Estaba un tipo en un orinal haciendo lo propio, de repente se para a su lado un negro grandísimo y saca su aparato como de 35 centímetros. El hombrecito al mirar ese miembro de tal tamaño no puede ocultar su cara de asombro. El negro al verlo le dice: A usted amigo ¿le gustaría tener el miembro como el mío?
A lo que el hombre responde: Claro que sí.
Entonces el negro le dice: Es muy sencillo, usted todos los días por la mañana se mete al baño, se lo coge y empieza a darle golpes contra el lavamanos, contra la puerta, contra el inodoro, mejor dicho contra todo lo que se encuentre y vera que así le crece.
El hombre se va muy contento con su receta. A los dos meses se encuentran el tipo y el negro y el hombrecito casi ni se podía coger su cosa.
El negro le pregunta: Y que hombre si te ha servido la recete que te di?
Y el hombrecito responde con la vos entrecortada: Pues todavía no me ha crecido mucho pero el colorcito ya lo voy cogiendo.
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