¡Ay, Dios mío! Esto del Hospital México se pone cada vez más turbio, ¿eh? Resulta que la CCSS ha abierto una denuncia penal para investigar si hubo faltantes, usitos indebidos o hasta robos de fentanilo y morfina. Se armó la vaca, vamos.
Todo esto salió a la luz tras una revisión sorpresa del Ministerio de Salud el pasado 2 de septiembre, donde encontraron cosas raras en los inventarios de esos medicamentes controlados. Según el reporte, había inconsistencias graves, suficientes para mandarles una orden sanitaria pa’ ponerlos a todo dar en cintura. Parece que alguien no anduvo manejándose bien con los números, diay.
Mónica Taylor, la presidenta ejecutiva de la CCSS, salió a declarar que todavía no saben si realmente faltan los medicamentos, pero que tampoco pueden echarle la campana al viento. Dijo que tienen que ir al fondo del asunto, averiguar qué pasó y si alguien se aprovechó de la situación. “Tenemos que llegar al fondo y saber si hay algo más en este u otro centro médico,” enfatizó, pa' que no quede ninguna duda.
Ahora, la parte más interesante es que la CCSS admite que la movida del nuevo sistema ERP-SAP complicó las cosas. Parece que hubo duplicación de datos, lo cual generó confusión y dificultó llevar el control de los medicamentos. Pero bueno, eso ya no es excusa, ¿verdad? Uno esperaría que un sistema así estuviera funcionando como relojito, pero parece que todavía anda medio chueco.
Para meterle mano al caso, se involucró el OIJ, la Fiscalía y hasta el Colegio de Farmacéuticos. Randall Zúñiga, el jefe del OIJ, confirmó que ya abrieron la investigación y que están trabajando coordinadamente con el Ministerio Público. ¡Imagínate! Un operativo así, pa’ unos cuantos tranquilizantes…pero bueno, cuando se trata de salud pública, toca tomarlo en serio.
Según la orden sanitaria, en los registros del sistema aparecían alrededor de 31.500 unidades de fentanilo, pero solo se despacharon 10.500. Eso deja un faltante considerable, de casi 21.000 pastillas. Además, también hay problemas con la morfina, con unas 1.100 ampollas que no cuadran en los inventarios. ¡Qué torta! Una cifra escandalosa que levanta muchas sospechas.
Muchos se preguntan si esto es producto únicamente de fallas técnicas del sistema ERP, o si detrás hay algo más turbio. Algunos incluso hablan de posibles desfalcos o negligencias médicas, pero por ahora todo son especulaciones. Lo cierto es que este escándalo ha generado mucha preocupación entre pacientes y profesionales de la salud, quienes exigen respuestas claras y contundentes. Y claro, afecta la confianza de la gente en el sistema de salud, que ya no es fácil andar confiando en estos tiempos.
En fin, este caso pinta pa’ un brete largo y complicado. Ahora la bola está en el patio del OIJ y la Fiscalía para esclarecer los hechos y determinar responsabilidades. ¿Ustedes creen que las fallas del ERP fueron simplemente un descuido administrativo, o hay algo más oscuro escondido detrás de este faltante de medicamentos? Dejen sus opiniones abajo, ¡quiero leerlas!
Todo esto salió a la luz tras una revisión sorpresa del Ministerio de Salud el pasado 2 de septiembre, donde encontraron cosas raras en los inventarios de esos medicamentes controlados. Según el reporte, había inconsistencias graves, suficientes para mandarles una orden sanitaria pa’ ponerlos a todo dar en cintura. Parece que alguien no anduvo manejándose bien con los números, diay.
Mónica Taylor, la presidenta ejecutiva de la CCSS, salió a declarar que todavía no saben si realmente faltan los medicamentos, pero que tampoco pueden echarle la campana al viento. Dijo que tienen que ir al fondo del asunto, averiguar qué pasó y si alguien se aprovechó de la situación. “Tenemos que llegar al fondo y saber si hay algo más en este u otro centro médico,” enfatizó, pa' que no quede ninguna duda.
Ahora, la parte más interesante es que la CCSS admite que la movida del nuevo sistema ERP-SAP complicó las cosas. Parece que hubo duplicación de datos, lo cual generó confusión y dificultó llevar el control de los medicamentos. Pero bueno, eso ya no es excusa, ¿verdad? Uno esperaría que un sistema así estuviera funcionando como relojito, pero parece que todavía anda medio chueco.
Para meterle mano al caso, se involucró el OIJ, la Fiscalía y hasta el Colegio de Farmacéuticos. Randall Zúñiga, el jefe del OIJ, confirmó que ya abrieron la investigación y que están trabajando coordinadamente con el Ministerio Público. ¡Imagínate! Un operativo así, pa’ unos cuantos tranquilizantes…pero bueno, cuando se trata de salud pública, toca tomarlo en serio.
Según la orden sanitaria, en los registros del sistema aparecían alrededor de 31.500 unidades de fentanilo, pero solo se despacharon 10.500. Eso deja un faltante considerable, de casi 21.000 pastillas. Además, también hay problemas con la morfina, con unas 1.100 ampollas que no cuadran en los inventarios. ¡Qué torta! Una cifra escandalosa que levanta muchas sospechas.
Muchos se preguntan si esto es producto únicamente de fallas técnicas del sistema ERP, o si detrás hay algo más turbio. Algunos incluso hablan de posibles desfalcos o negligencias médicas, pero por ahora todo son especulaciones. Lo cierto es que este escándalo ha generado mucha preocupación entre pacientes y profesionales de la salud, quienes exigen respuestas claras y contundentes. Y claro, afecta la confianza de la gente en el sistema de salud, que ya no es fácil andar confiando en estos tiempos.
En fin, este caso pinta pa’ un brete largo y complicado. Ahora la bola está en el patio del OIJ y la Fiscalía para esclarecer los hechos y determinar responsabilidades. ¿Ustedes creen que las fallas del ERP fueron simplemente un descuido administrativo, o hay algo más oscuro escondido detrás de este faltante de medicamentos? Dejen sus opiniones abajo, ¡quiero leerlas!