safito
VERIFICADO
Para muchos computines no es noticia nueva, muchos anti-cristos han utilizado tecnologías anti-microsoft sólo por el hecho de andar jugando de vivo, de creerse mejor, o bien, creerse muy cool, porque utilizan una tecnología diferente que no sea microsoft.
Ya sea en sistemas apples, o bien los geeks de hoy en día utilizan linux, sólo para instalar las mismas cochinadas de siempre, un reproductor de video, un reproductor de dvd, browser etc etc sólo para no utilizar microsoft.
Pero lo más doloroso de esto, es mal informar al gobierno que se puede utilizar tecnologías no propietarias para implementarlas en los sistemas, como pretende alguien decir que és mejor instalar una base de datos libre abierta que utilizar un oracle, cuando estamos hablando de transacciones gigantes.
Cómo pretende el gobierno satisfacer el soporte a este tipo de productos sin licencia-sin soporte, cuándo el 100% del país ha sido educado bajo este sistema, propietario, que yo recuerde la mayoría de lenguajes propietarios, llámemosle .net de microsoft, java de sun, etc. etc, crean dependencias, y por lo tanto sólo se puede satisfacer utilizando los mismos productos de ellos.
No sé si será que algún carajillo tuvo la oportunidad de hablar con un diputado, o quien sabe quien, y le enseño lo bonito que se veía un ubuntu, que por cierto no sirve para ni un carajo, pretendiendo que ahora la plataforma nacional trabaje con un sistema parecido el cuál no cuenta con ningún soporte, ni tampoco un respaldo en caso de fallo.
Me parece a mí, que el gobierno está retrocediendo enormemente en lo que respecta a materia tecnologica.
Ya sea en sistemas apples, o bien los geeks de hoy en día utilizan linux, sólo para instalar las mismas cochinadas de siempre, un reproductor de video, un reproductor de dvd, browser etc etc sólo para no utilizar microsoft.
Pero lo más doloroso de esto, es mal informar al gobierno que se puede utilizar tecnologías no propietarias para implementarlas en los sistemas, como pretende alguien decir que és mejor instalar una base de datos libre abierta que utilizar un oracle, cuando estamos hablando de transacciones gigantes.
Cómo pretende el gobierno satisfacer el soporte a este tipo de productos sin licencia-sin soporte, cuándo el 100% del país ha sido educado bajo este sistema, propietario, que yo recuerde la mayoría de lenguajes propietarios, llámemosle .net de microsoft, java de sun, etc. etc, crean dependencias, y por lo tanto sólo se puede satisfacer utilizando los mismos productos de ellos.
No sé si será que algún carajillo tuvo la oportunidad de hablar con un diputado, o quien sabe quien, y le enseño lo bonito que se veía un ubuntu, que por cierto no sirve para ni un carajo, pretendiendo que ahora la plataforma nacional trabaje con un sistema parecido el cuál no cuenta con ningún soporte, ni tampoco un respaldo en caso de fallo.
Me parece a mí, que el gobierno está retrocediendo enormemente en lo que respecta a materia tecnologica.
Don Alberto Salom, en la sección Página Quince del periódico La Nación del pasado sábado 28 de junio , pretende convencernos de que el “ software libre” es mejor. Este tipo de afirmaciones son peligrosas: podríamos plantear el tema desde diferentes puntos de vista y no llegar a un acuerdo. Financieramente, el software más barato ¿es mejor? ¿Es mejor el software más caro porque tiene respaldo? Técnicamente, ¿cuándo es mejor el software ? ¿Cuando tiene soporte, manuales y garantía del fabricante? ¿Cuando los procesos con los que fue construido están certificados ISO 9000 o en alguna norma de “gestión de la calidad”?
¿Es mejor viajar en taxi, en bus o en su propio vehículo? La respuesta a esa pregunta varía dependiendo de las personas, sus necesidades, presupuestos, gustos o preferencias. ¿Por qué a los diputados no les dan tiquetes de autobús en lugar de tiquetes de gasolina? Probablemente es debido a que sus necesidades de transporte hacia las diversas zonas que representan no pueden ser satisfechas viajando en autobús. Al menos, las diversas opciones debieron haber sido valoradas tomando en cuenta aspectos financieros y técnicos.
La decisión de utilizar software libre o software propietario no puede darse solamente porque alguien considere que uno de ellos es mejor, ¿Mejor para quién? La selección del software deben realizarla las empresas (públicas o privadas) a la luz de sus necesidades (requerimientos de todos los diversos niveles: técnicos, de diseño, económicos, etc.), sus restricciones y el nivel de riesgo que están dispuestos a asumir. No digo que el software libre sea más riesgoso, sino que todo soft-ware (libre o propietario) tiene un nivel de riesgo que debe ser valorado según las características particulares de la empresa que lo va a adquirir.
Estoy de acuerdo en que el soft- ware libre es una opción, no la única, sino una opción más que debe ser analizada junto con las otras existentes, desde diversos puntos de vista, no solo el costo inicial, sino, el respaldo del fabricante, infraestructura requerida para su funcionamiento, disponibilidad y costo de la capacitación, respaldo local, niveles de riesgo, capacidad de transferencia de riesgo al fabricante (que se puedan establecer contratos). Es decir, ¿cuál es el costo total de propiedad de la solución técnica completa? De otro modo, sería como pensar que un automóvil es mejor que otro solo porque en uno me regalan las llantas. ¿Cuánto me cuesta el mantenimiento?
¿Ha estado usted en alguna institución donde le han dicho: “estamos sin sistema”? Frustrante, ¿verdad? Pues bien, las entidades deberían preocuparse por tener sistemas que las ayuden a eliminar este tipo de situaciones; el costo es solo parte del tema, el rendimiento, disponibilidad, seguridad, integridad de los datos, soporte técnico, y otros muchos temas relacionados no pueden quedarse fuera del análisis.
Suponga un vehículo pequeño, económico (150 km por galón), barato, full extras, toda una maravilla. Probablemente ya hasta esté pensando en comprar uno. Pero, si le dicen que no tiene soporte local, ¿lo compraría sin saber si hay repuestos en el mercado o mecánicos calificados para repararlo? ¿Qué haría si falla y no tiene una agencia que cubra la garantía? ¿Lo compraría? Unas personas sí, otras no. Ese es precisamente el tema. Por ello, hay que analizar el caso para ver si es mejor o no.