El expresidente de Costa Rica, José María Figueres Olsen, ha reaparecido en la escena pública para pronunciarse sobre la actual crisis en Venezuela. En una carta abierta fechada el 2 de agosto de 2024, Figueres expresa su apoyo al pueblo venezolano y a sus líderes opositores, destacando el liderazgo de María Corina Machado y la valentía de Edmundo González, quienes, según él, están inspirando a un pueblo cansado de la opresión.
Figueres inicia su mensaje recordando una frase de su padre, don Pepe Figueres: “Está demostrado que las cosas imposibles para hacerlas posibles lo que hay que hacer es: hacerlas”. Con estas palabras, el exmandatario costarricense subraya la admiración y respeto que siente por el pueblo venezolano, que lucha y ofrenda sus vidas para alcanzar lo que parecía imposible. Destaca que la fuerza de un pueblo unido y la determinación de sus líderes pueden derribar cualquier obstáculo, por más insuperable que parezca.
El expresidente hace un llamado vehemente a la comunidad internacional para que fortalezca su apoyo al pueblo venezolano. Subraya que la solidaridad y la acción contundente son cruciales para asegurar que la democracia, la justicia y la paz prevalezcan sobre la tiranía y la violencia. Figueres elogia la respuesta del Gobierno de Costa Rica ante la crisis venezolana, reafirmando los valores y principios que han guiado la política exterior del país.
En una crítica directa al presidente venezolano Nicolás Maduro, Figueres acusa al líder de traicionar a su pueblo. Le insta a aceptar la derrota de su dictadura y a ceder el poder a través de elecciones libres. “Quienes se han mantenido en el poder por las armas, deben estar dispuestos a cederlo a través de los votos”, sentencia Figueres. Según él, la verdadera fortaleza de un líder radica en su capacidad para escuchar a su pueblo y respetar su voluntad. Figueres concluye su mensaje afirmando que es tiempo de que el cambio llegue a Venezuela y que el pueblo decida su futuro en libertad y democracia.
La reaparición de Figueres en el escenario internacional no es casualidad. Su mensaje llega en un momento crucial para Venezuela, donde la oposición ha ganado terreno y se han intensificado las protestas contra el régimen de Maduro. La comunidad internacional ha estado observando de cerca los acontecimientos, y las palabras de Figueres podrían influir en las decisiones de otros líderes mundiales respecto a la situación en Venezuela.
La figura de María Corina Machado ha emergido como una líder prominente de la oposición, conocida por su firmeza y su incansable lucha por la libertad de su país. Edmundo González, por su parte, ha sido un símbolo de resistencia y coraje, inspirando a muchos venezolanos a seguir luchando a pesar de las adversidades.
La carta de Figueres también refleja la postura histórica de Costa Rica en favor de la democracia y los derechos humanos. A pesar de ser un país pequeño, Costa Rica ha tenido un papel significativo en la región, promoviendo la paz y la estabilidad. La referencia de Figueres al reconocimiento del Gobierno de Costa Rica subraya la importancia de que los países se mantengan firmes en sus principios y apoyen a aquellos que luchan por la justicia.
El mensaje de José María Figueres es un recordatorio poderoso de que la lucha por la democracia y la libertad es una tarea continua que requiere la solidaridad y el apoyo de la comunidad internacional. Su llamado a la acción no solo es una muestra de apoyo al pueblo venezolano, sino también un desafío a otros líderes mundiales a actuar con decisión y valentía.
Esta intervención de Figueres podría marcar un punto de inflexión en la manera en que se aborda la crisis venezolana, impulsando a más países a tomar medidas concretas para apoyar la transición hacia un gobierno democrático en Venezuela.
Mientras tanto, el pueblo venezolano sigue en su lucha diaria, inspirado por líderes como Machado y González, y respaldado por voces influyentes como la de José María Figueres.
Figueres inicia su mensaje recordando una frase de su padre, don Pepe Figueres: “Está demostrado que las cosas imposibles para hacerlas posibles lo que hay que hacer es: hacerlas”. Con estas palabras, el exmandatario costarricense subraya la admiración y respeto que siente por el pueblo venezolano, que lucha y ofrenda sus vidas para alcanzar lo que parecía imposible. Destaca que la fuerza de un pueblo unido y la determinación de sus líderes pueden derribar cualquier obstáculo, por más insuperable que parezca.
El expresidente hace un llamado vehemente a la comunidad internacional para que fortalezca su apoyo al pueblo venezolano. Subraya que la solidaridad y la acción contundente son cruciales para asegurar que la democracia, la justicia y la paz prevalezcan sobre la tiranía y la violencia. Figueres elogia la respuesta del Gobierno de Costa Rica ante la crisis venezolana, reafirmando los valores y principios que han guiado la política exterior del país.
En una crítica directa al presidente venezolano Nicolás Maduro, Figueres acusa al líder de traicionar a su pueblo. Le insta a aceptar la derrota de su dictadura y a ceder el poder a través de elecciones libres. “Quienes se han mantenido en el poder por las armas, deben estar dispuestos a cederlo a través de los votos”, sentencia Figueres. Según él, la verdadera fortaleza de un líder radica en su capacidad para escuchar a su pueblo y respetar su voluntad. Figueres concluye su mensaje afirmando que es tiempo de que el cambio llegue a Venezuela y que el pueblo decida su futuro en libertad y democracia.
La reaparición de Figueres en el escenario internacional no es casualidad. Su mensaje llega en un momento crucial para Venezuela, donde la oposición ha ganado terreno y se han intensificado las protestas contra el régimen de Maduro. La comunidad internacional ha estado observando de cerca los acontecimientos, y las palabras de Figueres podrían influir en las decisiones de otros líderes mundiales respecto a la situación en Venezuela.
La figura de María Corina Machado ha emergido como una líder prominente de la oposición, conocida por su firmeza y su incansable lucha por la libertad de su país. Edmundo González, por su parte, ha sido un símbolo de resistencia y coraje, inspirando a muchos venezolanos a seguir luchando a pesar de las adversidades.
La carta de Figueres también refleja la postura histórica de Costa Rica en favor de la democracia y los derechos humanos. A pesar de ser un país pequeño, Costa Rica ha tenido un papel significativo en la región, promoviendo la paz y la estabilidad. La referencia de Figueres al reconocimiento del Gobierno de Costa Rica subraya la importancia de que los países se mantengan firmes en sus principios y apoyen a aquellos que luchan por la justicia.
El mensaje de José María Figueres es un recordatorio poderoso de que la lucha por la democracia y la libertad es una tarea continua que requiere la solidaridad y el apoyo de la comunidad internacional. Su llamado a la acción no solo es una muestra de apoyo al pueblo venezolano, sino también un desafío a otros líderes mundiales a actuar con decisión y valentía.
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Esta intervención de Figueres podría marcar un punto de inflexión en la manera en que se aborda la crisis venezolana, impulsando a más países a tomar medidas concretas para apoyar la transición hacia un gobierno democrático en Venezuela.
Mientras tanto, el pueblo venezolano sigue en su lucha diaria, inspirado por líderes como Machado y González, y respaldado por voces influyentes como la de José María Figueres.
