenta repartir responsabilidades entre varias instituciones, tratando de aclarar quién tiene qué hacer para evitar estas tragedias. Pero a ver, ¿quién se hace cargo de mantenerlas en condiciones? Ahí es donde empieza el rollo, porque todos tienen su propia versión y, al final, la ciudadanía es la que sale quemada.
Vamos por partes, mae. Tenemos a las municipalidades, que deberían cuidar los servicios públicos en sus territorios. Luego está el AyA, responsable del agua, las aguas negras y las lluvias… ¡parece mucho! Y finalmente, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), que maneja las carreteras. Según la ley, todos tienen una parte de responsabilidad, pero nadie quiere asumir la suya por completo. “La Sala Constitucional ya dejó claro que esto es un esfuerzo compartido,” explica Mariela Hernández, una abogada que entiende del tema. ¡Imagínate el lío!
Y no es cuento, ¿eh? He visto casos en tribunales donde tanto el Conavi como las alcaldías han sido demandadas por negligencia. Resulta que en Atenas, por ejemplo, la falta de mantenimiento de una alcantarilla provocó inundaciones y la Sala les mandó a pagar. ¡Qué sal! Eso demuestra que los jueces sí están poniendo lupa en esto y exigiendo soluciones, aunque después vemos si realmente se cumplen.
Pero ahí va otra cosita importante: si la alcantarilla está en una ruta nacional, la responsabilidad recae en el Conavi. Si está en una calle de ciudad, entonces la alcaldía es la que tiene que moverse. Sin embargo, incluso en esos casos, si existe un riesgo grave para la población, una municipalidad puede intervenir en una alcantarilla de ruta nacional, especialmente si sabe que hay peligro. Digamos que es como cuando ves que va a llover a mares y te preparas, aunque no seas tú quien tenga que hacerlo. ¡Es el famoso principio de conveniencia!
Ahora bien, me pregunto si todas estas leyes y resoluciones judiciales realmente sirven para algo. Porque la verdad es que seguimos viendo noticias de gente sufriendo por el mal estado de las alcantarillas. ¿Será que necesitamos simplificar la legislación y asignar claramente quién es el responsable de cada cosa? ¿O será que falta voluntad política para invertir en mejorar la infraestructura y proteger a los ciudadanos?
Este caso de Leandro debería servirnos de alerta. No podemos seguir esperando a que alguien salga lastimado para empezar a tomar cartas en el asunto. Las alcantarillas no son un chunche que puedes dejar de lado, son vitales para la salud pública y la seguridad de todos nosotros. Lo que necesitamos es que las autoridades se pongan las pilas y trabajen juntas para solucionar este problema de una vez por todas. ¡Qué carga, mae!
Entonces, ¿ustedes qué piensan? ¿Deberíamos crear una entidad única encargada de gestionar todas las alcantarillas del país, o creen que la actual división de responsabilidades es suficiente si se cumple correctamente? Déjenme sus opiniones en el foro, ¡quiero saber qué piensa la gente!
El asunto es que hay leyes, claro, pero parece que nadie quiere agarrarle el toro por las astas. La legislación, con toda su letra menuda, intenta repartir responsabilidades entre varias instituciones, tratando de aclarar quién tiene qué hacer para evitar estas tragedias. Pero a ver, ¿quién se hace cargo de mantenerlas en condiciones? Ahí es donde empieza el rollo, porque todos tienen su propia versión y, al final, la ciudadanía es la que sale quemada.
Vamos por partes, mae. Tenemos a las municipalidades, que deberían cuidar los servicios públicos en sus territorios. Luego está el AyA, responsable del agua, las aguas negras y las lluvias… ¡parece mucho! Y finalmente, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), que maneja las carreteras. Según la ley, todos tienen una parte de responsabilidad, pero nadie quiere asumir la suya por completo. “La Sala Constitucional ya dejó claro que esto es un esfuerzo compartido,” explica Mariela Hernández, una abogada que entiende del tema. ¡Imagínate el lío!
Y no es cuento, ¿eh? He visto casos en tribunales donde tanto el Conavi como las alcaldías han sido demandadas por negligencia. Resulta que en Atenas, por ejemplo, la falta de mantenimiento de una alcantarilla provocó inundaciones y la Sala les mandó a pagar. ¡Qué sal! Eso demuestra que los jueces sí están poniendo lupa en esto y exigiendo soluciones, aunque después vemos si realmente se cumplen.
Pero ahí va otra cosita importante: si la alcantarilla está en una ruta nacional, la responsabilidad recae en el Conavi. Si está en una calle de ciudad, entonces la alcaldía es la que tiene que moverse. Sin embargo, incluso en esos casos, si existe un riesgo grave para la población, una municipalidad puede intervenir en una alcantarilla de ruta nacional, especialmente si sabe que hay peligro. Digamos que es como cuando ves que va a llover a mares y te preparas, aunque no seas tú quien tenga que hacerlo. ¡Es el famoso principio de conveniencia!
Ahora bien, me pregunto si todas estas leyes y resoluciones judiciales realmente sirven para algo. Porque la verdad es que seguimos viendo noticias de gente sufriendo por el mal estado de las alcantarillas. ¿Será que necesitamos simplificar la legislación y asignar claramente quién es el responsable de cada cosa? ¿O será que falta voluntad política para invertir en mejorar la infraestructura y proteger a los ciudadanos?
Este caso de Leandro debería servirnos de alerta. No podemos seguir esperando a que alguien salga lastimado para empezar a tomar cartas en el asunto. Las alcantarillas no son un chunche que puedes dejar de lado, son vitales para la salud pública y la seguridad de todos nosotros. Lo que necesitamos es que las autoridades se pongan las pilas y trabajen juntas para solucionar este problema de una vez por todas. ¡Qué carga, mae!
Entonces, ¿ustedes qué piensan? ¿Deberíamos crear una entidad única encargada de gestionar todas las alcantarillas del país, o creen que la actual división de responsabilidades es suficiente si se cumple correctamente? Déjenme sus opiniones en el foro, ¡quiero saber qué piensa la gente!