¡Ay, Dios mío! Qué pesar nos da empezar el día con esta noticia que llegó directa desde Tibás. Un hombre de 62 años perdió la vida después de sufrir una caída terrible desde el techo de su casa. Según los primeros reportes, el pobre señor se resbaló mientras hacía unos arreglos, y vaya si se llevó una torta, porque la caída fue de aproximadamente ocho metros.
La escena, según cuentan los vecinos, fue dantesca. Imagínense, este señor cae directo al río, impactándose primero contra el techo y luego recibiendo el golpe final. Los rescatistas de la Cruz Roja y el Cuerpo de Bomberos llegaron rapidísimo, pero cuando lograron sacarlo del agua, ya era demasiado tarde. No había ni pizca de vida en él, diay... qué pena, pura pena.
Lo que hace aún más tristísima esta historia es que el fallecido resulta ser hermano de un trabajador de la Cruz Roja. Sí, así como lo escuchan, de esos mismos que siempre andan ahí salvando vidas. Las autoridades de la institución confirmaron la relación familiar, aunque no quisieron entrar en más detalles, seguramente por respeto a la familia y a la gravedad de la situación. Un brete pa’ ellos, seguro.
Guillermo Pacheco, subcoordinador operativo regional de San José, nos contó que “fuimos llamados a una situación de rescate de un masculino adulto que cayó de aproximadamente 8 metros. Lamentablemente, la víctima la encontramos sin signos vitales”. Una frase dura, pero refleja la realidad de lo sucedido. El tipo estaba bien lastimadito, no había forma de hacerle nada.
La Fuerza Pública tuvo que acordonar toda la zona hasta que llegaron los judiciales del OIJ para recoger el cuerpo y comenzar con la investigación correspondiente. Se levantaron todas las evidencias, tomaron fotos y hablaron con los testigos para tratar de esclarecer exactamente cómo ocurrió esta tragedia. Parece que el suelo estaba mojado, lo que pudo haber contribuido al resbalón, pero eso lo determinarán los peritos, claro.
Esta noticia nos recuerda lo peligrosos que pueden ser los trabajos en altura, y la importancia de tomar todas las precauciones necesarias. Muchos de nuestros paisanos se arriesgan todos los días haciendo trabajos informales para ganarse la vida, y a veces, sin quererlo, terminan pagándolo muy caro. Un llamado a la conciencia para todos aquellos que realizan este tipo de labores: ¡prioricen su seguridad!
Y hablando de seguridad, esto me trae recuerdos de cuando mi abuelo se jaló una torta tratando de cambiar una bombilla y casi se va al traste. Por suerte salió ileso, pero le dio un sustito de muerte. Uno nunca sabe cuándo puede pasar algo así, por eso hay que estar siempre alerta y cuidarnos mucho, máxime cuando estamos trabajando en alturas. Este caso de Tibás nos enseña que la vida es frágil, y hay que valorarla cada día.
En fin, tremenda tristeza nos invade con esta noticia. Perdemos a un compatriota, una familia entera sufre y nos queda la reflexión de lo impredecibles que pueden ser las cosas. ¿Ustedes creen que deberían existir regulaciones más estrictas para los trabajos en altura en Costa Rica, o que las empresas debieran ofrecer más capacitación en seguridad laboral a sus empleados? Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensan al respecto… ¡y que tengan un buen día, pese a esta triste noticia!
La escena, según cuentan los vecinos, fue dantesca. Imagínense, este señor cae directo al río, impactándose primero contra el techo y luego recibiendo el golpe final. Los rescatistas de la Cruz Roja y el Cuerpo de Bomberos llegaron rapidísimo, pero cuando lograron sacarlo del agua, ya era demasiado tarde. No había ni pizca de vida en él, diay... qué pena, pura pena.
Lo que hace aún más tristísima esta historia es que el fallecido resulta ser hermano de un trabajador de la Cruz Roja. Sí, así como lo escuchan, de esos mismos que siempre andan ahí salvando vidas. Las autoridades de la institución confirmaron la relación familiar, aunque no quisieron entrar en más detalles, seguramente por respeto a la familia y a la gravedad de la situación. Un brete pa’ ellos, seguro.
Guillermo Pacheco, subcoordinador operativo regional de San José, nos contó que “fuimos llamados a una situación de rescate de un masculino adulto que cayó de aproximadamente 8 metros. Lamentablemente, la víctima la encontramos sin signos vitales”. Una frase dura, pero refleja la realidad de lo sucedido. El tipo estaba bien lastimadito, no había forma de hacerle nada.
La Fuerza Pública tuvo que acordonar toda la zona hasta que llegaron los judiciales del OIJ para recoger el cuerpo y comenzar con la investigación correspondiente. Se levantaron todas las evidencias, tomaron fotos y hablaron con los testigos para tratar de esclarecer exactamente cómo ocurrió esta tragedia. Parece que el suelo estaba mojado, lo que pudo haber contribuido al resbalón, pero eso lo determinarán los peritos, claro.
Esta noticia nos recuerda lo peligrosos que pueden ser los trabajos en altura, y la importancia de tomar todas las precauciones necesarias. Muchos de nuestros paisanos se arriesgan todos los días haciendo trabajos informales para ganarse la vida, y a veces, sin quererlo, terminan pagándolo muy caro. Un llamado a la conciencia para todos aquellos que realizan este tipo de labores: ¡prioricen su seguridad!
Y hablando de seguridad, esto me trae recuerdos de cuando mi abuelo se jaló una torta tratando de cambiar una bombilla y casi se va al traste. Por suerte salió ileso, pero le dio un sustito de muerte. Uno nunca sabe cuándo puede pasar algo así, por eso hay que estar siempre alerta y cuidarnos mucho, máxime cuando estamos trabajando en alturas. Este caso de Tibás nos enseña que la vida es frágil, y hay que valorarla cada día.
En fin, tremenda tristeza nos invade con esta noticia. Perdemos a un compatriota, una familia entera sufre y nos queda la reflexión de lo impredecibles que pueden ser las cosas. ¿Ustedes creen que deberían existir regulaciones más estrictas para los trabajos en altura en Costa Rica, o que las empresas debieran ofrecer más capacitación en seguridad laboral a sus empleados? Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensan al respecto… ¡y que tengan un buen día, pese a esta triste noticia!
