Maes, a ver, seamos honestos. ¿Cuántos de nosotros no pasamos la semana pegados a una pantalla, soñando con mandarnos a la montaña el finde para desconectar de tanto brete? Bueno, si usted es de esos que de verdad se toma en serio la vara del ciclismo, le tengo una noticia que le va a poner los pelos de punta y las piernas a temblar (de pura emoción, claro). Agárrense fuerte, porque la quinta edición del Cross Costa Rica MTB ya tiene fecha y, por lo que se ve, viene más salvaje que nunca. Esto no es un simple paseíto dominguero para ir por el gallo pinto; esto, señoras y señores, es el verdadero campo de juegos para los que aman sufrir sobre dos ruedas.
Del 31 de octubre al 2 de noviembre, prepárense para un evento de tres días que es, básicamente, una clase de humildad patrocinada por la geografía de Tiquicia. Y es que los números no mienten: estamos hablando de 170 kilómetros de recorrido con un ascenso acumulado de 7.500 metros. ¡Siete mil quinientos! Diay, para que se hagan una idea, es como subir el Chirripó dos veces y todavía quedar debiendo. La organización ya soltó la ruta y, ¡qué nivel de trazado! El primer día se arranca desde el Hotel Terraza del Pacífico para terminar en San Pablo de Turrubares, un calentamiento que ya de por sí es un reto mayúsculo. La vara se pone seria de verdad al día siguiente.
El segundo día es, probablemente, donde más de uno va a negociar con todos los santos que conoce. La salida es desde el Campamento Oikoumene, y el menú del día incluye un "tour" por las faldas de dos colosos: el Irazú y el Turrialba. Imagínense la vara: estar ahí, pulseándola en medio de paisajes que le quitan el aliento (si es que todavía le queda algo después de la subida). Las vistas desde allá arriba tienen que ser una cosa de locos, de esas que hacen que cada gota de sudor y cada músculo adolorido valgan la pena. Tener la oportunidad de rodar por esos terrenos, con esos gigantes de fondo, es algo que está a cachete y que pocos eventos ofrecen con este nivel de exigencia.
De hecho, el mismo Carlos Chaves Mata, que es la mente maestra detrás de todo este evento, lo dejó clarito: "Sabemos que nos hemos convertido en una de las carreras más exigentes del MTB nacional". Y no es para menos. Este evento se ha ganado a pulso la fama de poner a prueba hasta a los ciclistas más pintados y con más experiencia. El tercer día, para rematar, tiene un recorrido hacia Cabeza de Vaca y, como si no fuera suficiente tortura, le meten un tramo de Cross Country (XCO) justo antes de la meta. ¡Pura maldad! Pero de la buena, de la que forja leyendas. Y ojo al dato, que me parece un detallazo: se permite asistencia personal en cualquier punto. Un alivio saber que si a uno se le rompe un chunche o se queda sin agua, un compa le puede hacer el favor.
Al final, el Cross Costa Rica MTB es más que una simple competencia; es una aventura personal, una prueba de resistencia mental y física que lo lleva a uno al límite. Es de esos eventos que, si logra terminar, le da derecho a rajar por todo un año. Es una inversión en dolor, sudor y paisajes increíbles que se pagan con una satisfacción que no tiene precio. Así que la pregunta es obligada para toda la comunidad cletera de este foro: ¿Quién de aquí se le mide a este semejante reto? ¿Alguno ya la ha corrido en años anteriores y tiene algún consejo para los valientes (o locos) que se van a mandar por primera vez? ¡Cuenten todo en los comentarios, maes!
Del 31 de octubre al 2 de noviembre, prepárense para un evento de tres días que es, básicamente, una clase de humildad patrocinada por la geografía de Tiquicia. Y es que los números no mienten: estamos hablando de 170 kilómetros de recorrido con un ascenso acumulado de 7.500 metros. ¡Siete mil quinientos! Diay, para que se hagan una idea, es como subir el Chirripó dos veces y todavía quedar debiendo. La organización ya soltó la ruta y, ¡qué nivel de trazado! El primer día se arranca desde el Hotel Terraza del Pacífico para terminar en San Pablo de Turrubares, un calentamiento que ya de por sí es un reto mayúsculo. La vara se pone seria de verdad al día siguiente.
El segundo día es, probablemente, donde más de uno va a negociar con todos los santos que conoce. La salida es desde el Campamento Oikoumene, y el menú del día incluye un "tour" por las faldas de dos colosos: el Irazú y el Turrialba. Imagínense la vara: estar ahí, pulseándola en medio de paisajes que le quitan el aliento (si es que todavía le queda algo después de la subida). Las vistas desde allá arriba tienen que ser una cosa de locos, de esas que hacen que cada gota de sudor y cada músculo adolorido valgan la pena. Tener la oportunidad de rodar por esos terrenos, con esos gigantes de fondo, es algo que está a cachete y que pocos eventos ofrecen con este nivel de exigencia.
De hecho, el mismo Carlos Chaves Mata, que es la mente maestra detrás de todo este evento, lo dejó clarito: "Sabemos que nos hemos convertido en una de las carreras más exigentes del MTB nacional". Y no es para menos. Este evento se ha ganado a pulso la fama de poner a prueba hasta a los ciclistas más pintados y con más experiencia. El tercer día, para rematar, tiene un recorrido hacia Cabeza de Vaca y, como si no fuera suficiente tortura, le meten un tramo de Cross Country (XCO) justo antes de la meta. ¡Pura maldad! Pero de la buena, de la que forja leyendas. Y ojo al dato, que me parece un detallazo: se permite asistencia personal en cualquier punto. Un alivio saber que si a uno se le rompe un chunche o se queda sin agua, un compa le puede hacer el favor.
Al final, el Cross Costa Rica MTB es más que una simple competencia; es una aventura personal, una prueba de resistencia mental y física que lo lleva a uno al límite. Es de esos eventos que, si logra terminar, le da derecho a rajar por todo un año. Es una inversión en dolor, sudor y paisajes increíbles que se pagan con una satisfacción que no tiene precio. Así que la pregunta es obligada para toda la comunidad cletera de este foro: ¿Quién de aquí se le mide a este semejante reto? ¿Alguno ya la ha corrido en años anteriores y tiene algún consejo para los valientes (o locos) que se van a mandar por primera vez? ¡Cuenten todo en los comentarios, maes!