¡Ay, Dios mío! Esto sí que cayó de perraco. Resulta que el diputado Luis Diego Vargas, ese que anda buscando rifa como compañero de fórmula de Natalia Díaz, se desapareció en pleno proceso de votación sobre la inmunidad del Presidente Chaves. Uno pensaba que con tanto brete político estaría ahí, frente a la cámara, listo para decir qué piensa, pero ¡pum!, se fue de las maderas.
Para ponerle contexto a la cosa, la votación sobre el caso BCIE-Cariñitos era de las más importantes del año. Todos los ojos puestos en el Congreso, con la expectativa de ver cómo iban a decidir los diputados respecto al fuero presidencial. Y justo en ese momento álgido, Vargas decide hacer como si estuviera mirando documentales de naturaleza en el Canal 7. Imagínate el revuelo que se armó en el hemiciclo, ¡qué despache!
Según la versión oficial de Unidos Podemos –ese partido donde andan buscando darle vida artificial–, Vargas tuvo que salir porque recibió una llamada urgente sobre la salud de su madre. Claro, siempre hay una excusa, ¿verdad? Pero lo que más pinta rara dejó es que no avisó a nadie con anticipación, ni siquiera a sus compañeros de bancada. Parece que prefirió desaparecer sin dejar rastro, como mago barato.
Lo curioso de todo esto es que, según dicen, Vargas permaneció en el lugar hasta pasadas las cuatro de la tarde, esperando que se procediera con la votación. Pero cuando vio que ya estaban los discursos políticos volando por todos lados y que el resultado parecía cantado, decidió que era mejor ir a atender esa supuesta emergencia familiar. ¡Menudo chunche! Una cosita, según algunos allegados, la votación estaba programada para las siete de la noche, no para las cuatro. ¡Qué sal!
Y ni hablar de las redes sociales. Se encendieron todas las alarmas. Gente acusándolo de todo, desde cobardía política hasta falta de respeto hacia el Congreso. Lo cierto es que Vargas no ha dicho absolutamente nada, ni siquiera un simple ‘diay’, para aclarar qué pasó realmente. Ni siquiera respondió a las preguntas que le hicieron por WhatsApp, ¡imagínate eso! Uno esperaría que al menos sacara un comunicado explicando su ausencia, pero parece que prefiere meterse en la carga.
Muchos analistas políticos señalan que esta jugada podría afectar seriamente las aspiraciones de Vargas de ser vicepresidente. Después de todo, ¿quién confiaría en alguien que abandona la batalla en el momento más crítico? Además, la imagen que proyecta no es precisamente la de un líder comprometido con la defensa de los principios democráticos. Más bien parece alguien que se agarra a cualquier excusa para evitar tomar decisiones difíciles. Ese brete sí es complicado.
Ahora bien, hablemos de los hechos. La votación terminó 34 a 21, manteniendo con Chaves su inmunidad. Un resultado que muchos consideraban inevitable, pero que aún así generó controversia y polarización en el ambiente político. Vargas, recordemos, había dicho que estaba analizando el caso, revisando el informe y estudiando el expediente. Pero al final, se quedó callado y se fue corriendo, dejando a todos con la boca abierta. ¡Parecía que se le fue al traste toda su estrategia!
En fin, este asunto ha generado muchísima conversación en el Foro. ¿Creen ustedes que la explicación de la emergencia familiar es sincera? ¿O será que Vargas simplemente no quiso mojarse en una votación que sabía que podía perjudicar su carrera política? Dejen sus opiniones abajo, ¡quiero saber qué piensan mis compas sobre este despiche!”,
Para ponerle contexto a la cosa, la votación sobre el caso BCIE-Cariñitos era de las más importantes del año. Todos los ojos puestos en el Congreso, con la expectativa de ver cómo iban a decidir los diputados respecto al fuero presidencial. Y justo en ese momento álgido, Vargas decide hacer como si estuviera mirando documentales de naturaleza en el Canal 7. Imagínate el revuelo que se armó en el hemiciclo, ¡qué despache!
Según la versión oficial de Unidos Podemos –ese partido donde andan buscando darle vida artificial–, Vargas tuvo que salir porque recibió una llamada urgente sobre la salud de su madre. Claro, siempre hay una excusa, ¿verdad? Pero lo que más pinta rara dejó es que no avisó a nadie con anticipación, ni siquiera a sus compañeros de bancada. Parece que prefirió desaparecer sin dejar rastro, como mago barato.
Lo curioso de todo esto es que, según dicen, Vargas permaneció en el lugar hasta pasadas las cuatro de la tarde, esperando que se procediera con la votación. Pero cuando vio que ya estaban los discursos políticos volando por todos lados y que el resultado parecía cantado, decidió que era mejor ir a atender esa supuesta emergencia familiar. ¡Menudo chunche! Una cosita, según algunos allegados, la votación estaba programada para las siete de la noche, no para las cuatro. ¡Qué sal!
Y ni hablar de las redes sociales. Se encendieron todas las alarmas. Gente acusándolo de todo, desde cobardía política hasta falta de respeto hacia el Congreso. Lo cierto es que Vargas no ha dicho absolutamente nada, ni siquiera un simple ‘diay’, para aclarar qué pasó realmente. Ni siquiera respondió a las preguntas que le hicieron por WhatsApp, ¡imagínate eso! Uno esperaría que al menos sacara un comunicado explicando su ausencia, pero parece que prefiere meterse en la carga.
Muchos analistas políticos señalan que esta jugada podría afectar seriamente las aspiraciones de Vargas de ser vicepresidente. Después de todo, ¿quién confiaría en alguien que abandona la batalla en el momento más crítico? Además, la imagen que proyecta no es precisamente la de un líder comprometido con la defensa de los principios democráticos. Más bien parece alguien que se agarra a cualquier excusa para evitar tomar decisiones difíciles. Ese brete sí es complicado.
Ahora bien, hablemos de los hechos. La votación terminó 34 a 21, manteniendo con Chaves su inmunidad. Un resultado que muchos consideraban inevitable, pero que aún así generó controversia y polarización en el ambiente político. Vargas, recordemos, había dicho que estaba analizando el caso, revisando el informe y estudiando el expediente. Pero al final, se quedó callado y se fue corriendo, dejando a todos con la boca abierta. ¡Parecía que se le fue al traste toda su estrategia!
En fin, este asunto ha generado muchísima conversación en el Foro. ¿Creen ustedes que la explicación de la emergencia familiar es sincera? ¿O será que Vargas simplemente no quiso mojarse en una votación que sabía que podía perjudicar su carrera política? Dejen sus opiniones abajo, ¡quiero saber qué piensan mis compas sobre este despiche!”,