Maes, pónganse cómodos porque les traigo un chisme de los buenos, de esos que interesan de verdad porque tienen que ver con la platica. Ya sé que apenas vamos por setiembre y uno siente que falta un mundo para Navidad, pero seamos honestos: en dos patadas estamos comiendo tamales y quejándonos de la presa en la General Cañas. La Caja lo sabe, ustedes lo saben, y por eso ya soltaron la vara más importante del cierre de año: las fechas exactas en que va a caer la pensión del IVM y, por supuesto, el tan esperado aguinaldo. Así que saquen el celular o el calendario de la refri, que aquí les va el santo y seña para que se organicen y no los agarren con los calzones abajo.
La movida está así, para que no haya enredos. La gente de la Gerencia de Pensiones de la CCSS se puso las pilas y ya confirmó todo el cronograma para lo que queda de este 2025. La verdad es que se agradece, porque con tanta vuelta y tanto despiche que hay a veces, tener estas fechas fijas da una paz mental increíble. Tomen nota, que esto es oro puro:
Ahora, hablemos de la estrella del show: el aguinaldo. Ese depósito de noviembre es una alegría, pero también puede ser una trampa mortal si uno no se ordena. Todos hemos estado ahí, sintiéndonos millonarios por un día y al siguiente preguntándonos a dónde se fue toda la plata. Un consejo de compas: antes de volverse locos comprando regalos o planeando la fiesta del siglo, siéntense un toque a pensar. Lo primero es salir de las deudas más necias y guardar un campo para el marchamo, que siempre llega a aguar la fiesta. Y la jugada maestra, la que separa a los novatos de los pros, es guardar un colchoncito para la sufrida cuesta de enero. ¡En serio, su “yo” del futuro se los va a agradecer con el alma!
Diay, pero para que toda esta planificación funcione, hay que tener un par de cosas en orden. No se jale una torta pensando que la plata va a caer por arte de magia. Primero, lo más obvio: la cuenta bancaria que tienen registrada en la Caja tiene que estar activa. Si la cambiaron hace poco o la van a cambiar, muevan cielo y tierra para actualizar los datos en la CCSS cuanto antes, si no, se les va a hacer un enredo y el depósito se les va a atrasar. Segundo, recuerden que cada banco es un mundo. Hay unos que depositan en la madrugada del día que es, y otros se toman su tiempo durante la mañana. Así que no se ahueven si a las 5 a.m. no ven el depósito. Denle chance.
Y si llega el día, pasa la mañana, la tarde y nada que la plata aparece, respiren profundo y sigan estos pasos antes de entrar en pánico. Lo primero es revisar bien los movimientos de la cuenta, a veces el banco no notifica pero el dinero sí entró. Si no hay nada, el siguiente paso es llamar a su entidad financiera para ver qué pasó. Puede que el problema sea de ellos. Si el banco dice que todo está en orden, entonces sí, es momento de contactar directamente a la Gerencia de Pensiones de la Caja para que rastreen esa transacción. Esperemos que nadie tenga que pasar por ese estrés, pero es mejor saber qué hacer por si las moscas. Al final, lo importante es que esa platica, que tanto se han ganado, llegue a donde tiene que llegar.
En fin, maes, ya tienen toda la información. Ahora la bola está en su cancha. Organizarse bien con la plata es todo un arte, sobre todo en estas épocas. ¿Y ustedes? ¿Ya tienen un plan maestro para el aguinaldo o son del team "que la vida me sorprenda y en enero vemos qué hacemos"? ¡Cuenten el chisme en los comentarios!
La movida está así, para que no haya enredos. La gente de la Gerencia de Pensiones de la CCSS se puso las pilas y ya confirmó todo el cronograma para lo que queda de este 2025. La verdad es que se agradece, porque con tanta vuelta y tanto despiche que hay a veces, tener estas fechas fijas da una paz mental increíble. Tomen nota, que esto es oro puro:
- Setiembre: El depósito llega el martes 30 de setiembre.
- Octubre: La platica cae el viernes 31 de octubre. ¡Justo para Halloween!
- Noviembre (¡El bueno!): Marquen este día con todos los colores que tengan. El viernes 28 de noviembre depositan no solo la pensión, ¡sino también el aguinaldo! Ese día las cuentas bancarias van a sonreír.
- Diciembre: Y para cerrar el año, el último pago es el martes 30 de diciembre.
Ahora, hablemos de la estrella del show: el aguinaldo. Ese depósito de noviembre es una alegría, pero también puede ser una trampa mortal si uno no se ordena. Todos hemos estado ahí, sintiéndonos millonarios por un día y al siguiente preguntándonos a dónde se fue toda la plata. Un consejo de compas: antes de volverse locos comprando regalos o planeando la fiesta del siglo, siéntense un toque a pensar. Lo primero es salir de las deudas más necias y guardar un campo para el marchamo, que siempre llega a aguar la fiesta. Y la jugada maestra, la que separa a los novatos de los pros, es guardar un colchoncito para la sufrida cuesta de enero. ¡En serio, su “yo” del futuro se los va a agradecer con el alma!
Diay, pero para que toda esta planificación funcione, hay que tener un par de cosas en orden. No se jale una torta pensando que la plata va a caer por arte de magia. Primero, lo más obvio: la cuenta bancaria que tienen registrada en la Caja tiene que estar activa. Si la cambiaron hace poco o la van a cambiar, muevan cielo y tierra para actualizar los datos en la CCSS cuanto antes, si no, se les va a hacer un enredo y el depósito se les va a atrasar. Segundo, recuerden que cada banco es un mundo. Hay unos que depositan en la madrugada del día que es, y otros se toman su tiempo durante la mañana. Así que no se ahueven si a las 5 a.m. no ven el depósito. Denle chance.
Y si llega el día, pasa la mañana, la tarde y nada que la plata aparece, respiren profundo y sigan estos pasos antes de entrar en pánico. Lo primero es revisar bien los movimientos de la cuenta, a veces el banco no notifica pero el dinero sí entró. Si no hay nada, el siguiente paso es llamar a su entidad financiera para ver qué pasó. Puede que el problema sea de ellos. Si el banco dice que todo está en orden, entonces sí, es momento de contactar directamente a la Gerencia de Pensiones de la Caja para que rastreen esa transacción. Esperemos que nadie tenga que pasar por ese estrés, pero es mejor saber qué hacer por si las moscas. Al final, lo importante es que esa platica, que tanto se han ganado, llegue a donde tiene que llegar.
En fin, maes, ya tienen toda la información. Ahora la bola está en su cancha. Organizarse bien con la plata es todo un arte, sobre todo en estas épocas. ¿Y ustedes? ¿Ya tienen un plan maestro para el aguinaldo o son del team "que la vida me sorprenda y en enero vemos qué hacemos"? ¡Cuenten el chisme en los comentarios!